¡Un Phoenyx Enamorado!

Capítulo 13: El misterio a la vuelta de la cuadra, Xichen y Jiang.

Dos semanas y media pasaron al incidente de Wuxian y la calma en Gusu estaba más que presente, haciendo que algunos sintieran incomodidad a la falta del menor.
Era extraño para ellos no tenerlo cerca y saber de sus travesuras o incluso que se presenciara una explosión, derrumbes o siquiera las risas consecutivas que este solía emitir ante sus travesuras o jugueteos.

Tal calma era tan notoria que hace años que no se sentía así, los viejos incluso sentían que su Clan no era el mismo, no lo aceptarían, pero extrañaban aquel niño estruendoso.

-¿Todo bien en Gusu?- Pregunto Wangji a la presencia de su hermano, ambos yacen tomando té en una mesilla de madera cuadrada y algunos bocadillos encima.

-Esta, tranquilo- Respondió con su tacilla en manos, hicieron reverencia y ambos bebieron té.

-¿Tío está bien?- No se ha dispuesto a bajar, teme en dejar solo a Wuxian y los viejos quieran lincharlo por sus travesuras.

-Si- Se podía apreciar cierta tensión sobre su charla.

-¿Hermano está bien?- Silencio. Alzo su mirada a este, sin embargo, Xichen solo mantenía su semblante sonriente y alegre. -¿Sin preocupaciones?-

-Estoy bien, sólo que vine a despedirme- Alerto a su hermano.

-¿Acaso tú?- Aun caía sobre los juegos y bromas de Xichen. -¿Hermano? Déjamelo a mí, yo me haré responsable por el daño de Wei Ying-

-¿Mmmm?- Casi de inmediato sonrío -Sigues igual de inocente Wangji, no haré nada de eso, saldré en un viaje- Respiro aliviado su hermano dragón, no era bueno para asimilar las travesuras de su hermano.

-No hagas eso de nuevo- Comentó Wangji.

-Todos estos años y sigues cayendo ¿Cuándo aprenderás?- Para el mayor era importante tener esas charlas con su hermano, y el molestarlo también.

-No somos unos niños ya... Pronto serás el líder del clan- Interrumpido.

-¿Desde cuándo me sermoneas?- Silencio, vio como este bajo su mirada. -Veo que estas cansado ¿Por qué no descansas un momento?- Negación -Me quedaré con Wuxian hasta que despiertes-

-¡Ah!- Ambos sobresaltados salieron a ver que había sucedido y porque el estruendo.

-¿Qué pasa?- Ambos en la puerta observaban al pequeño colgar de entre unos tendederos, enredado con las cuerdas que sostienen la ropa.

-Joven Wei Ying ¿Qué hace?- Pregunto evitando la pena de soltar la carcajada, era una escena bastante cómica.

-Estaba intentando volar; pero, se me atravesó el tendedero- Sus alas yacen enredadas y por más que quisiera aletearlas le costaba, de pronto el cordón se zafo haciendo que este cayera con fuerza al suelo. -Auh...- Wangji suspiro pesadamente.

-Ya veo, es duro ser padre de un Phoenyx...- Bromeo, su hermano por otro lado camino hasta el pequeño zafándose de su agarre, de inmediato se levantó entusiasmado.

-¡Lo volveré a intentar!- Aquel Dragón de semblante serio le observaba hincado, percatándose de que aún traía ciertas cuerdas en sus alas.

-Espera, Wei Ying- Al abrirlas sintió cierto malestar sobre su zurda, se apretó más por el cordón logrando lastimarle.

-¡Ah! ¡Ah!, ¡mi ala!, ¡duele!, ¡ah!- Giro tratando de zafarla y sin más no vio como una traviesa cubeta de madera se cruzo entre sus pies haciéndole caer nuevamente logrando empaparse con el agua de dicha cubeta. -Prrr...- Dándose por vencido.

Xichen a lo lejos cubría su boca con la manga evitando soltar la carcajada, fue una escena bastante divertida, podía pensar lo que estaba pensado Wangji en ese momento y, sin embargo, no le decía nada. Era más gracioso de ver como un niño estaba atrapado en el cuerpo de un adolescente.