Overlord: La niña y el nigromante

Parte 14

... 2 días después de terminar la movilización...

La operación era sencilla en teoría, ser arrojados sobre las defensas de la federación en avión, neutralizarlas junto a los aeródromos y mantener una superioridad aérea hasta la llegada de las fuerzas de desembarco, sencillo...al menos...en teoría.

La oscuridad era total en aquel largo y estrecho compartimiento, hombro con hombro, las tropas del 203 se preparaban para el salto, colocándose su equipo de vuelo, sus paracaídas, munición y armas.

El lugar era sumamente estrecho, apenas con el espacio suficiente para que todos pudieran moverse un poco, aun así, nadie se quejó, en completo silencio completaron sus preparativos y volvieron a la calma total; el ruido de los motores del avión atravesaba el fuselaje, filtrándose en el compartimiento e inundándolo con el estruendoso ruido de las hélices.

Ya habían hecho una misión parecida antes, entonces... porqué estaban tan nerviosos?
La respuesta era simple.

Durante su asalto a la entente, su objetivo había sido asediar y neutralizar un lugar que estaba pensado para impedir ataques navales, siendo deficiente sus defensas antiaéreas, lo que de cierta manera facilitó el trabajo, pero ahora sobrevolaban un lugar que estaba claramente enfocado en la superioridad aérea, era muy probable que los detectaran antes de alcanzar su objetivo, lo que suponía atravesar al enemigo natural de los magos aéreos, la artillería antiaérea.

De uno de los costados del avión, cerca de la puerta corrediza, única entrada y salida de la aeronave, un pequeño foco rojizo comenzó a iluminar de manera intermitente el lugar, su brillo carmesí indicaba la proximidad al punto designado, por lo que Tanya se giró para contemplar a sus hombres, no habría discursos motivacionales ni palabras de aliento, pues Tanya confiaba en la victoria al contar con las 2 enviadas de Ains

Narberal y shizu aguardaban detrás de la niña, sus ropas habían sido sustituidas por overoles militares típicos de los magos aéreos, pero no portaban con ellas nada de equipo reglamentario.

Sus espaldas estaban libres de paracaídas y el equipo de vuelo mágico tampoco se encontraba siendo usado, lo único diferenciable que una de ellas acarreaba en su cinturón era un rifle blanco de extraña constitución.

Tanya había insistido en que al menos fueran equipadas con radios reglamentarias, cosa que habían rechazado rotundamente, siendo un anillo que la mayor degurechaff usaba en su mano la única forma de comunicarse con ellas.

La pequeña soldado no deseaba llevarse mal con las nuevas chicas, pero su humor era si bien o malo o indescifrable, por lo que decidió pasar de ellas y explicar de nueva cuenta las instrucciones de la misión.

-bien caballeros, las órdenes son hacer un entente versión 2, eliminar sus defensas costeras, aeródromos y artillería, entendido?

-si!-

-comandante, como nos desplegaremos?-

Weiss era precavido, un ayudante francamente excepcional y, pese a ya conocer el orden de despliegue, fingía ignorancia para que el resto de sus compañeros pudieran escuchar también.

-3 columnas, la teniente serebryakov dirigirá el grupo 2, teniente Weiss, usted será el grupo 3 y yo el 1, el grupo 3 mantendrá sobrevuelo para derribar las aeronaves enemigas que intenten despegar y dar apoyo, 1 y 2 atacaremos tierra...la teniente serebryakov se encargará de los aeródromos y las defensas costeras, nosotros la artillería y cualquier bastión de operaciones que encontremos-

Todos respondieron afirmativamente, dejando claro que comprendían su objetivo, en ese momento fue hora de asignarles su lugar a las recién llegadas.