El pescado salado está embarazada del cachorro del emperador

30

 El sacerdote taoísta no durmió y corrió a la habitación de Langjun.

 "¿Por qué Xu Xiaolang-jun se acostó en la mesa y durmió?" Wenjing, que salió de la habitación, estaba a punto de informar a la familia del funcionario sobre la disposición de la habitación. grupo cuando vio a Xu Xiaolang-jun acostado boca arriba, la mesa estaba somnolienta y la familia oficial se sentó en silencio para protegerla.

Yin Yanjun levantó los ojos y miró a Wenjing, y dijo a la ligera: "¡No necesitas mirar, vuelve a tu habitación y duerme primero!"

Mu Yu y Qi Chen no regresaron al mediodía, y la tía Li cocinó Más platos, así que dividí algunos de ellos. Se los envié al jefe de la aldea y a su familia. Cuando regresó, la tía Li llevaba una pequeña canasta de bambú con muchos bollos calientes al vapor.

"La familia del jefe de la aldea hizo bollos al vapor hoy. Cuando me acerqué, el pequeño Aning llevaba una canasta y estaba a punto de correr hacia nosotros. Sus padres no pudieron detenerlo. los bollos En el suelo, me retuvieron ". La tía Li no pudo evitar reírse, el nieto pequeño de la familia del jefe de la aldea fue realmente gratificante.

Xu Yanqing ladeó las comisuras de la boca: "Los niños son en su mayoría molestos cuando hacen un escándalo, pero los bebés gordos se portan bien", saltando alegremente.

Yin Yanjun no pudo evitar reírse en sus ojos. Xiaolangjun siempre odió a las muñequitas, pero ahora parece ser un maestro engañoso y de buen corazón.

Por la mañana, estaba ocupado jugando con esa cosita que hace malvaviscos.Después del almuerzo, el pescado salado no podía levantarse, así que simplemente levanté la colcha y me acosté en la cama.

Girando la cabeza hacia un lado, Xu Yanqing vio la banda para el cabello flojamente atada en su cabeza. Tocó el nudo en su cabello, pero no tenía la intención de aflojarlo en absoluto, por lo que no pudo evitar rizar las esquinas de su cabello. boca Parecía que el sacerdote taoísta no solo podía hacer Un buen herrero que incluso se peina tan bien.

Xianyu expresó su profunda admiración por el sacerdote taoísta al entregarle las manos. Ha estado en este mundo durante tanto tiempo y puede aprender un estilo de horquilla, que ya es una gran cara para Xianyu.

Xu Yanqing estaba aturdido y lo despertaron las voces que charlaban en el patio y las voces de la tía Li y Wen Jing que caminaban de un lado a otro hablando.

Cubriendo la colcha y durmiendo un poco caliente, Xu Yanqing pateó la colcha perezosamente y luego colocó sus pies sobre la colcha. Esta postura lo hizo parecer perezoso, descuidado y descuidado.

Continuando acostado sobre la colcha durante mucho tiempo, la charla afuera aún no se detenía, Xu Yanqing disipó el calor de su cuerpo y, después de mucho tiempo, se levantó de la cama y abrió la puerta.

La escena exterior era particularmente desordenada, Xu Yanqing parpadeó, pensando que la imagen frente a él era una ilusión de que aún no se había despertado.

Pero cerró los ojos y abrió los ojos tres o cuatro veces, y la escena exterior todavía no cambió en lo más mínimo.

Diecisiete u ocho pollitos corrían por el patio, la tía Li y Wen Jing agarraron uno aquí y huyeron de otro, luciendo muy avergonzados.

Una cucaracha corrió hacia la puerta de la habitación donde se mató el pescado salado y dio vueltas de un lado a otro. Intentó perforar la habitación, pero el pescado salado indiferente la apartó de una patada.

El pollito sintió que estaba herido, por lo que batió sus alas y chocó contra Xu Yanqing, y luego una mano bien articulada agarró directamente la espalda del pollito. El pollito agitó sus alas en protesta, pero fue inútil.