Secretos

28 | Solo me confundes

Ada Elif.

Me podían dar el alta médica inmediatamente pero Levent quiso que pasara las dos semanas para poder alimentar al niño en lo que sus pulmones se terminaban de desarrollar, hoy llegamos a casa no se que hacer como calmarlo cuando llore, lo que mas quiero es que sus padres adoptivos lleguen pero dijeron que lo harán en una semana.

No quise pedirle ayuda a mamá para que no se encariñe, agradecí que la madre de Levent esté de viaje y no quiera involucrarse en esto.

— Creo que el pequeño necesita un cambio de pañal — Dijo Levent mientras lo sacaba de la cuna que había comprado sin mi autorización.

— ¿Puedes cambiarlo?.

— Oh vamos Ada en la clínica lo hiciste un par de veces.

— Si pero porque estaba mi familia ahí y tu mismo viste la vergüenza que pase por no saber como hacer las cosas.

— Puedes practicarlo.

— No tengo porqué practicarlo se lo llevarán en una semana.

— ¿No lo quieres ni un poco?.

— Claro que lo quiero Levent pero todo esto es nuevo para mí, nisiquiera planee esto, no pensé tenerlo en ningún momento, creí que sus padres llegarían después del parto pero hasta la vez aparecen — Levent me tomo por los hombros.

— Respira tranquila, yo lo hare solo esta vez porque debo ir a la clínica.

— ¿Me dejarás sola con el bebé?

— Demet vendrá en la tarde eso me dijo ya vez que casi ni hablarme quiere, no le caigo bien.

— Si pero eso será en la tarde pasaré toda la mañana sola con el bebé.

— Eres su madre y sabrás que hacer, cualquier cosa llámame — Levent le cambió el pañal y lo dejó en la cuna.

— No me dejes sola — suplique.

— No estarás sola, te quedaras con el bebé — Dio un beso en mi frente y lo vi salir.

Demonios, solo espero que no llore.

Se durmió a los pocos minutos y me dedique a ordenar la sala pero cada 5 minutos iba a verlo sentía que en cualquier momento se caería de la cuna o se podría ahogar con las almohadas, Dios esto es mucho para mí, mientras él dormía plácidamente yo estresada por que no se cayera.

Encendí el TV ya que no hay trabajo por lo menos una película, preparé palomitas y cuando empezaba la película escuché su llanto.

Al carajo que oportuno Max, lo vi en la cuna llorando, lo tomé en mis brazos pero no se calmaba talvez debe ser hambre, baje mi blusa y eso era tenia hambre, amo ver sus hoyuelos formarse. Se durmió mientras comía y lo acosté.

Me acosté en la cama cerca de la cuna a ver si podía continuar con mi película pero el sueño me venció.

Desperté por un sonido extraño del TV que me hizo sobresaltar, observé la cuna y no había nada.

— No no no esto no me puede estar pasando  — Busqué hasta bajo las sábanas y no estaba, la desesperación se empezaba a apoderar de mi.

Marque el número de Levent.

— Levent ¡Levent! Llama a la policía me robaron el bebé Levent el bebé desapareció yo me dormí y... — vi a Demet con Maxito en brazos.

— Que pero ¿que sucede? ¿Dónde estas? — Preguntó y reaccioné.

— Olvídalo lo tenía Demet — Colgué.

— Por Dios estas pálida del susto amiga, estaba quejándose en la cuna, no le sacaste los gases después de alimentarlo — le quite el bebé de los brazos.

— Te voy a matar me diste el susto de mi vida, pudiste avisarme.

— Estabas dormida buena loca, ni cuenta te diste cuando me acosté a tu lado.

— Estoy muy agotada definitivamente esto no es para mi pero afortunadamente en unos días se ira con su familia — lo acurruque y terminé de sacarle los gases se durmió y lo acosté.

— Te estas encariñando hasta me lo quitaste para tu sacarle los gases.

— Solo fue un gesto de cordialidad eres mi invitada no la nana.

— Te conozco Ada Elif Ercel amas a ese bebé, amiga entiéndelo déjalo contigo el bebé estará mejor contigo que eres su mamá.

— Si vas a seguir con eso es mejor que te vayas Demet.

— Es enserio Ada.

— Sabes que hablo muy enserio, no quiero perder a mi familia, con el tiempo se darán cuenta quien es el verdadero padre, amo a mi familia.

— Pero él bebé no tiene porque pagar por eso, hablalo con ellos, explica que sucedió antes de que supieras de que él era el prometido de Azra, hablando se entienden, ellos nisiquiera saben que ustedes tuvieron algo antes.

— Nunca fue nada serio nunca buscaba algo serio — limpié una lágrima que corría por mi mejilla.

— Deja de hacerte daño Ada, no arrastres a esto al bebé.

— Demet vete porfavor solo me confundes.

— Te lo digo porque te amo porque eres mi amiga y no quiero verte sufrir.

— El bebé de Azra no es de Kerem.

— Espera qué Ada ¿Cómo es eso? — llevó sus manos a su cabeza.

— La nena es de su ex, recuerdas que pelearon y ella se regresó, bueno la muy tonta se emborracho e hizo de todo con su ex producto de eso la nena que está esperando.

— Y tiene cara de mosca muerta, Kerem no lo sabe ¿verdad? — negué con la cabeza.

— Debes decirle.

— No como crees, es algo que no me incumbe, ellos son una pareja y verán como resuelven sus problemas, además Azra me pidió que guardara el secreto.

— Y tú como siempre encubriendo las cagadas de tu hermana.

— Siempre.

— Tu sabes que yo no tengo pelos en la lengua pero estas siendo muy tonta al seguir encubriendo a tu hermana, los tiempos de esconder novios eran en la escuela ahora que ¿avanzaron a esconder padres?

— No lo entiendes Demet si yo le digo eso a Kerem pierde las esperanzas de tener su nena.

— Pero es que tu estas ciega le diste un hijo él ya tiene un hijo no tiene porque criar uno que no es de él.

— Sabes lo que pasará con Max.

— Roberta es complicado, estoy casada con Levent es el hombre que amo, en cuanto se lleven a Max podre irme de luna de miel e iniciar mi vida con él.

— Tu te estas escuchando todas la barbaridades que dices, no definitivamente yo contigo no puedo, y Kerem queriendo formar una familia y hasta a él le montaron cacho.

— ¿Cómo que a Kerem le montaron cacho? — Observe la puerta era Levent.

Esto no puede empeorar.