EL GIRO DE LA VENGANZA

Capitulo 98

Arturo: No eres nuestra salvadora, además con mi trabajo podré ayudarlos.

Lucia: ese trabajo puedes perderlo en cualquier momento, no, olvides que fue mi padre quien te lo consiguió.

Arturo: tus padres no tienen tanto dinero como los de Regina.

Lucia: ¡No entiendo por que siempre sale a relucir su nombre!, ella no es mejor que yo.

Arturo: ¿estas Segura? Regina es mejor ser humano que tú, apenas ahora me doy cuenta de que me enamoré de ella por su dulzura, su honestidad y su belleza, algo que a ti te falta.

Lucia: ¿Qué ganas con morirte por ella, si ni siquiera te da la hora? Es la esposa de otro hombre, acéptalo de una buena vez, Regina jamás regresará contigo.

Arturo: eso, esta por verse, por lo pronto ya le dije que estoy dispuesta a todo por ella y su hija.

Lucia: Ni siquiera soportas a los niños, además sus padres jamás permitirían que te acercaras a ellas, deja de soñar.

Arturo: mañana mismo hablaré con mi abogado para que reanude mi demanda de divorcio.

Lucia: si lo haces te quedas sin trabajo y sin el nivel de vida al que estas acostumbrado.

Al día siguiente Arturo nuevamente le pidió a la enfermera un favor.

Enfermera: ya le dije que con lo que pasó anoche prefiero no hacerle más favores, no me quiero meter en problemas por su culpa.

Arturo: ¿aunque le dé el doble?

Enfermera: No, si eso significa poner en peligro mi trabajo.

Arturo: solo necesito que le lleve un regalo a la habitación de la niña donde estuvimos anoche.

Enfermera: ¿un regalo?

Arturo: si, yo le doy este dinero, usted va y le compra algo, una muñeca, un peluche, se lo deja en su habitación y eso es todo, no es algo del otro mundo.

Enfermera: viéndolo así Esta bien, pero le advierto que es el último que hago por usted.

Arturo: esta bien, pero por favor apúrese.

Arturo le dio algo de dinero y la enfermera salió de la habitación.

Sofia y Gabriel platicaban mientras entraban a la clínica.

Sofia: gracias por pasar por mí.

Gabriel: es lo mínimo que puedo hacer por ti, se que manejar te altera un poco y no quiero que eso le afecte al bebé.

Sofia: hablando de eso, tengo cita en un rato con el ginecólogo, ¿podrías acompañarme?

Gabriel: claro, pero es muy pronto para un control ¿no te parece?

Sofia: si, pero no me he sentido bien, además ayer en la mañana tuve un sangrado y quiero estar segura de que el bebé está bien.

Gabriel: en ese caso, paso por ti en un rato.

Daniel bajo a la cafetería por algo de comer, cuando subió Regina se estaba despertando.

Daniel: buenos días.

Regina: buenos días.

Daniel: te traje algo de comer.

Regina: gracias.

Daniel: parece que le darán de alta hasta la tarde.

Regina: ¡que buena noticia!.

Daniel: ¿y a donde quieres llevarla?