10 | No te merezco

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— Azra porfavor dejanos explicarte.

— Que me van a explicar, cuantas veces llevan haciendo sus cochinadas. — Estaba más que molesta y con justa razón.

— Dejanos explicarte, no te dejes llevar por verme con la ropa de él — Negó con la cabeza y se sentó a llorar.

— Como fui tan tonta — Ada se acercó a ella pero intentó agredirla así que la alejé.

— Cálmate — gritó Ada.

— Estas embarazada de Kerem — Vi miedo en los ojos de Ada.

— Azra calmate porfavor, si Ada tiene mi ropa es porque un taxi la bañó con agua sucia — limpió sus lágrimas.

— Si no nos crees puedes ir al baño y ver toda mi ropa arruinada — Dijo Ada con calma.

Azra corrió hasta el baño para revisar la ropa y salió apenada.

— Yo debí escucharlos. — se acercó a Ada. — ¿Te lastimé?.

— Kerem me alejó de ti a tiempo, no me pasó nada.

— Como llegué a pensar eso él me ama y yo hasta lo acabo de golpear, discúlpenme por pensar mal de ustedes.

— Iré a preparar una taza más de chocolate, Ada bebelo te puedes resfriar — les pasé las tazas a ambas y fui a la cocina por el mio.

— Amor, lo siento pero es que verla con tu ropa hizo miles de ideas en mi cabeza, lamento haber reaccionado así, estamos a dos días de la boda quería sorprenderte hoy, pero solo lo arruine, creo que hasta cancelaras la boda, no te merezco. — ella no me puede hacer sentir más culpable.

— Tranquila, tu reacción es entendíble hermanita, solo fue una confusión, él si se va a casar contigo ¿verdad? — Dijo Ada mirándome amenazante.

— Si amor, solo fue una confusión — Azra me abrazó entre lágrimas y observé a Ada limpiar una lágrima que quería correr por su mejilla.

—Te he dicho que preparas el mejor chocolate — Azra sonrió.

— Siempre lo dices — Dio un beso en mis labios y noté la incomodidad de Ada al hacer un sonido con la garganta.

— Dejen el postre para después de la boda. — sonreía incomodamente mientras lo decía.

— Ni una palabra de esto a papá él aún cree que soy virgen — Azra le dijo a Ada para que ella soltara una risa.

— Eso ni mamá se lo cree, aunque bueno a ti todo te creen — Ada se levantó y se volvió a sentar.

— Hey ¿que sucedió? — Pregunté y con Azra la ayudamos a acomodarse, quitamos la taza de chocolate de sus manos.

— Estoy un poco mareada pero ya se me pasará — toque su frente para saber si tenía fiebre y creo que tiene un poco.

— Amor ve a ver el termómetro creo que tiene fiebre.

— No tengo nada, estoy bien.

— Llamaré a Levent — Azra llamo a Levent y dijo que no tardaría en llegar ahí.

— Te resfriaste — Dije mientras consultaba sobre el tema en mi celular.

— Mi amor que atento cuidar a la embarazada de la familia, no me imagino cuando tengamos a nuestro primer bebé serás muy sobreprotector — Ese comentario solo hizo que me sienta peor, sonreí para que no notara mi incomodidad.

Llegó Levent con su maletín.

— Hola, esa nariz roja te delata — puso su mano sobre su frente y sobre su cuello, luego puso el termómetro en su boca.

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