Aprendiendo amar

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Esa misma noche, Dul, Ucker, Chris y Mai fueron a visitar a Any y Poncho.

La pelea por saber quiénes serían los padrinos fue enorme, arrancando las risas de los futuros papás.

Any: ¡calma gente!  Aún no me he hecho ni la primera ecografía y ya estáis hablando del bautizo!

mayo: claro!  Una buena madrina se preocupa desde temprana edad.

Dul: y quien dijo que eres la madrina ofrecida!  En la lista de prioridades, yo soy el primero, ¡soy amigo y primo de Any!

Mai: bueno, ya eres pariente, lo que significa que necesito ser madrina para ser parte de la familia también.

Chris: ¡Hermoso hombre!  ¡Trae las palomitas y prepara el ring, la lucha aquí llega lejos!  - Dijo frotándose las manos y riéndose.

Poncho Risueño: Oh no, tenemos otro tema interesante que tratar.

Any: y creo que te gustará!

Poncho: Al menos eso esperamos.  - sonrió abrazando a Any.

Any: para no tener más problemas con jefes, amigos de indeseables, Poncho y yo decidimos abrir una empresa de publicidad.  - sonrió mirándolo - Tenemos contactos, gente que conoce y confía en nuestro trabajo, solo falta el equipo y el lugar.

Mayo: continua!  - entusiasmado.

Poncho: Queríamos saber si estás dispuesto a entrar en sociedad con nosotros.

May: ¡Me apunto!  - fue el primero en gritar.

Dul: ¡Dame el papeleo y lo firmo ahora!

Chris: ¡diseñador gráfico presentándose!  Levantó la mano.

Ucker sonrió: He estado pensando en dejar la empresa de mi padre durante mucho tiempo, mi hermano puede hacerlo solo.

Any: genial!  - apretando a Poncho - ¡Ya tenemos nuestro equipo, amor, y la secretaria!

dul: quien?

Any: Lilian ya dijo que no se lo piensa dos veces antes de seguirnos.

Mai: ¡Esto es nuestro!

Poncho: Mañana entonces, Any y yo nos ponemos a correr tras el lugar y todo el material necesario.

Chris: Voy a idear campañas y la fachada de nuestra empresa entonces, pero necesito el nombre para eso.

Poncho: Bueno, pensamos en un nombre, no sé si te gustará.

Mayo: hablar.

Cualquiera sonreía: HPyAsociados.

Ucker: Está bien, ya que fue idea tuya.

Dul: ¡Es genial para mí!

Chris: Creo que Chávez se vería mejor, pero sospecho, ¿verdad?  - Dijo bromeando - Es gente hermosa.

mayo: genial!!!  - la más emocionada del grupo - Me encantaría trabajar solo con nosotros.

Any: va a estar super!

Dul: Pero dime, ¿cuándo va a ser la ecografía?  - Volvamos al tema del bebé.

Any: Bueno, el ginecólogo lo programó para la próxima semana, el día antes de la prueba del vestido.

mayo: esto!  Hasta entonces hay que decidir quién va a ser la madrina, el loco de Chuck por allá - señaló Dul quien sacó la lengua - o la dulce y dulce morena de aquí.

Dul: dulce y dulce!  Parece que es más como un pervertido.

Todos se echaron a reír y la discusión volvió a empezar, haciendo que Any y Poncho se rieran de las tonterías que cada uno decía al otro, acabando en una terrible pelea de palomitas y almohadas.

Any y Poncho pasaron el día siguiente buscando propiedades para alquilar o comprar e instalar su nueva empresa.  Al final de la tarde encontraron el lugar perfecto, un edificio comercial, en el centro del DF, un piso entero que se podía dividir entre las habitaciones de cada uno, un salón de juntas, donde se realizarían presentaciones y recepciones.

No lo pensaron dos veces antes de firmar el contrato.  Al día siguiente llegó el momento de correr tras todo el material de oficina necesario, estaban contentos y muy satisfechos.  Poncho siempre insistía en una parada para que Any pudiera descansar, comer algo o beber agua, por supuesto amaba cada momento de ser consentida por Poncho.

La semana transcurrió plácidamente entre mimos y caricias, la empresa de publicidad estaba lista y solo faltaba la apertura que sería después de que regresaran de su luna de miel, hasta entonces todos seguirían con sus vidas normalmente.

Poncho: ¿Estás lista princesa?

Any: si soy amor, podemos irnos.

Cerraron el apartamento con llave y fueron al consultorio del ginecólogo de Any, quien monitorearía todo el embarazo y el parto.

Any: Buenas tardes Dra. Lisa.  Sonrió al entrar en la oficina.

Dra Lisa: Buenas tardes Anahi.  - Miró a Poncho - ¿Este debe ser papá?

Poncho: Así es, Alfonso.  - saludaron todos sonriendo.

Dra. Lisa: Me alegro de que haya asistido a la cita también.  - a Any - Por favor, cariño, cámbiate en esa habitación.

Any asintió y se fue mientras la Dra. Lisa indicaba dónde debía quedarse Poncho.  Después de un rato Any salió y se acostó en la cama.

Dra Lisa: el gel esta muy frio, te va a asustar un poco no?

Any: está bien.  - Cuando sintió el gel, soltó una risita.

Poncho tomó su mano.

Dra Lisa: vamos a ver cómo está este bebé, cuánto tiempo de embarazo y escuchar los latidos del pequeño corazón.  - pasando el dispositivo.

Tardó unos minutos en volver a hablar.

Dra. Lisa: Bueno, papás, el bebé está genial, el desarrollo es perfecto y tienen aproximadamente dos meses y medio de embarazo.

Any: pero, ¿y si no vinieras a mí este último mes?

La Dra. Lisa sonrió: algunas mujeres continúan teniendo este pequeño problema durante algunos meses después del embarazo.

Poncho: Y el corazón, ¿podemos escucharlo?  - todos emocionados ignorando la conversación de los dos, lo cual los hizo reír.

Dra. Lisa: ¡Por supuesto!  - Empezó a trabajar de nuevo y pronto el ruidito invadió toda la oficina.

Poncho: ¡mi bebé!  - Dijo con los ojos llenos de lágrimas, acariciando un costado del vientre de Any.

Ella a su vez ya lloraba entre risas mirando la pantalla.

Dra. Lisa frunció el ceño: Sólo un momento.  - Llamó la atención de ambos - Me perdí de algo.

Any: ¿qué le pasa a mi bebé?

Poncho: Dijiste que estaba bien.  - dijo con aprensión.

Dra. Lisa: Sólo un minuto y te lo diré.  - Volvió a mirar la pantalla, analizando al pequeño bebé de Any y Poncho.

Cuando volvió a hablar, los dos se miraron y se abrazaron llorando.

Dra Lisa: Tendrá que tener más cuidado ahora, tenga mucho cuidado y no levante pesas, ya que es su primer embarazo, este detalle aumenta el riesgo de aborto espontáneo.

Poncho: Claro dr, los cuidaré bien.

La Dra. Lisa sonrió: Confío en ti por eso papi.  Cualquier cosa, esta tarjeta tiene mi celular y bip, no dudes en llamarme.

Se despidieron después de que Any se arregló y se fue.

Any: y ahora bebes?  - preguntó ya en el coche.

Poncho: Hagamos todo lo que dijo la Dra Lisa, mucho cuidado.  Todo estara bien.

Incluso preocupada por los riesgos que mencionó la Dra. Lisa, Any estaba feliz por su embarazo... sería madre.