Capitulo 5: Pero- ¿¡Que mierda Aker!?

709 51 19
                                    

Pero- ¿¡Que mierda Aker!?

Irina.

¿Por qué carajos tienes un arma? —pregunto sin poder evitarlo.

Noto como aprieta el volante, en verdad los anillos en sus dedos me hacen pensar mil cosas, entonces recuerdo cuando pensé cómo se vería el conductor de este auto y.... joder si me lo imagino como él.

—¿Por qué no tenerla? —responde con simpleza.

—No respondas una pregunta por otra, dime.

—¿No has escuchado el dicho que dice "es mejor tenerlo y no necesitarlo que necesitarlo y no tenerlo"?

—Eso es absurdo—bufo.

—No responderé esa pregunta—responde al fin secamente.

—Entonces, ¿Puedo hacerte una pregunta profunda? —intento jugar el mismo juego.

Tensa los dedos al volante y asiente.

—¿Por qué tienes un arma? —suspira.

—Por qué debo, tenerla. — es todo lo que dice.

—¿Por qué debes tenerla?

—Ya respondí la pregunta profunda—me retuerzo los dedos queriendo bufar.

—¿Que si me responderás entonces?

—No lo sé, ¿mi edad? —resoplo.

—No quiero saber tu edad, más de 25 no tienes y por lo mismo quiero saber qué coño haces con un arma.

Me da una mirada rápida mientras se acerca al club INFERNO.

—No responderé esa pregunta—repite.

—No, no lo hagas, apenas me conoces—me canso.

—No me refiero a eso Irina, no puedo—musita y con preguntas en mi lengua decido no decir nada más en el trayecto que queda.

Lo cierto es que tengo curiosidad. Sé o por lo menos creo, que no me hará nada ¿verdad? Si quiero saber qué hace con una por ¿seguridad? No lo sé quién sabe...

Pero luego recuerdo cuando dijo que él y Josep trabajaban juntos... ¿serán pandilleros de verdad?

—Oye—captó su atención—¿eres policía?

Veo cómo suelta una risa ronca lo cual lo hace ver más sexy de lo que es, se detiene en un semáforo y coloca una mano en mi muslo lo cual hace que me incendie de una vez y me mira.

Sus ojos negros parecen transportarme, me miran profundos y sin duda son algo jodidamente alucinante.

—Rusa... soy todo menos policía—me guiña un ojo y conduce.

De nuevo siento mis mejillas calentarse, me hecho el pelo hacia delante para que no me vea y miro por la ventana, cierro los ojos y respiro profundo intentando bajar la calentura que de un momento a otro se me subió.

Es un maldito horno.

No horno no, hoguera eso.

—Gracias... Por lo de hace un rato—murmuro—William siempre está molestándome... Me ayudaste mucho...

—No fui a ayudarte, Kaia me pidió que te buscara y lo hice. No me agradezcas no hago caridades—dice con el rostro de acero y con voz fría.

Alemán, en fin.

—Corriste... bien—confieso.

«No tan bien como yo, por supuesto».

—¿Bien? Corrí fenomenal, como siempre—responde y ruedo los ojos.

DOLOROSA CONEXIÓN [+18] #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora