Degenerates | Minshua

Too good at goodbyes

Jisoo no se despidió de Wonwoo apropiadamente. Escribió una breve carta y espero hasta que Wonwoo estuviese lejos de su cafetería para aparecerse. La madre de Wonwoo le sonrió, mientras se aferraba a esa delgado sobre. "Regreso a mi hogar," Jisoo mintió, y la mujer le brindo una leve palmada en sus hombros.

"Sólo te deseamos lo mejor a donde sea que vayas y ya eres como de la familia, así que puedes venir cuando quieras." Su dulce voz dijo, y se abrazó a esa pequeña ilusión de regresar algún día mientras asentía. "Despídame de Wonwoo cuando regrese. Mi tren parte en treinta minutos." Jisoo no podía evitar el deseo de querer quedarse un segundo más en aquel pequeño y acogedor lugar. Hoy, hay dalias en la ventana otra vez -con ese bello color purpura. La mujer gira su atención hacia las flores también. Ella toma una entre sus dedos, colocándola gentilmente sobre las manos de Jisoo y éste la miro, perplejo.

"Wonwoo dice que las dalias representan elegancia bajo presión. A veces la gente experimenta situaciones difíciles en su vida, pero las dalias nos recuerdan ser amables y pacientes. Toma esta como un amuleto de la suerte." Jisoo miro hacia la pequeña flor sobre su mano, y le dio una sonrisa débil a la mujer, seguido de un difuso "Gracias." Jisoo finalmente salió de su pequeño lugar seguro, arrastrando su esbelta figura bajo el sol. Al menos, el tren se detuvo -una probable señal de que estaba haciendo lo correcto para sí mismo. No tenía muchas cosas para empezar así que Jisoo sólo empacó lo poco que atesoraba en bolsas de lona. Dejó la vajilla y mueblería tal y como estaban cuando llego. Jisoo incluso tiro el agua de los floreros, pero no pudo tirar a la basura la ultima rosa que había puesto junto a la ventana -esperando que esta muriera por su cuenta.

El viaje de regreso es silencioso, Jisoo se distrajo con el paisaje, capturando en una foto el brillante y azul cielo dentro de su teléfono. Hurgo por la galería en su celular, cautivado por las fotos que tenía de los verdosos campos, y de la elegante y aislada tienda de té donde las flores colgaban del techo. El perfil de Wonwoo se encuentra capturado en la esquina de una de esas fotografías, y la su mirada permanece cautivado ahí por un momento, recordando la manera en que el otro adornó rosas para él unos días atrás. Con Jisoo fuera del pequeño pueblo, se pregunta si la relación de Wonwoo con los Lee podrá regresar a como era antes -¿sería fácil de borrar como si nunca hubiese pisado ese lugar? Jisoo cierra sus ojos ante sus despiadadas preguntas, dejando que estás se entierren en su piel. Lo hacen sentirse vivo.

Jisoo regresa a la ciudad, repleta de gente -con rostros que no son lo suficientemente distinguibles como para ser recordados. Había llamado a Seungkwan anoche, sólo para asegurarse de que su apartamento ya había sido rentado. No planeaba regresar ahpi de todas formas. Jisoo no planeaba toparse con Junhui ni Mingyu otra vez. Seungkwan había pedido a un amigo que le encontrara un lugar agradable que se ajustara a su presupuesto, así que tomo el camión porque era mucho más barato que viajar en taxi para llegar ahí, y cuando estuvo parado frente al edificio antiguo, una nueva emoción surgió; era como si Jisoo por fin hubiera sido liberado y madurado como adulto. Su vida entera dependió de Mingyu y cuando su esposo lo abandono, se convirtió en un niño indefenso. Jisoo entró en el edificio donde se encontró con la portera, quien poseía rulos y una sonrisa adornada. Ella le sonrió brillantemente mientras alzaba una llave con su dedo indice para que Jisoo pudiese tomarlas. El lugar era reducido, pero era perfecto para Jisoo, quien apenas tenía cosas.

"Hay una cocina compartida donde se encuentra el lavabo, una barra y un horno microondas." Ella explicó, "Y la cama se encuentra pegada a la ventana, pero si lo prefieres puedes moverla. Esto es más como una casa compartida, así que en el pasillo se encuentran las dos únicas regaderas y baños. Los residentes de aquí las comparten. Hay un pizarrón fuera de las puertas, escribe tu nombre cada vez para reservar tu tiempo -oh, y no más de quince minutos en la regadera. Prepara tus productos de limpieza con anticipación para ahorrar tiempo, y si pierdes tu turno, y hay alguien más dentro espera hasta que todos hayan hecho lo suyo. ¿Alguna pregunta?"