Final

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Ubicación espacio/temporal: Antes de la boda de Ian, Tommy planeaba pedirle matrimonio a Dereck, pero tras pensarlo de más decidió no hacerlo. 

La boda de Ian fue hermosa, de un estilo bastante moderno y casi nada de flores. Al final de cuentas no le pregunté nada a Dereck quien ha estado un poco distante durante el camino de vuelta a casa. Me refiero a qué, estoy acostumbrado a no tener una charla dentro del auto con él. Siempre me he sentido como un invasor de su espacio privado ahí, pero ahora era diferente.

-Derek, ¿Estás bien? –Él me miró de reojo y asintió con la cabeza. Ya me había acostumbrado a sus lapsos dramáticos, a fin de cuentas nunca hablaba sobre él. Eso me hizo pensar en algo. ¿Cuánto realmente lo conocía? No sabía prácticamente nada de su pasado y sólo sabía lo de sus padres y no porque él me lo contara. Tal vez un día de estos lo haga pero, creo que tendré que presionarlo.

En ese momento el bebé comenzó a llorar y lo abracé e intente calmarlo. Dereck tomó una luz roja y cambió la Playlist que tenía y empezó a sonar canciones muy suaves y tristes tanto en español como en inglés. Alex poco a poco se quedó dormido.

Esto de ser padre es mucho peor de lo que esperaba, todo en mi vida ahora son biberones, pañales y mucha preocupación... ¡Extrema preocupación! Cada que cargaba a Alex me invadía un miedo terrible de hacerle daño pero Dereck siempre estaba ahí para calmarnos a los dos, aunque yo hubiera imaginado lo contrario, él era el papá tranquilo. Literalmente, no sabría que hacer sin él.

Las canciones melancólicas y suaves seguían sonando y decidí hacer algo que muy pocas veces hacía.

-Hey, ¿sabes? Siempre me ha parecido que tienes los mejores gustos musicales posibles. –Él frunció levemente el ceño y pocos segundos después de incómodo silencio sus labios un tanto pálidos y secos se curvearon hacia arriba y a pesar de la obscuridad pude ver sus mejillas rosadas.

-Gracias, Tomm. –Sonreí también sólo por saber que ahora estaba al menos un poco más feliz. –Sé que te lo digo muy a menudo, pero, sin importar lo que digan todos estoy muy agradecido de tenerte a ti y a Alex conmigo.

-Espera, ¿cómo que "sin importar lo que digan todos"? –Me arrepentí de haber dicho eso inmediatamente.

-Bueno, tú sabes. Todos son idiotas amargados. Sólo olvídalo. –Volvió la mirada al camino y aumentó ligeramente la velocidad.

-¿Sabes? Tu forma de literalmente huir de los problemas acabará por matarnos. –Entorné los ojos y me crucé de brazos muy molesto. De verdad no sabía que los demás pensaran que él no era feliz con nosotros. –Dereck, necesito que me expliques a qué te referías.

-Te dije que lo olvidaras. –Cambió su postura y enredó un poco más fuerte sus dedos al volante.

-No lo olvidaré y te vendré molestando todo el camino hasta que me lo digas

-Pues, aceleraré hasta que tu estómago se pegue a tu espalda. –No entendía en absoluto porque estaba tan molesto conmigo, y valoraba más mi vida que las respuestas.

-¡Tomm! Ya llegamos –Entre abrí los ojos y la luz del estacionamiento me cegó por unos instantes. –Ven, cierra la puerta y pon el seguro. Yo llevaré a Alex. – Hice lo que me dijo y subimos al elevador.

Dereck me miró de reojo varias veces hasta que llegamos al apartamento y abrí la puerta, tomé a Alex en mis brazos y lo llevé hasta su cuna. Me quedé unos instantes observándolo y no me creí que fuera mío. Quiero decir, es demasiado hermoso y frágil. Tenía el color de piel de su papá y por todos los pequeños berrinches que hacía seguramente tendría mi personalidad, pobre de él.

Different Love [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora