Aprendiendo amar

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Dul: por fin desperte la bella durmiente!  - dándole a Any un pequeño empujón con el hombro.

Any: Estaba cansado.  - sonrió un poco - ¿Qué hay de comer?  Estoy hambriento.

Poncho: Yo también.  - jugando con las cajas de pizza en la mesa.

Chris: Así que somos tres, no podría soportar esperar más por ustedes dos.

Mai: ahora que están aquí, comamos y luego nos vamos.  - dijo emocionada.

Ucker: ir donde Maite?

Mai: Bueno, está lleno de bares en Cancún y son solo las siete de la noche.

Dul: ¡Me encanta la idea!  - saltando.

Any sonrió: ¿qué te parece bebé?  preguntó Poncho.

Poncho: lo que tu decidas amor.

Mai se pellizcó las mejillas: ¡mira qué hermosos son estos dos!  - se volvió hacia Dul - Tú lo decidiste amor.

Dul: no, tu eliges princesa.  - espesando su voz para imitar a Poncho.

Any se rió: ¡se encargarán de vuestras vidas!

Poncho: Así es, pequeña.  - besó su frente - ¿Y cuál es tu decisión?

Any: ¡Vamos, hace tiempo que no salimos y una noche de fiesta en Cancún es imprescindible!

Todos acordaron irse, comieron sus pizzas y fueron a alistarse.  Como hacía mucho calor, los hombres optaron por pantalones cortos y camisetas de tirantes, Any eligió un vestido corto y ligero, Mai prefirió pantalones cortos y una blusa de corte recto con escote en v y la falda fluida y la camiseta de tirantes de tela ligera de Dul.

Todos iban en el mismo carro y se decidió que Poncho conduciría en el camino de regreso, ya que siempre era el que menos bebía.

Se detuvieron en un pub y al entrar encontraron el lugar lleno.

Poncho: ¿Nos vamos a quedar aquí mismo?  - preguntó en voz alta para hacerse escuchar por encima de la música.

Any: aquí mismo amor!  - todos sonrientes y emocionados.

Poncho sujetaba a Any por la cintura, incómoda con su vestido corto.  Mantuvo su cuerpo lo más cerca que pudo del de ella para evitar que alguien le hiciera una broma.

Chris encontró una mesa en el área VIP y fueron allí.

Ucker: ¿Qué querrán las damas?

Any: piña colada.  - levantando una mano.

Dul: tequila!  - casi gritando.

Mai: ¡Dos tequilas!  - Gritó entonces.

Ucker: Cierto, dos tequilas y una piña colada.  - anotando mentalmente - ¿Te quedas en la mesa con ellos Poncho?

Poncho: Claro, ¿me traes una cerveza?

Ucker: genial hermano. ¡Bora Chris!

cris: me voy  - se dirigió a Mai - Y te comportas.

Mai acaba de lanzarle un beso.

Dul: hoy no hay tequila Anyzita?

Any: nada de tequila hoy.  Me quedo con cosas más ligeras.

Mai: ¿Por qué Carmen?

Any: porque mañana quiero aprovechar la playa y si tengo resaca se verá el sol.

Mai: Un solo tequila no hace daño.  - tratando de convencerla.

Poncho: déjala Mai, si sueltas a Carmen, ¿qué hago con esa mujer que se balancea con ese vestido corto?