Different Love [En Edición]

Capítulo 19

Tommy

Me tumbé en la cama y cerré mis ojos haciéndome el dormido, poco a poco tranquilicé mi respiración e intenté no escucharlo a él, esto superaba mis límites.

No quería pensar en lo que había hecho la noche anterior, eran demasiadas emociones nuevas, empezando por lo celos. Después de unos minutos de cantar en mi mente Islands - The XX. Escuché que se levantaba de la cama, sus pies descalzos casi no sonaban por la alfombra, abrió y cerró una puerta ,probablemente la de un baño, y poco después el sonido de gotas de agua estrellándose contra el azulejo.

Con desconfianza abrí los ojos y dislumbré toda la habitación que ahora estaba bañada con la luz natural del medio día. Es enorme, las paredes frente a mí son grises, y las otras dos son blancas. El piso tiene una alfombra también blanca muy bien cuidada, la cama está pegada a la pared de atrás con una vestidura de... ¿Seda? No estoy seguro, pero esto no parece nada barato.

En frente mío está un mueble muy extraño, pareciera ser un librero, pero tiene puertas corredizas de espejo.

Mi pequeño y recién follado cuerpo se reflejaba perfectamente en aquellos grandes espejos, estaba muy despeinado y... ¡Oh mierda! En mi cuello y pecho se podían notar pequeñas e irregulares marcas violáceas.

—M-Me dejo... ¡Chupetones! —Susurré esperando que no me escuchara.

De pronto, escuché como dejo de caer agua y entré en pánico. No podía sólo quedarme en su... C-Cama y fingir dormir todo el maldito día. Tendría que hablar con él y decir que esto fue un... Error.

Pero yo se que esto no tuvo absolutamente nada que ver con un "error de ebrio" no lo quiero ver así, porque en realidad fue lo mejor que he sentido hasta ahora, así que la opción de decirle eso queda descartada.

<¿Y si él si lo ve así, como un error? A fin de cuentas soy su alumno> Algo dentro de mí se estremeció.

Una puerta color chocolate se abrió y de ahí salió Dereck con una toalla alrededor de la cadera. <Maldición. Se ve tan bien> solté todo el aire que había estado conteniendo y miré hacia la fina sábana que me cubría.

—Hola, por fin despiertas. —dijo seguro y sin la más mínima señal de vergüenza.

—Uhmm... H-Hola. —mi voz fue todo lo contrario a la suya, matices de timidez y felicidad se mezclaron con ella.

—¿Estás bien? — se acercó hasta donde estaba y se sentó frente a mí.

—Claro que sí, tonto.

El levantó mi barbilla y me besó suavemente en los labios, un cosquilleo recorrió todo mi cuerpo. Esto no está bien, somos hombres y él es mi profesor, me siento muy... ¿Pervertido?

Nuestro beso poco a poco se intensifico, se volvió más hambriento y desesperado. Casi sin darme cuenta una erección comenzó a crecer bajo mi bóxer, me sentía diferente, más... Caliente.

Me separé por falta de oxígeno, jadee un poco y Dereck recargó su frente sobre la mía, imitando mi jadeo.

-Te quiero, amor - Susurró mientras rozaba tiernamente mi nariz. <¿Amor?> no me esperaba eso, nunca nadie (aparte de mi madre) me había llamado así. Me gusta como suena.

Quería contestarle, pero él comenzó a acariciar mi brazo sólo con sus dedos, gimotee quedamente y mi rostro se volvió rojo. ¿Cómo es que con tan inocente toque me haga sentir tan excitado? Insisto... Esto no es normal.

Dereck bajó la mirada hasta la carpa que se había formado sobre la sábana, y frunció el ceño, empezaba a ser doloroso.

—No es que no me guste verte así... Pero esto no es ¿normal? —Me miró extrañado y yo me ruboricé aún más

—D-Déjame —Tapé mi rostro con las manos.

El oji-azul se quedó pensativo y al no recibir respuesta separé un poco mis dedos para poder verle. De la nada su expresión cambió y apretó los dientes, para después gruñirme.

—¿Qué tomaste ayer? —Bajé mis manos y ladee mi cabeza ¿A qué se refería con eso? Hice un recorrido mental por los cortos fragmentos que aún recordaba y me ruboricé ante algunos de ellos.

—Eh... No lo sé. ¿Cerveza?

—Bueno, por cómo te recogí ayer es obvio que tomaste cerveza, pero ¿nada más? ¿fumaste algo? — Fruncí levemente el ceño y tenía la palabra "No" a punto de salir por mis boca cuando recordé a Ian diciendo "Toma, esto te hará sentir mejor" y a los chicos que fumaban detrás de mí. Pero, ¿eso que tenía que ver con mi calentura?

—Hmm... Ian me dio algo para bajarme la borrachera.

Dereck apretó su mandíbula y cerró sus manos en un puño.

—Maldito hijo de puta.

—¡Hey! Es mi amig... —Dejé la frase inconclusa al sentir la potente mirada del chico con él que acababa de follar diciendo "Te matare si terminas de decirlo"

—Dios, Tomm. No entiendo como no te das cuenta. —Volvió a sentarse y pasó las manos por su cabello aún húmedo.

—¿De qué hablas?

—Te dio algo para calentarte.

<Espera... ¿QUÉ?>

Me quedé helado con los ojos muy abiertos ¿Ian era capaz de hacerme eso? Es cierto que me beso y tocó un poco... Pero de eso a intentar excitarme así, no lo creo. Dereck volteo aún molesto para mirarme y sin previo aviso estalló en carcajadas <¿Qué mierda?> Se acercó a mí y besó la comisura de mis labios.

—Qué alegría que no fue él quien lo disfruto.

Toda la sangre de mi cuerpo subió hasta mis mejillas. <Dios, esto es demasiado para mí, necesito despejar mi mente>

—Dereck... —Me gusta llamarlo por su nombre.

—¿Si?

—¿Puedo ducharme aquí?

—Si hubieras despertado un poco antes te obligaría a hacerlo conmigo. —Abrí los ojos como platos y aparte las cobijas. —Anda, la derecha es caliente.

Cuando me puse en pie sentí el dolor más fuerte y extraño de toda mi vida, pero lo que pasó para que me sintiera así valió la pena.

Caminé hasta el baño y tomé una larga ducha.