Capítulo 9: La Confrontación de Jiang...

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Yanli, su hermana ha tenido un viaje de aproximadamente un mes a tierras que el mismo Jiang desconoce, preocupado siempre preguntaba por ella y Madame Yu le respondía sobre sus responsabilidades y que debe estar siempre preparado para cuando está regresará a casa, así podría recibirle con gran amor.

Sin embargo, esté se cuestionaba si estaba bien permanecer más tiempo en esas tierras, nunca serán su amado hogar y ni mucho menos verían a sus padres nuevamente, estaba temeroso en su interior, estar tanto tiempo separado de su hermana y de sus hermanos sin conexión o de no saber de los menores le generaba gran temor en el alma, ¿Qué tal si ya no regresarían a su casa? O ¿Qué tal si ya no habría más Phoenyx en el mundo?, ¿Esa sería su extinción?, Cuestiones que le atormentaban y desconcertaban totalmente al menor de aquellos tres.

No podía darse tal lujo de permanecer más tiempo en aquel Clan, estaba agradecido por las enseñanzas y educación, pero no dejaba de lado sus tierras, sus paisajes, sus amigos, sus hermanos y hermanas, no era más que un gran pesar que le envolvía su cabeza, dolores estomacales, gritos internos de saber ¿Cuál es el destino que le depará a su Clan?, ¿Con su familia?, ¿Qué hay del legado Phoenyx que tanto aprendieron a valorar?, ¿A respetar?, ¿A querer con el alma?, estaba dispuesto a emergerlo de las cenizas, no importaría como, comenzaría con el desarrollo del Clan.

Por tal motivo, decidió emprender un viaje en solitario, necesitaba respuestas y sentía que estar encerrado, "No tendría una solución"

-¿Cómo que no se encuentra?- La Matriarca se dirigió a la habitación del Phoenyx, encontrándose con una habitación completamente arreglada, sin embargo faltaba aquella persona la cual tenía enseñanzas avanzadas del Clan Yummeng. -Tsh, ese mocoso ¿Dónde estará ahora?- Se giró y con sus encargadas salieron del recinto en busca del menor. -No creo que haya ido lejos- Lamentable fue, que el menor había tomado una balsa en dirección a su hermana, en el viaje se encontraría con nuevos retos.

Rápidamente el día paso y este descendió cerca de un pueblo a las orillas del río Yummeng, caminó un gran sendero, buscando la manera de iniciar su entrenamiento como Phoenyx, cuando invadieron su hogar esté estaba practicando la manera de volar, era bueno en el arte, sin embargo, dejó de hacerlo y tenía la leve esperanza de volver a emerger de las cenizas, sus alas siempre las mantenía ocultas para no asustar al pueblo del Clan; así que se estaban volviendo obsoletas y eso le preocupaba aún más.

-Duelen- Extendía y cerraba consecutivamente, quería ejercitarlas y hacerlas fuertes, así soportarían su peso, mientras más caminaba más las movía. -Maldición, me concentre tanto en el entrenamiento de aquellas personas que olvide el mío, no hay posibilidad de que pueda volar, debo hacerme fuerte o de lo contrario- Cerró sus puños decidido.

En su hogar era uno de los menores con mayor potencial, sin embargo, también era un poco miedoso al no sentir la presencia de su hermana y Wuxian, pero está vez no se quedaría únicamente como su sombra, buscaría la manera de fortalecerse y el Clan Yummeng no sería su impedimento.

-Shijie, buscaré la manera de hacerme más fuerte, espera por mí, iré a buscarte en este basto mundo y cuando te encuentre nos iremos a casa- Comenzó a caminar a algún lugar sin rumbo hasta que llegó a una descendiente, bastante amplia como para entrenar sus alas. -Llegó la hora, tal vez lo logré- Sin importar el riesgo corrió hasta la orilla y saltó, recordó las enseñanzas de su maestra y a las terceras cuartas partes de la montaña logró emerger, sonriendo feliz a su logro, y más sorprendido por lograrle a la primera, más no tenía el aterrizaje muy bien dotado como el vuelo, así que fue a dar a unos cuantos metros sobre la tierra, golpeándose bastante su espalda, brazos y rodillas hasta caer de costado siendo detenido por la misma tierra y árboles a su paso, sus alas no sufrieron mucho daño como su cuerpo, pero, esto no era motivo de detenerse, así que volvió a intentarlo hasta que logrará un aterrizaje bien efectuado.

¡Un Phoenyx Enamorado!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora