ANGELITO 🔞 || Dabi x Tú ||

Capítulo 34

Separa su mano de la herida finalmente pero yo seguí llorando y sollozando con fuerza.

-Dabi... aún duele... me mentiste de nuevo -comenté. Él me abraza cálidamente.

-Lo siento... -apoya su frente en mi cuello ya que yo no podía mantener mi cabeza.

-Touya... -murmuré apenas audible hasta para él-. Deja de mentirme...

Él se aferra amí, apretándome contra su cuerpo sin querer soltarme.

-Te prometo... No. te juro por lo que más quieras que no volveré a mentirte ¿está bien? No lo haré más...

Sonreí apenas.

-¿No me mentiras de nuevo? -murmuré y lo miré a los ojos.

Él contraía sus facciones como si quisiera llorar, pero en lugar de eso aparecen gotas de sangre de las heridas en sus ojos. Levanté una mano con esfuerzo y limpié aquellas gotas. Él agarra mi mano.

-Te lo juro...

-Recuérdalo...

Mis ojos se cerraron ya por completo y lo único que pude sentir fueron las gotas de lluvia. Pero... escuché a Touya... como último.

***

***

Poco a poco sentía mis sentidos regresando a su funcionamiento habitual. Abrí los ojos lentamente y miré a todos lados, no había nadie. Me senté con esfuerzo, miré mis manos por un segundo pero entonces la puerta se abre.

-Touya... -dije al verlo.

Él me mira asombrado pero al segundo ya lo tenía sobre mí, abrazándome con fuerza. Yo le correspondí al instante mientras mis ojos comenzaron a lagrimear. Escuché más pasos acercarse y cuando me separé de Touya vi a los de la Liga.

Twice, Toga, Spinner y Mr. Compress corrieron hacia mí con notables lagrimitas.

-¡______!

Una pared de fuego azul se forma haciendo que se detengan y Twice entrara en pánico y pide agua.

-No se acerquen tanto -advierte Touya.

Yo me reí un poco pero luego vi como Shigaraki y Kurogiri se acercaban.

-Al fin ya no tendremos que aguantar a Dabi estando de malas -comenta Shigaraki. Sonreí un poco.

-Pero por desgracia tendremos que aguantar a otra cosa que será molesto -murmura mientras se aleja.

-¿Huh? -miré a Touya pero él tenía la mirada en el suelo- ¿A qué se refiere? -pregunté mirando a Kurogiri.

-Yo se lo puedo explicar.

Abrí los ojos de par en par y volteé rápidamente hacia la puerta de nuevo.

-Mamá...

Ella camina hacia mí sonriendo y me abraza con cariño.

-Que bueno que despiertas, hija.

-¿Qué...? Pero... ¿Qué haces aquí? -cuestioné.

-¿En serio crees que iba a dejarte sola?

-Pero... no quiero que ahora a ti también te busquen.

-Tranquila... eso no me importa en lo absoluto. Pero de igual forma nadie sospecha nada de mí.

La abracé con fuerza y escondí mi rostro en su cuello. Se sentía tan bien tener a mamá conmigo, me reconfortaba.

-Ahora... -dice al cabo de unos segundos y se sienta a mi lado-. Tenemos que hablar.

Los de la Liga se van a excepción de Touya quien se queda recostado contra la pared.

-¿Qué suede...? -pregunté nerviosa.

-Cariño, antes que nada quiero que mantengas la calma todo el tiempo y trates de mantenerte cuerda.

-Me estás asustando... -ella suspira.

-______... estás embarazada...

Me quedé paralizada, analizando aún lo que mamá acababa de decir.
¡¿Qué?!

-¿C..Cómo? -murmuré.

-Mira... cariño, hasta ahora estuviste inconsciente por dos meses... por eso estás así -presiona su mano contra mi estómago levemente abultado, apenas se nota la diferencia pero sí que la hay.

Yo bajé la mirada hacia allí. Estaba que no podía hablar.

-Dabi ya me dijo todo, así que sí... están esperando un hijo suyo.

Yo agaché la mirada. No podía ver a Touya... no ahora... no después de saber esto que es delicado con nuestra situación.

-Mejor... los dejaré para que hablen del tema -dice mamá levantándose para luego irse.

Nos quedamos en silencio pero no pude evitar que mis ojos comenzaran a cristalizarse, una lágrima resbala por mi mejilla pero la limpié enseguida.

-Lo siento... -dije por fin-. Es mi culpa yo...

-¿De qué hablas? -me interrumpe-. La decisión de hacerlo fue de ambos, si yo no hubiera querido no lo habría aceptado.

-Pero ahora... -llevé mis manos a mi estómago-. En la situación en la que estamos esto es horrible... además... sé que tú no querías esto y no quiero obligarte. Pero tengo miedo... yo...

Sentí que me tomó por los hombros y me hizo mirarlo.

-No me obligarías a nada y... ¿A qué le tienes miedo? -solté un sollozo.

-Tú sabes... Mi papá abandonó a mi mamá cuando se enteró de que estaba embarazada...

-¿Crees que seré igual a ese bastardo? Yo no te dejaré sola.

-¿Lo dices en serio? -murmuré mirándolo a los ojos esta vez. Él quita mis lágrimas con sus pulgares.

-Te juré que no iba a volver a mentirte... así que créeme ahora que te digo que jamás te abandonaría.

Lo abracé con fuerza y rompí en llanto. Él me correspondió pero lo sentía temblando. Estaba igual de asustado que yo... lo sabía y lo entendía.

-Te prometo que nunca los lastimaré... ni a ti, ni a él o ella... no seré como mi viejo...

-Gracias Touya, de verdad... Gracias...

Me acaricia la espalda mientras sigue abrazándome.

-No tienes porqué agradecer. Seré un villano pero sé sobre responsabilidades.

-Aún no puedo creerme esto. No estaba lista para ser madre...

-Menos yo, pero ya está sucediendo. No te preocupes, estaré contigo y te ayudaré con esto.

Me aferré a él suspirando aliviada de tenerlo conmigo. Sonreí escondiendo mi rostro en su cuello por mucho tiempo hasta que bostecé cuando me calmé.

-Será mejor que duermas...

-Duerme conmigo... -pedí.

-Lo iba a hacer de todas formas -responde sonriendo y haciéndome sonreír de igual forma a mí.

Ambos nos acostamos, me apegué a su pecho y lo abracé consiguiendo que él también me abrazara a mí. Usé su brazo de almohada y enredamos nuestras piernas. Mis ojos fueron cerrándose y poco a poco fui quedando dormida otra vez.