Ángel

1.4K 121 2
                                    


Narra T/n

Me sentía bastante débil, había perdido mucha sangre por las heridas que tenía, ahora maldecia a esa pelirroja ojos lindos, pero aún así debo confesar que pensé en salir peor de aquel lugar, solo dos impactos de bala, no estaba nada mal.

Hacia demasiado frío y de repente todo lo ví oscuro, estaba a punto de desmayarme, pero antes sentí unas voces no sabía si había alguien más o si solo estaba delirando.

Abrí mis ojos lentamente y mire a mi alrededor, estaba en una habitación con decoración infantil, de niña para ser exacta, era linda y acogedora, de repente una tierna voz se escuchó en mi oído.

X: Hola, despertaste - busqué de dónde venía la voz, era una niña con una gran sonrisa

X: Hola, despertaste - busqué de dónde venía la voz, era una niña con una gran sonrisa

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

T/n: No, creo que me convertí en zombie.

El rostro de la niña fue muy gracioso cuando le dije eso jajaja
Pero luego se reincorporó

X: Espera... Los zombies no hablan, y no me has intentado morder.

T/n: Tienes toda la razón - le dije soltando una carcajada - ahora una pregunta ¿Dónde estoy y quién eres tú?

X: Bueno verás, estás en una casa, con puertas, ventanas, invadiendo mi habitación y mi cómoda cama, y yo soy una niña.

T/n: ja ja ja, que chistosa saliste.

X: Me llamo Gabrielle y mi madre y yo te trajimos a nuestra casa, estabas mal herida, mi mamá te curó, y de hecho yo también ayudé.

T/n: Gracias Gabrielle - dije mirándome el vendaje que tenía - hiciste un muy buen trabajo, sabes, intentaré levantarme para agradecerle a tu madre ¿Me llevas dónde ella está?

G: Emm... Creo que deberías bajarle dos rayitas, ella está haciendo la cena y dijo que si despertabas no debías moverte, así que creo que mejor te quedas ahí invadiendo mi cama por un rato más, porque si yo fuera tú no lo intentaría.

T/n: Eso sonó a amenaza - le dije mirándola con los ojos entrecerrados y una leve sonrisa - ¿Cuántos años tienes? Para ser tan pequeña, tienes un sentido del humor avanzado jajaja

G: Y tú pareces aburrida, tengo 11.

T/n: Bien, me quedaré aquí, cómo tú lo órdenes jaja, pero te quiero molestar con un favor ¿Puedes regalarme un vaso con agua niña de 11 años?

G: Te lo vendo - dijo soltando una sonrisa.

T/n: Gabrielle - dije colocandome sería.

G: Está bien ya lo traigo, pero si escapas encontraré tú gran trasero y te traeré de vuelta.

Lo único que hice fue sonreír con sus ocurrencias.

Pasaron unos pocos minutos y entraba Gabrielle y su madre a la habitación, además de agua me llevaron la cena, de verdad tenía mucho tiempo que no comía tan a gusto.

T/n: Muchas Gracias Señora...? - le dije tratando que me diera su nombre.

Elizabeth, soy Elizabeth Collins y bueno esta es mi hija Gabrielle - me dijo dejándole un gran abrazo un un beso en su cabeza.

T/n: si, ya tuvimos un gran encuentro - la miré y le guiñe el ojo soltando ambas una gran sonrisa - quiero darle las gracias Sra Collins por lo que ha hecho por mi, y a ti también Gabrielle, de no ser por uds quizá estaría muerta en la mitad de la calle o en medio de la nada. Por cierto soy T/n, T/n Lovelace Ward.

E: Es un gusto T/n, aunque no sean las mejores circunstancias.

T/n: Así es - le contesté - me preguntaba, si podría pedirle un penoso favor, espero no le moleste.

E: Adelante - me dijo sonriendo.

T/n: ¿Podría pasar esta noche con ustedes? Mañana me iré a primera hora y ni siquiera habrán notado que estuve aquí.

G: ¿Puede quedarse mamá? - Le insistió Gabrielle haciendo unos hermosos pucheros - podríamos ver una película, digo, estás en mi habitación puedes compensarlo con eso.

E: Eso es manipulación, ¿lo sabes? - dijo la madre de Gabrielle viendo su insistencia.

La Sra Collins vió emocionada a su hija y accedió a que me quedara.
Nos colocamos a ver películas. La niña y yo, reímos mucho, hace mucho no sonreía así, era como si tuviera una hermana a quien proteger, sin darnos cuenta cuando, ni cómo quedamos dormidas profundamente.

Pude leer sus mentes, era un poder que tenía controlado en HYDRA, me habían enseñado, podía incluso hacer ver sus más grandes miedos, sus más grande pesadillas, podría manipularlos, paralizarlos incluso. Pero también aprendí a colocar barreras para que nadie pudiera hacerlo conmigo, sobre todo ellos, solo les mostraba lo que yo quisiera.

En Gabrielle había emoción, alegría, ví que recordaba a alguien pero no quise preguntarle nada, en la Sra Collins había desconfianza era una desconocida y la entiendo, sin embargo accedió que me quedara, por supuesto lo hizo más por su hija que por mi.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

Pronto será el reencuentro de T/n con la pelirroja, ya falta poco, comienzan amistades, roces, discusiones.

GRACIAS POR LEERME.

LOVELACE (Natasha Romanoff y T/n Lovelace Ward)Where stories live. Discover now