Jugar cualquier carta que esté a la mano

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La alarma mañanera, no siempre a la misma hora ya que hay semanas que son más ajetreadas que otras, ese día sonaba más o menos temprano, sin embargo, la empresaria no era capaz de despertar.

Tiffany había escuchado la molesta alarma esperando que sucediera lo usual, no menos de tres pitidos para que Jessica esté despierta, la apague y se levante, lo que no sucedió y estuvo así hasta que dejó de sonar por sí sola. En seguida de ello sabe que debe despertarla y solo se demora un minuto ya que la observa, Jessica esta plácidamente dormida.

—J, despierta. —La llama con calma, mientras toca puntos de su cuerpo que la harán despertar.

Tiffany con los años aprendió una manera eficiente de hacerlo y en efecto, Jessica se remueve entre las sábanas.

— Jessi. Wake up, has ignorado tu despertador.

—Tal vez era el día en que me dejabas faltar al trabajo.

—¿Es un chiste? Me odiarías si hago eso. —La conoce lo suficiente.

—Llevas razón. —Abre sus ojos con fastidio y enseguida se abraza a Tiffany— Igual puedo estar así un rato más.

—Como gustes.

—No puedo enfrentar esto sola. —Suelta de repente y Tiffany se gira para quedar de frente pues era abrazada por el costado.

—Nadie podría, te lo estas jugando en grande ¿Y si haces caso a tu padre?

—¿Sobre qué? —Casi se molesta con ello y se contiene hasta escucharla.

—Negociar con Yoona, un convenio de paz.

—Ella no aceptara nada de mí, ya no, sabe que soy yo quien está pagando para que vaya a la cárcel. —Es tarde para cualquier tipo de trato.

—Es estúpido pagar por justicia.

—Así funciona el sistema.

—Y nunca va a cambiar. —Concuerda Tiffany, ella se ven interrumpidas cuando suena el teléfono— ¿Quién se atreve a llamarte tan temprano?

Es Tiffany quien toma el celular y observa de quien se trata. —Tú cuñado.

—Deben ser pésimas noticias. —Para que la llame tan temprano, ella se inclina y toma el celular para atender— Hola Wentz.

—Lamento tener que importunar tan temprano, malas noticias, se ha convocado una junta extraordinaria de socios del corporativo, nada nuevo cuando ha habido una junta casi que por semana.

—Dilo ya. —Se lleva una mano a la frente.

—Esta vez vienen todos los socios que hablan mandarín y cantones como primera lengua, ya conocen lo de Yoona. —Le comparte.

—¿Cuándo será?

—El sábado, un desayuno que se ha organizado en tu restaurante, bueno el que le obsequiaste a Tiffany. —Lo cual lo vuelve peor, como para que Jessica se quede en silencio— ¿Jessica? ¿Sigues allí?

—Sí, gracias por avisarme, tengo una semana para prepararme en todos los escenarios.

—Tienes a Nayeon, esta vez no puedes hacerlo sola. —Le aconseja.

Jessica agradece y corta la llamada, su expresión es lo suficientemente deplorable como para que Tiffany se preocupe y le masajee la espalda.

—¿Qué tan malas están las cosas? —Cuestiona.

—Habrá reunión de socios, suele haber y es en línea, esta vez vienen presencial y al parecer vendrán el cien por ciento y hay tantos escenarios posibles que yo... Me siento enferma y ya no quiero hablar de ello.

Nuestro Lado Oculto IIIWhere stories live. Discover now