Capitulo 30 - La inseguridad de Jiang

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- ¿No han sabido nada de Ning? – Cuestionó un adolescente de Phoenyx un poco más maduro, los golpes que ha tenido que cargar y pensar situaciones incómodas le han hecho perderse más en sus pensamientos.

- No señor, aún estamos investigando las zonas donde fue notificada la expansión de energía – Escuchó con detenimiento, se ha concentrado más en su propio entrenamiento.

- ¿Piensas ir a investigar por tu cuenta?, escuché que Lan Zhan fue junto con ese Phoenyx a verificar – Alegó su madre que le observaba desde el marco de la puerta.

- Tal vez lo haga – Respondió.

- Has estado muy inestable últimamente, sería mala idea que fueras tu solo – Pero el menor siquiera le escuchó, sus manos ocupadas con algunos pergaminos y cajas de la habitación.

- Gracias por su preocupación, pero, Ning es alguien importante – Respondió con cierta altanería.

- Si sigues pensando de esa manera, no podré catalogarte como el siguiente líder de Yummeng – La mujer siquiera perdía su porte.

- No me interesa ser líder de un clan que no me corresponde – Eso molesto a la mujer. – Las criaturas como ustedes son fieles y poderosas, sin embargo, los Phoenyx –

- Ni se te ocurra terminar esa oración – Se acercó la dama, ligeramente rodeándose de rayos purpuras emitidos por Zidian.

- No le tengo miedo – Se volteo a verla con esos ojos retadores, la mujer ladeo ligeramente su rostro hacía el costado izquierdo.

- ¿Así es como serán las cosas?, bien, si logras derrotarme te dejaré ir – Eso entusiasmo al menor. – Pero, si te derrotó, volverás a tus quehaceres –

- Es justo – Saliendo al patio de Yummeng, la mujer siguió. – No me contendré –

- ¿Acaso te estoy pidiendo que lo hagas? – Los pétalos caían por el movimiento del viento y las energías emergidas, en cuánto una tuvo contacto con la fuerza de Zidian el joven contraataco, pero siquiera podía azotarle un golpe, patadas, puñetazos, tanto que incluso usaba sus manos sobre el suelo y con velocidad atacaba, mientras que la mujer esquivaba como si de una pluma se tratase. – ¿Es todo lo que puedes hacer? -

- Grr... - Por más que se la pensará para atacar, más le costaba querer azotarla, tanto fue su precisión que olvido un ligero detalle, su defensa.

- ¡Aun no estás listo para salir a explorar! – Azotándole un fuerte golpe en su abdomen, Zidian contraataco y le lanzo unos metros de su posición, quedando inmóvil por la energía eléctrica.

- Tsh – Por más que trataba de levantarse, le costaba, siquiera sus alas tenían reacción.

- Mi señora, no sea tan agresiva con Jiang – Comentó el líder del clan.

- ¿Qué no sea agresiva?, piensa ir a la guerra y siquiera tiene la mentalidad necesaria para hacerlo – Acercándose al menor, este se levanto e intento golpearla, pero, lo único que tuvo fue otro latigazo en su pecho. – Tienes tu cabeza ocupada con tonterías, ¿Cómo quieres tener un control si la ira te esta cegando? – Zidian le tomo del cuello y lo lanzo hacia atrás, haciéndole caer a un estanque.

- ... – Esas palabras alteraron más al menor, tanto que siquiera se dispuso a salir del agua, no era de profundidad y siquiera emergía.

- Mi señora – Pero su mirada fue tan fulminantemente que en silencio se quedó, la mujer camino hasta donde este había caído.

- ¿Cuánto tiempo más te quedarás allí? O ¿Acaso estás esperando que te saque con Zidian? – Tentando el anillo.

- ... - Con la cabeza gacha salió, siquiera decía algo.

¡Un Phoenyx Enamorado!Where stories live. Discover now