Capítulo 26

15.4K 844 118
                                    

Tommy

—Tomm, despierta. Alguien vino a verte. —Car me despertó muy suavemente mientras movía mi hombro.
—No quiero ver a nadie — Dije mientras tapaba mi cabeza con la almohada, y era verdad. No quería hacer nada más que comer y dormir por el resto de mi vida.
—¿Ni a mi? —Me quedé muy quieto, se podría decir que hasta me paralicé. Esa era en definitiva la voz de Ian desde el umbral de la puerta.
—Creo que los dejaré solos. —Car tosió un poco y se acerco a mí —En tu mesa de noche dejé una cámara, si se besan... Por favor, al menos déjame una foto.
—¡Carlee! —Grité
—¡Está bien! Ya me voy. Ian, por cierto —Le sonrió y puso su mano en el pecho del rubio —Si vuelves a drogar a mi hermano no volverás a ver la luz del día ¿entendiste?
—Sí, Car. Lo siento — Él agachó la mirada. Carlee era como una madre para los dos. —Oye, gracias por dejarme pasar.
—En realidad no lo hice, tú empujaste la puerta y rompiste la cerradura. Tendrás que pagarla.
—Ah... Lo siento, yo la arreglo.
—Sí, lo que digas.

La puerta se cerró tras mi hermana, escuché cada paso que Ian daba hacia mí y con ellos mi corazón se aceleraba. En mi interior solo pensaba "Car, ¿Por qué te fuiste? Ian va a matarme"
Sentí cómo la cama se hundía a mi lado y me asusté.

—Tommy, no actúes así conmigo. Nos conocemos desde los cinco años.
No estaba muy seguro de que contestar, pensé que estaría enojado conmigo de por vida por lo de ayer. Suspiré y me enderecé, en algún momento debería hablar con él sobre esto y sobre todo lo demás.
—Hola —Él me miro desconcertado y yo casi me desmayo al ver su rostro. Sobre su ceja tenía una extraña curación que seguramente él se hizo, y su labio inferior estaba hinchado y rojo. Maldición, a pesar de todo esto se veía bien. —L-Lamento lo de ayer, pero no esta bien lo que hiciste.
—¿Sobre Brown?
—No solo sobre Dereck, me drogaste con no sé qué porquería. —Él se quedó callado y bajó la mirada.
—¿Sabes? Creo que ya pagué por lo de Brown, y... ¡Espera! ¿Por qué le llamas Dereck? Él no deja que nadie de la Universidad le llame así ¿Qué pasa entre ustedes dos?
—No cambies el tema. No esta bien que digas mentiras.
—Entonces.... ¿Preferías que dijera la verdad? Tomm, siendo sinceros, no querías que dijera la verdad.
—Claro que sí, Ian — Él enarcó una ceja y me miró fijamente.
—No, no querías. En el fondo ya sabías lo que pasaba solo que no querías escucharlo.
—¿Por qué me besaste?
—¿Por qué me correspondiste? — Touché
—¡Yo pregunté primero! —Ian suspiró y guardó silencio unos instantes, se acomodó en la cama de forma que ahora estábamos totalmente de frente.
—Tommy, te quiero muchísimo ¿okay? Podemos solo olvidar todo lo que ha pasado estos días, no quiero estar enojado contigo, eres mi mejor amigo. You're my family
—No hables en inglés.
—¡Tommy! Por favor, no quiero estar así contigo. ¡Y deja de hacer puchero!
—¡Yo no...! —relajé los labios —Esta bien, sólo olvidemos todo. ¡Pero no me vuelvas a dar nada que me... me...
—¿Caliente? Vale, la próxima vez lo hago sin ayuda.
—¿QUÉ?
—Sólo bromeo —Dijo entre risas y luego se puso serio —a decir verdad no sé porqué lo hice. Estaba muy ebrio y pensé darte algo para que te relajaras ya que no estabas hablando con nadie. Pensé que había puesto gotas de LSD, pero después me di cuenta que no, y estando tan borracho me pregunté si así sería más fácil hacer lo que tanto tiempo quise. Fue una idiotez y lo siento muchísimo.
—No es chistoso, Ian. ¿a quién más has drogado?
—No lo uso en otras personas, alguna vez trate de darle a... —hizo una pausa y sacudió la cabeza — no importa a quién, lo que importa es que no las uso para drogar gente ¿por quién me tomas? Las uso para mí.
—¿Para ti?
—Para poder acostarme con mujeres —Abrí mucho los ojos. Jamás pensé que Ian necesitase ayuda con eso —A veces no me siento atraído o no quiero pero, soy yo, no puedo sólo decir que no tengo ganas ¿qué diría la gente? ¿Qué soy gay? No lo soy...
No lo reconocía, este nivel de inseguridad es extremadamente inusual en él.
—Ian... si no quieres acostarte con alguien no tienes porque hacerlo —Le dije en tono suave —Y, no hay nada de malo en ser gay ¿no?
Eso último no lo dije con tanta seguridad como lo primero. Pero, en el fondo sabía que era cierto.
—No Tomm, ser gay no es malo, es diferente nada más— hizo una pausa larga y esperé que continuara —el problema es que toda mi vida he sido mujeriego, ¿Quién soy si ya no me gustan las mujeres?
—¿Cómo que quién? Sigues siendo Ian, mi mejor amigo, el Ian que puede ser el mejor en la carrera que elija —Él sonrió —Eres más tú si dejas de lado lo que no te gusta. Y si eso son las mujeres ¿qué hay de malo? Al menos yo creo que eres muchas cosas más que un mujeriego.
Ian me abrazó y sentí que aguantó las lágrimas, respiró profundo y tembló antes de separarse de mí.

Different Love [En Edición]Where stories live. Discover now