Nuestro Lado Oculto III

Mentiras

El regreso de Mina a la mansión fue algo esperado por la mayoría de integrantes Jung, por lo que aquellos que pudieron regresar para recibirla lo hicieron, siendo tan repentino el aviso de Nayeon dándoles a conocer que al medio día estaría Mina de vuelta, Tiffany, Yerin y Sowon fueron quienes pudieron estar.

El regreso de Mina a la mansión fue algo esperado por la mayoría de integrantes Jung, por lo que aquellos que pudieron regresar para recibirla lo hicieron, siendo tan repentino el aviso de Nayeon dándoles a conocer que al medio día estaría Mina de vuelta, Tiffany, Yerin y Sowon fueron quienes pudieron estar.

Las tres mujeres la recibieron de manera cálida, los abrazos y buenos comentarios conmovieron a Akemi, a quien no le queda duda que su hija es muy querida en ese hogar y que está segura allí.

Luego de un par de minutos del recibimiento, Mina expuso su deseo por hablar con Sana, la que también está en la mansión, Yerin fue por su hermana mientras el resto se quedó en un silencio un poco incómodo ya que no lo consideran buena idea.

—Quiero hablar con ella sobre Momo porque lo necesito, quiero entender un par de cosas y luego te contaré todo Nayeon. —Le explica para dejarla más tranquila.

—Puede que resulte mal y si ella se atreve a hacerte daño yo responderé sin importarme su embarazo ni otra cosa. —Advierte.

—Nayeon, tranquilízate, eso no va a ser necesario porque voy a estar bien y quiero hablar a solas con ella. —Además de todo agrega ese detalle.

—Eso no me gusta. —Hace mención Akemi para que Nayeon esté de su parte.

Tiffany en cambio se le ocurre que pueden estarlas observando a la distancia, mientras ellas tienen esa conversación en alguna de las mesas del jardín. Akemi sugirió alguien más como intermediario en la conversación, solo que Mina se negó y pidió que la dejen a solas con la otra japonesa.

Y cuando Sana se presenta, las dejan en una de las áreas del jardín, mientras ellas observan desde la casa, ya que hay cristal como una de las paredes, les permite la visión.

—Hola Sana. —Saluda Mina cuando la escucha sentarse en frente de ella.

—¿De qué quieres hablar?

—De lo que tenemos en común.

—¿Casarnos con un Jung? ¿Estar embarazadas de un Jung? ¿No trabajar? —Ella empieza con tono burlón en la última frase.

—De lo desagradable, de Momo.

—¿Sobre qué? No lo entiendo.

—Ella me hizo mucho daño y pienso que sucedió lo mismo contigo, lo que quiero entender es si ella llegó a prometerte estar contigo y que clase de mentiras te mostró.

—Ella estaba conmigo primero, me acosté con ella antes que tú, me quería y te conquistó gracias a mí. —Presume y hasta sonríe.

—¿Por qué dices eso? —Se interesa Mina.

—Siempre fue una obsesionada contigo y de verdad que fuiste una ciega para no darte cuenta. Nunca le gustó que Nayeon fuera tu amiga y cuando ella no estaba, empezó a ser tu única amiga y buscar algo más.

—¿Tú le decías que hiciera por mí? —Esa idea le surge de pronto.

—Para empezar no se fue a Japón porque yo la convencí de quedarse para ti, para que te convirtiera en su novia, que era lo que quería en esos tiempos, hasta la ayudé económicamente.

—Nunca te mencionó, jamás me lo dijo. —Le revela lo que genera enojo en Sana.

Nayeon a la distancia se preocupa porque puede ver el cambio de expresión en Sana, se los hace ver al resto y su madre y hermana le dicen que lo lleve con calma.