DIRTY┃HAN JISUNG.

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Las piernas de habían transado y sus dedos jugaran con los hoyos de sus medias de mallas. Estaba confundida, tenía miedo y también no sabía por qué el se estaba dirigiendo hacia a ella de esa forma.

— ¿Perdón? —Preguntó una vez más viendo al hombre de pelo negro, con el estilo peinado hacia atrás, un poco estupefacta por la pregunta que había hecho.

Después de horas conduciendo se había alarmado por el hecho de que la persona que estaba viendo no era Han sino su padre, Kyung.

Por eso Han no contestaba sus llamadas, porque el no sabia que Karl la había recogido mucho menos sabía que ella iría a su departamento.

— Lo que escuchaste —Encendió su cigarrillo mientras que Karl miraba todo. El no sabía que quería verla para eso — ¿Estás con Han por lo que tiene o por lo que en realidad es? —Era una pregunta demasiado directa.

— Lo que en realidad es —Contestó segura de sí misma, aún mirando a los ojos al señor.

— ¿Un monstruo? —Sonrió — ¿Estás con mi hijo por lo que en realidad es y estás saliendo con un monstruo.

— Señor no sé a qué se refiere con esto pero lo único que le diré es que está haciendo el ridículo.

Actitud.

Tenía mucha, lo que le sorprendía mucho a Kyung quien se había dado cuenta que ella en ningún momento había cortado el contacto visual. Era una chica decidida, fuerte y sabía que lo daría todo por su hijo.

— Actitud... —Tomó su cigarrillo para darle una calada y cuando el humo se desvaneció al salir de su boca quiso hablar una vez más poniéndolo en su cenicero.

Se levantó de su silla aún mirando a la menor sentada en la otra, tomó otro vaso de jugo sirviéndoselo a la menor. Kyung era un hombre que su manera de pensar era una de las que no dejaba que nadie engañara su astucia.

— ¿Sabes? Mi hijo también tiene ese mismo aire de actitud que tú, justo la misma manera de pensar o la misma manera de poner en su jugar a las personas. Ustedes son tan idénticos, como dos piezas iguales que logran encajar junto con otra.

Con una sonrisa, me había entregado un vaso con jugo de manzana, la menor estaba un poco confundida del por qué la había invitado en ese lugar.

La puerta se abrió dejando ver a Han todo empapado por la lluvia, junto con Bang Chan quien había maldecido por lo bajo al darse cuenta que habían visto el desastre que estaba en sus manos.

Sangre.

— ¿Que? Cariño... —Intentó hablarle, o al menos preguntar que hacía ella en su departamento con su padre sin que el estuviera presente.

Pero eso no era lo importante ahora, lo importante ahora era el por qué Han la estaba evitando tanto y que se significaba la suciedad que tenía en su ropa y en cuanto la sangre... sabían que algo malo había pasado.

— ¿Estás bien? ¿Te lastimaste? —Preguntaba le menor revisando su herida y si... el se había lastimado.

— Estoy bien, solo me lastimé un poco —Explicó Han y aunque su padre se tenía la idea de que estaba mintiendo lo había dejado pasar.

— ¿Bang Chan también se lastimó? —Preguntó Kyung levantando una ceja, desafiando a Han decir la verdad.

La menor tomó a Han de su mano llevándolo a un lugar alejados de las personas que sentían la tensión que se había generado desde que el había entrado por esa puerta.

— Han —Suspiró queriendo no llorar —He estado dándote espacio todo este tiempo porque pensé que estabas en una situación de querer estar solo pero me he dado cuenta que no es que quieras estar solo, es que no quieres estar más conmigo...

— ____ no es así, es solo que estoy resolviendo algunas cosas donde no quiero que te metas.

— Llevas todo el tiempo con tu amigo sin decirme al menos que estás bien —Peinó su cabello hacia atrás mientras que la veía estresarse por nada.

— Por favor, no es para tanto mujer.

— Si es para tanto, y no le llames mujer haces que parezca que estoy histérica, maldita sea. He pasado toda la maldita noche pensando en que si estás metido con otra o si estás una vez más con Loren.

— Espera —Arrugando sus ojos con un tono molesto e indignado por lo que acababa de decir — ¿Que mierda? Esa tipa no tiene nada que ver aquí.

— Entonces, ¡¿que mierda te pasa?! ¿Por qué me evitas como si fuera una desconocida? ¿Por qué no me cuentas lo que te pasa y dejas de ignorar mis malditas llamadas y mensajes?

— Porque no quiero que te entrometas en donde no te llaman, por dios. He estado evitándote por esa maldita razón, no quiero que te metas en mis asuntos ______

— ¡¿Por qué eres tan rudo conmigo?!

— ¡Porque no quiero perderte! —Gritó tomándola de sus hombros haciendo que se quedara estupefacta por lo que había dicho.

Sintiendo como el rostro de Han se ocultaba en su pecho respirando absorbiendo su nariz sintiendo que lloraría por la impotencia en cualquier momento.

— No quiero perderte maldita sea —Susurró levantando la mirada para verla a los ojos soltándola de sus hombros lentamente.

— Han no me vas a perder.

— Es importante que no te metas en esto, no quiero que te involucres en e

— Sabes que no voy a dejar pasar que no quieras decirme que está pasando. Han... algo me dice que esto también tiene que ver con la noche en la que fuiste herido a mi casa.

— Escucha —Tomó su mano para acercarla a él lentamente, poniendo sus manos en su cintura para rodear sus manos en su cuerpo completo.

Sentía la respiración en su abdomen descubierto por aquel top que tenía puesto y también por la manera en la que Han estaba sentado en el borde de la cama. Por supuesto que de vería las alta que el.

— Puedo contarte todo solo si me dices que mierda hacía mi padre contigo.