Capitulo 18: Mood hot primer aviso.

869 45 12
                                    

Mood hot primer aviso.

Irina.

—¡¿Que yo que?!—chillo.

Aker se lleva una mano al oído y hace una mueca.

—¿Puedas chillar más alto?—murmura de mala forma.—súbete —ordena y niego.

—No.

—Súbete.

—No.

—Súbete.

—No.

Se remueve perdiendo la paciencia.

—Irina, súbete.

—Aker, lo de ayer era de vida o muerte... Ahora no, no puedo—niego mirando el auto.—casi nos matan, no puedo solo subirme y conducir de nuevo ayer era algo prácticamente necesario. Además ese auto no me gusta, los asientos son algo reducidos y...

—Si tienes tiempo para quejarte, tienes tiempo para conducir. Déjate de bobadas y sube ¿oh, eres una cobarde?—me reta perdiendo los estribos y aprieto los puños.

—No soy una cobarde, estoy mostrando mi descontento con esto.—me cruzo de brazos y él niega con la cabeza.

—Eres tan imposible—se coloca delante de mi —o subes o no van a la fiesta.—aclara y arrugo las cejas.

¿Por que es tan... Agh?

—¡No puedes pedirme eso!—chillo.

—Deja de patalear y sube.—se acerca a la puerta y la abre mostrándome el interior que me hace babear—sube.

—Aker—digo entre dientes.

—Irina—me lo dice de la misma forma.

«Por mis amigos»

Miro el auto, joder claro que quiero. Ayer se sintió tan ridículamente bien que hasta me da vergüenza decirlo.

Ver el auto no me hace recordar la noche del incendio es como si no hubiera tenido nada que ver, lo único que me hace recordar es la maravillosa sensación que había bajo mi dedos sujetando el volante la noche de ayer.

Me muevo, pero me detengo pensando en las miles de formas en las que puedo arruinar esto y quizás estoy siendo paranoica no lo sé, pero me aterra conducir y luego no poder detenerme, jamás.

Siento un pequeño empujón y camino hacia el auto con cautela. Pasó la yema de mis dedos por la puerta y me subo de un salto. Una vez adentro me muerdo la mejilla interna mirando el interior.

Mis dedos tocan el asiento de cuero y la palanca con suavidad, siento los vellos de mi cuerpo erizarse, hago el amago de colocar ambas manos al volante pero me detengo dejándola suspendidas en el aire.

—¡No permitas que tus pensamientos te limiten!—espeta, Aker.—¡Conduce!

Cierro los ojos y dejo las manos sobre el volante apretándolo con fuerza tanto que cuando los abro mis nudillos se tornan blancos.

—¡Hazlo, y si te da miedo, hazlo con el maldito miedo!—grita.

«Que motivador»

Suelto un suspiro mientras tiemblo y me pregunto si así se siente estar a punto de hacer lo que amas.

La puerta se cierra y miro la ventana y es Aker, quisiera fulminarlo con la mirada pero mi atención está en esta maravilla de coche.

Boto el aire y antes de que me dé tiempo de arrepentirme enciendo el coche y piso el acelerador.

DOLOROSA CONEXIÓN [+18] #1Where stories live. Discover now