— No, solo creí que sería momentáneo, no eterno.
— También lo creía así, pero me está gustando tenerte todos los días, digamos que lo estamos intentando, para ambos es nuevo.
— Sabes que mis sentimientos hacia ti siempre han existido.
— Siempre lo negaste por temor a que no te correspondiera.
— Así fue.
— Debo ser sincero, no estoy enamorado, no te amo, pero me está gustando todo esto, es algo nuevo si y me está encantando — tomó mi mentón y dio un corto beso en mis labios.
— Siempre haz sido sincero, pero también sé que nunca te haz enamorado, no sabes lo que es eso.
— Talvez deba aprenderlo contigo — beso mis labios de forma lenta.
— Amo tus besos — sonreí.
— Debemos dormir y organizar la boda juntos.
— Solo será civil ¿verdad?
— Si, pero si quieres podemos hacer el eclesiástico, tu dejamelo a mi.
—No, no prefiero que solo sea civil.
— Sera como tu quieras.
— Es muy poco tiempo quince días para casarnos nisiquiera esta el vestido.
— Será en un mes solo quería asustarte un poco.
...
Azra Ercel.
Vi que mi celular estaba completamente cargado y lo desconecté, revisé la hora, aun falta mucho para que llegue Kerem.
Estoy decidida Mario debe saberlo, planee una cita con él, solo espero no perder el valor de mirarlo a los ojos y decirle la verdad.
Llegue hasta su departamento y cuando estaba a punto de tocar el abrió la puerta.
— Llegas dos minutos tarde — sonrió y me tomó de la cintura.
— Eh si Hola el tráfico estaba horrible — sonreí con algo de vergüenza.
— Espera un momento estas como mas llenita — al carajo se dio cuenta y como no notarlo tengo casi cinco meses.
— Estoy embarazada — solté de golpe y lo vi retroceder, su mirada estaba algo perdida regresó a mi, me abrazó.
— ¿Es mio? — pude notar el miedo en sus ojos, sus labios temblaban.
— Si — beso mis labios y correspondí.
Nos separamos por falta de aire.
— Me haces el hombre más feliz — me cargó en el aire — No te imaginas mi mamá se pondrá tan feliz, podemos vivir aquí en mi departamento en lo que termino de pagar la casa... — no quería interrumpir sus planes pero debía.
— Mi esposo cree que es de él.
— Qué pero Azra debes decirle para poder estar juntos — Negué con la cabeza.
— Él no puede saberlo, no me lo perdonaría yo lo amo.
— ¿Y yo? ¿Dónde quedó yo? ¿Dónde queda todo lo nuestro?.
— Las cosas deben seguir como están, seguiré con mi esposo.
— Con ese bueno para nada, Azra llevas en tu vientre a mi hijo y no voy a permitir que le diga papá a otro.
— No, por eso te lo estoy diciendo, no te quiero negar tu derecho como padre pero a Kerem no quiero lastimarlo.
— Pero a mi si me piensas alejar de mi hijo ¿verdad?
YOU ARE READING
Secretos
FanfictionKerem y Azra, después de un noviazgo perfecto, quieren dar el gran paso de casarse pero la llegada de su dama de honor traerá algunos inconvenientes. ¿Realmente se conocen lo suficiente? Y es que ¿Quién no guarda Secretos?