Capítulo 12.

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- Señora, ¿cómo... cómo es esto posible?

Yibo llevaba bastante tiempo preguntando lo mismo y, por mucho que la mujer se lo explicara, continuaba de la misma manera.

- Yibo... tú mismo lo respondiste: él es el alfa de la leyenda - dijo sin apartar su vista del caldo que cocinaba.

- Pero es solo una historia.

- No seas escéptico, lo has visto con tus propios ojos.

- Lo sé... pero es imposible

- Nada es imposible.

La sala quedó en silencio ante la falta de palabras. El joven no salía de la estupefacción que le provocó ver al chico en la cama y muchas cuestiones atacaron su cabeza aunque había una más importante que el resto.

- ¿Y ahora?

- ¿Ahora?

- ¿Usted se ocupará de él?

- ¿Yo? Tengo muchos problemas, hijo. Además tenerlo conmigo es un mal augurio.

- ¿Y qué piensa hacer?

- Eso deberías pensarlo tú ya que es tu responsabilidad - apartó la cacerola del fuego agarrándola por la asa con una tela.

- ¿Está diciendo que debo ocuparme de él? - señaló el cuarto con su mano.

- Sí, justamente.

- ¿Por qué?

- Si eres su omega tienes que estar a su lado, además debéis estar juntos para...

- ¿Qué... qué qué ha... dicho? - comenzó a tartamudear interrumpiendo a la alfa. - ¿S... su omega? Él y yo no somos nada.

- Ambos tenéis una relación cercana por lo que he podido observar.

- No. El lobo era mi amigo, él... él es diferente.

- No es cierto, Zhan sigue siendo Zhan sin importar su forma - se sirvió un plato.

- Usted le conoce mejor, creo que estaría más cómodo aquí.

- Vaya desfachatez. Él y yo nos conocemos pero otro asunto muy distinto es que nos llevemos bien.

- ¿Y qué se supone que tengo que hacer yo?

- Seguir el destino, alcanzar el objetivo juntos.

- ¿Cómo quiere que lo haga si no sé cuál es?

- Lo único que tienes que hacer es continuar. Todo ya está escrito por lo que el destino te guiará sin que te des cuenta.

- De cuerdo pero de todas formas no sé cuál debe ser mi próximo paso. Estoy muy confundido ahora mismo.

- Solo puedo decirte adónde debes ir y qué es lo que tenéis que resolver.

- ¿Adónde y qué? - esperó a que continuara.

- Regresa a casa e intenta encontrar al culpable de las desapariciones.

El muchacho abrió sus ojos en señal de sorpresa. No entendía porque él debía ocuparse de aquello, ese asunto no le afectaba. Además no podía ir de nuevo con su progenitor, sería un completo suicidio.

- ¿Seguro que no está loca? ¿Cómo puedo volver a la cabaña con mi padre? Él me matará.

- No lo hará, él te necesita.

- Deje de decir bobeces.

- Pues la mayor de todas estás por escucharla en este preciso instante - el omega frunció el ceño. - Vuelve a tu casa con Zhan.

𝐴𝐿𝐹𝐴 (𝑍𝐻𝐴𝑁𝑌𝐼) | Finalizada (CORRIGIENDO)Where stories live. Discover now