I don't want a reincarnation like this

Capitulo 55

¡Kwajik!

La joya con un centro roto en la esquina del fragmento perdió su color azul. Al mismo tiempo, la espada de la diosa que había estado cayendo hacia mi cabeza se detuvo.

¡Kugugugung!

La estatua comenzó a temblar violentamente. Mientras tanto, Ha Tae-heon me agarró, me sostuvo en sus brazos y voló de regreso. Saqué la habilidad que había sido cortada de nuevo y envolví el cuerpo de Ha Tae-heon conmigo.

"Ha Tae-heon-ssi, ¿estás bien?"

Observé la condición física de Ha Tae-heon. Afortunadamente, era un rango SS, por lo que no parecía haber ninguna lesión importante aparte de los rasguños.

"¿Estás bien?"

Ha Tae-heon hizo una expresión de sorpresa. Me miró y dijo con voz enojada.

"¿Por qué no te escapaste?"

"¿Escapar?"

"Es un monstruo de grado S +. Tu vida habría estado en peligro si te hubiera golpeado con esa espada, pero ¿en qué demonios estabas pensando?"

Ante esas palabras, también fruncí el ceño.

"¿Y si me escapo? ¿Cómo rompemos el núcleo? "

"Solo tienes que buscar la próxima oportunidad".

"¿Próxima oportunidad? Si fallara esta vez, el monstruo lo habría defendido más a fondo para proteger su núcleo ".

"¿Estás tirando tu vida por esa razón?"

"¿Cuándo tiré mi vida? ¡Que todavía estoy vivo! Y."

『¡Aaaaah!』

Antes de que pudiera terminar mis palabras, un grito agudo resonó en el pasillo. El mármol blanco puro que rodeaba la estatua comenzó a caerse como si estuviera despegando su caparazón.

Ha Tae-heon miró la escena y levantó su espada.

"Vamos a ocuparnos de eso primero y hablaremos".

Suspiré y levanté el cuerpo de Ha Tae-heon en el aire. ¡Kugugung! La estatua de la diosa, con todo el mármol que la protegía se había caído, tenía la piel azul y el cabello blanco colgando.

La voz de la diosa no nos dio más dolor. La sangre brotó de sus ojos negros mientras la diosa gritaba con una voz suave y fina.

Las enormes alas de mármol azul se extendieron desde la parte posterior de la estatua y una luz fuerte brilló, y los caballeros esqueléticos con armadura plateada de donde venían rodearon la estatua.

La diosa levantó su espada y nos señaló. Un halo blanco brillaba intensamente sobre su cabeza.

『Protege el santuario. ¡Expulsa a los intrusos! 』

Clank, clank.

Por orden de la diosa, los caballeros sacaron al unísono las espadas que tenían alrededor de la cintura. Ha Tae-heon miró a los caballeros, como antes, cubiertos de polvo negro como un escudo.

¡Kiaaaak!

Al ver a los caballeros correr valientemente, le susurré a Ha Tae-heon con voz temblorosa.

"...de alguna manera, creo que nos hemos convertido en villanos".

Ha Tae-heon ignoró mis palabras y blandió su espada. Dado que el núcleo de la defensa estaba roto, ni la estatua de la diosa ni los caballeros debajo de ella pudieron bloquear el ataque de Ha Tae-heon. Los caballeros cayeron con Ha Tae-heon empuñando la espada.