35 | Que Romántico

181 19 1
                                    

Ebru se quedó a dormir junto conmigo, por si a Levent se le ocurria alguna estúpida idea.

— No entiendo como querías darlo en adopción, es precioso.

— ¿Quién te lo dijo? — Solo quería confirmar la respuesta.

— Su papá.

— ¿Levent? — Negó con la cabeza.

— Tranquila no diré nada, pero es que es idéntico a Kerem — asentí.

— Gracias, no tarda en llegar el abogado — Dije sonriendo.

— Si ya es como la tercera vez que lo dices — respondió Levent molesto.

— Es que es emocionante me divorciare de ti — me miró molesto.

— Por cierto Levent, ¿hasta cuando tendrás que usar bastón? Porque ya deberías estar caminando bien y digamos que cogiendo bien — Ebru no deja su veneno.

— Jajaja quieres que te muestre que si te puedo coger bien como lo hacía en la oficina.

— Jajaja ya quisieras, ¿enserio te quedaste con las ganas del trío? — asintió.

— Imaginate no puede con una y quiere con dos, me decepcionas Leventcito — Dije burlona.

El abogado llegó y firmé.

— Enserio ¿Quieres acabar con nuestra familia? — sonreí irónica.

— ¿Familia? Jaja Levent tu y yo nunca fuimos una familia, mucho menos un hogar así que firma de una vez.

— Pero te amo — negué con la cabeza.

— Deja de ser ridículo y firma — gracias a Dios firmó.

— Bueno señores oficialmente están divorciados, un placer trabajar con usted señora Ercel.

Agradecí y vimos salir al abogado junto con Ebru.

Revisé una vez más mi maleta, tome en mis brazos a Maxito.

— ¿Puedo llevarlos? — negué con la cabeza.

— Ya hiciste suficiente.

— ¿A dónde se van a ir? — preguntó y note tristeza en sus palabras.

— A casa de mis padres y luego a Londres, no me siento cómoda aquí.

— Puedes ser feliz con Kerem ahora que tu hermana ya no está con él.

— Jaja Levent yo no tengo ni quiero nada con Kerem, lo único que tenemos juntos es un hijo porque así lo decidió la vida.

— Eso los unirá siempre, Ada Elif espero que seas feliz, no te puedo retener y no debí amenazarte con decir la verdad, pero en algún momento tendrán que hacerlo.

— Que lastima que te diste cuenta de tus errores muy tarde, no utilizaré el video siempre y cuando no cometas alguna estupidez, porfavor disculpate con la familia de Ebru, ella no merecia eso.

— Soy una basura de hombre ¿verdad? Esa bala debió atravesar mi pecho.

— Te detesto pero no te deseo la muerte Levent, haz las cosas bien — Dio un beso en la cabecita de Maxito y otro en mi mejilla.

Conduje hasta casa de mis padres, pegue mi cabeza al auto, no se que voy a hacer con mi vida.

— Hey mi niña Hola — Levante mi cabeza para encontrar a papá observando por la ventana del auto.

Bajé y lo abracé.

— Solo abrázame porfavor — lloré en su hombro.

Mis padres me pidieron una explicación a mi repentino divorcio y solo supe decir que ya no había amor, que lo intentamos pero las cosas no se dieron.

SecretosWhere stories live. Discover now