Capítulo 56. Brote.

6.8K 536 532
                                    

Capítulo 56. Brote.

Jiang Cheng había recibido un fuerte golpe con aquel látigo para proteger a Lan Qionglin y a los cachorros, no se avergüenza de ello, solo es un poco molesto el ardor en su pecho. Ese mismo día volvieron al campamento cerca de Louyang, este apenas se estaba asentando y sería liderado por Jin ZiXuan y Nie HuaiSang.

Lan Ning lo acompañó hasta el pequeño pabellón que sería usado como enfermería, era una pequeña casa abandonada rodeada que una claro, era perfecto para asentarse por el momento, estarían dentro del territorio de Lanling, así que no debería de haber problema.

-Sanará rápido- Jiang Cheng tenía el pecho descubierto, mientras Lan Ning le aplicaba una pasta de terrible olor y que le ardía peor que el sol de verano sobre su piel- Solo no vaya al frente por una semana, descanse- Lan Ning terminó de vendar su pecho, y extrañamente tomó una de sus manos entre las suyas- Lo siento.

-¿Por qué?- Le hacía sentir raro ver a los omegas con esos ojos tristes, él era el mejor amigo de su esposo, y era una buena persona, claro que le agradaba Lan Ning, era un buen amigo.

-Nos protegiste, y ahora cargarás con esa marca- Bajó los ojos avergonzado, y apretó las manos de Jiang WanYin. En ese tiempo que estaban en los mismos escuadrones lograron volverse amigos.

-No es nada, no podía permitir que sean heridos, soy un alfa, ustedes son parte de nuestra familia- Jiang Cheng apretó levemente una de las manos del omega- Además, Wei Ying dijo una vez: 'Que una cicatriz en un hombre eran las marcas de nuestros actos heroicos'

-Eso suena como algo que A-Ying diría- Rio suavemente, y vio a Jiang WanYin- Descansa, iré a hacer el informe y se lo entregaré el Lan Dabo*- Lan Ning se puso de pie y le sonrió- Le mandaré a alguien con su cena, e iré a buscar a A-Ying.

-Ve que no se meta en más problemas- Sonrió medio lado al ver la sonrisa divertida de Qionglin y asentir con la cabeza antes de irse.

Tocó con cuidado las vendas sobre su pecho, realmente quedaría una cicatriz, pero su núcleo era lo suficientemente fuerte como para resistir, normalmente tomaría mucho tiempo que alguien se recuperara de un solo golpe. Su madre había castigado a un par de discípulos que habían deshonrado a la secta, él era muy pequeño cuando eso sucedió, pero su hermana se veía molesta y satisfecha cuando esos discípulos mayores habían sido golpeados cinco veces, solo para ser degradados y finalmente expulsados. Eso ocurrió un par de semanas antes de que Wei Ying llegara a su casa.

Su cena fue llevada por otro alfa, un cultivador Lan. Comió y fue extraño que Wei Ying no haya ido a verlo, pero al recordar que Jiang Yang estaba en alguna parte corriendo y alardeando sobre todo lo que hizo para sobrevivir ante esos perros Wen y cuidar de su pequeño primo a cuestas. Suspiró y se dejó caer sobre sus almohadas al recordar la mirada brillante de los bonitos ojos de Lan Yuan cada vez que miraba a su cachorro. Torció la boca divertido, Lan Wangji no estaba nada feliz con eso, a él no le molestaba y parecía que a Wei Ying tampoco, así que no intervendrían.

A-Yang aún era joven, y hasta cierto punto inocente, así que no habría problema. Aunque él a esa edad ya estaba marcando a Wei Ying con sus feromonas constantemente.

-Al menos el mocoso no se da cuenta- Susurró para el mismo.

Antes de que todos se fueran a dormir Lan Ning le dio un brebaje horrible a beber, después le trajo aquella pomada horrible y vendas nuevas, que debía de tomar un baño antes de cambiar sus vendajes. Cuando estuvo de nuevo solo y con una pequeña tina de agua tibia, frunció el ceño. Wei Ying aun no iba a verlo.

--֍--

Wei Ying realmente quería ir a ver a Jiang Cheng, pero tenía que asegurarse de que todos los cadáveres en aquella mansión fueran enterrados debidamente y purificado el lugar. Jugó un poco con el casi cadáver de Wen Xu, lo torturó con sus sombras y lanzando algunos de sus talismanes encantados por fantasmas de nivel inferior. El más divertido fue cuando sus tobillos se quebraron cuando aventó el espíritu de un obeso, el grito fue horrible y solo pudo sonreír.

El omega de Yunmeng JiangWhere stories live. Discover now