🎋Capítulo. 14🎋

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Apenas como pude llegué a la sede. Mi cuerpo ya no podía ni dar un paso más. Estaba exhausta.

Tenía algunos huesos rotos y algunas heridas estaban en un mal estado. Mi cuerpo ya no respondía a mis movimientos.

Al entrar me dejé caer de espaldas detrás de las puerta principal.

-¡AZAMI!- veo la cabellera pelinegra de Tomioka, mi vista pesaba y escuchaba con dificultad- hay que llevarte enseguida a la finca mariposa.

Siento como me toma en brazos y ya luego me dejé caer rendida por el cansancio.

Uzui

-¡UZUI!- Rengoku entra a mi casa agitado logrando que me alarmara- Azami llegó de su misión, la llevaron a la finca mariposa, sus heridas son graves.

Utilizando la respiración del sonido sin pensarlo me dirijo a la finca mariposa.

Al llegar veo como Shinobu trataba sus heridas. Azami estaba dormida, quizás inconsciente por algún sedante que le hayan inyectado.

-Uzui- Shinobu saluda calmada y miro a mi esposa preocupado- ella estará bien, sólo debe estar en cama hasta que se recupere por completo- hizo una pausa pensando en lo que iba a decir- Sabes, Azami es muy fuerte. Perdió mucha sangre, sus fracturas le impedían respirar bien o moverse y algunas de sus heridas pasaron las capas de la piel. Aún así, ella llegó hasta la sede, ella sola.

Tras esa confesión me sentí aún más orgulloso de la mujer que tenía como esposa. No esperaba menos de ella, jamás.

Me acerco a ella y acaricio su cabello platinado con sumo cuidado. Dejo un beso en su frente y salgo de la habitación para esperar a que Shinobu terminara de limpiar y coser algunas de sus heridas.

Las horas pasaron y yo aún estaba esperando. Rengoku apareció por los pasillos y se acercó con una leve sonrisa.

-¿Cómo se encuentra torbellino?- sonrío ante aquel caótico apodo que le había otorgado desde que se conocieron.

-Estará bien, es una mujer fuerte.

-Claro que lo es, hermano- deja una palmadas en mi hombro- iré a mi residencia, si ocurre algo, búscame- asiento y él se retira.

Shinobu salió de la habitación y me dijo que podía pasar. Al entrar y verla con los vendajes apreté mis labios. No me gustaba verla de esta manera.

Azami desde que la conocí en la selección final, noté como la cicatriz en forma de un rayo decoraban su hombro derecho. Es una cicatriz cautivadora sin duda alguna y muy sexy desde mi punto de vista.

Acaricio la cicatriz de su hombro y siento su piel suave hacer contacto con la yemas de mis dedos. Una leve corriente eléctrica recorre mi cuerpo y suspiro.

Tomo asiento en una de las sillas y agarro su mano para besarla suavemente. Miro su rostro tranquilo y sereno. Ella es tan caótica que me encanta. Aún dormida se podía ver esa chispa de locura y misterio que te dejaba intrigado.

La amo, verdaderamente la amo. Y ella muy bien lo sabe, se lo demuestro delante de todos y asolas. Estando con ella o en su ausencia. Me gusta presumir de lo que poseo y otros ya no pueden poseer. Porque como Azami, puedo dar mi palabra, que no existe nadie como ella.

☆ Ramé ☆  (Tengen Uzui y tú)Where stories live. Discover now