Lugar de paz -KATIE MCGRATH Y TÚ-

Se acaba hoy

Narras tú

–¿No que no tendríamos sexo?– preguntó Katie separándose de mis labios.

–Cállate, son solo besos– se rió mientras metía sus manos en mi camiseta. Nuestros hijos estaban tomando una siesta y Lyra aún no volvía de l casa de Chyler, así que no pude resistirme.

Bajé mis besos hasta su cuello y pasé mi lengua por él hasta volver a su boca y seguir besándola. Nuestras lenguas se movían a un ritmo perfecto y el aire ya comenzaba a faltarnos. La empujé a la cama y me senté sobre ella, puso sus manos en mi trasero para apretarlo y gemí sobre su boca. Me dio una nalgada y sonreí, mordí su labio y la miré a los ojos, soltándolo lentamente.

–Lyra no está...y nuestros cinco hijos están dormidos...eso no pasa seguido– llevó una de sus manos a mi cuello –Por favor...déjame hacerte mía– suplicó y me abalancé sobre su boca para besarla.

Katie me dejó bajo su cuerpo y se posicionó entre mis piernas, pasó su lengua por mi cuello y comenzó a besarlo con pasión.

–¡Mamis! Ya lle...– Katie se separó de mi cuello para mirar a la puerta y yo también miré, Lyra se sonrojó y miró fuera de la habitación de inmediato.

–Lo siento, cariño– se bajó de la cama y yo me senté.

–¿Ya están bien?– preguntó sin mirar y reí.

–¿Qué crees?– nos reímos y caminé hacia ella –¿Cómo te fue?– sonrió mirándome.

–Muy bien, vi una película con Lyra y...– me miró cuando reí.

–Ajá, una película– dijo Katie y la pequeña se sonrojó.

–Sí vimos la película...me da miedo hacer algo con la tía Chyler en casa– reí.

–Deben ser respetuosas con las demás personas en casa, aprende de mí y tu mami Katie– se rió –Pequeña...con tu mami lo hablamos y decidimos que nos mudaremos la próxima semana, solo tenemos que empacar las cosas que sacamos de nuevo y ya están los pasajes comprados– asintió –Chyler se irá en tres semanas más, así que este fin de semana ambas tendrán permiso para estar juntas...solas– sonrió –Y se quedarán en un hotel que queda cerca del parque de diversiones– me abrazó –Así que deja todo listo para la mudanza antes del viernes, porque nos vamos el lunes– asintió y abrazó a Katie.

–Gracias, mamis–.

———

–¿Te irás?– asentí a la pregunta de Emma.

–Tengo la casa comprada y terminaron de remodelarla hace unos meses...íbamos a mudarnos antes de que nacieran los bebés, pero por todo lo que pasó los planes se atrasaron...ya es tiempo de retomarlos– frunció su ceño.

–¿Y si te vas con ella y las cosas no resultan?– levanté mis cejas.

–¿Con ella? Emma, es mi esposa y la madre de mis hijos, iría a cualquier lugar con ella y sé que le encantará vivir en su tierra y cerca de su madre– suspiró.

–Tú también tienes familia aquí– negué.

–Mi familia se va conmigo– me miró confundida –Chyler y Melissa también se irán a Irlanda...les compré una casa– se rió.

–¿Las llevas para que vuelvan a traicionarte?– miré su mano y esta estaba en mi muslo.

–Emma...¿Por qué me dices esto?– suspiró –Ellas son mi familia...me hirieron, pero las cosas han mejorado– negó.

–Quizás solo se van contigo por el dinero– fruncí mi ceño –No sabes sus verdaderas intenciones– la miré.

–Las conozco y sé que sus intenciones son las mejores– le dio un sorbo a su café.