operación: enamorar a Sunoo. (SUNGSUN AU)

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Sunoo llegó a la escuela ese dia, no tan animado debido a la pelea de ayer pero sabia que todo quedaba en manos de Jay, si queria continuar con su amistad o abandonarlo todo por un enojo banal. El omega sabia que los sentimientos del alfa no eran verdaderos, debido a que lo único que hizo esos años fue pedir por su aroma, no por su ser.

No queria sonar mala persona, pero aveces se sentia utilizado por el alfa, cuando entraba en celo tenia que ir corriendo a entregarle algo de su aroma porque según Jay, era lo único que lo calmaba, y estar a su completo servicio por si necesitaba algo suyo. O como cuando le gruñia a cada alfa que se le acercaba y tuvo que empezar a rechazarlos para que se sintiera seguro, creándole inseguridades al propio omega, ¿Era eso normal acaso?

Soltó un último suspiro, tal vez era por su celo pero su lobo solo corría de un lado a otro preocupado, quiso entender ese sentimiento y solo pudo asociarlo a que tenia miedo de que tantos años de amistad se vayan a la basura, pero con la conversación de Niki tenia entendido que habian cosas que tenian que cambiar, si querían seguir siendo amigos.

Tanto ellos como Jay.

También el hecho de escuchar al alfa nombrar "traidor" a Niki, algo que le estaba haciendo dudar del beta, le estaba ocultando algo y temia saber que era. Nunca creyó que podria desconfiar de sus dos mejores amigos de la infancia, pero ahi estaba, temeroso de saber todo.

Sin duda, necesitaba a su alfa y a su nuevo amigo omega.

Dejó las cosas de forma apresurada en su casillero junto a las nuevas pinturas, ya que habia decidido anotarse el grupo de arte junto a Jake para probar algo nuevo, y tuvo mucha suerte cuando se enteró que el omega también se habia incluido, estaba aliviado por ese lado. Checo que su pelo este bien acomodado en el espejo que siempre estaba en su locker y sonrio, listo para ver al alfa.

Cerro la puerta y dio media vuelta, saltando en su lugar cuando quedo cara a cara junto a un chico, que se le hacia conocido.

—Sunoo hyung.—Murmuró el alfa con timidez agachando levemente su mirada porque si veia al omega, iba a salir corriendo.—M-me pre-preguntaba si...

—Oh tu eres Jihoon, el compañero de Riki.—Recordó con una sonrisa, los orbes del castaño se abrieron asombrados con el corazón palpitando a mil por hora con la simple idea de que su crush se habia acordado de él.

—¡Si, ese soy yo!—Hizo una reverencia mostrando una brillante sonrisa que le dio ternura a Sunoo, de cierta forma le hacia acordar a un cachorro.—¡Gracias por acordarse de mi!

—No tienes que agradecer, ¿necesitabas algo?

—¡Ah si!—Asintio olvidando por un segundo su timidez y viendose con mas confianza porque el omega tenia un aura amable y dulce.—Venia a preguntarle si vio a Niki, necesito entregarle unos libros.

—¿Niki?—Movio su boca en una mueca pensativa y confirmó con su cabeza, viniendo a su mente los mensajes que intercambiaron hace dos minutos.—Dijo que iba a la biblioteca, búscalo ahi, si no, en la maquina expendedora del pasillo dos.

—¡Gracias Hyung!—Se inclinó nuevamente por respeto pero quedo alli, analizando cada movimiento del omega, le parecia asombroso como con cada cosa que haga se viera igual de lindo y perfecto.

—No es nada, nos vemos.—Le dio una última sonrisa antes de marcharse hacia el patio porque ahi lo esperaba Sunghoon. Jihoon se mordio el labio inferior, inseguro pero simplemente decidio seguir su camino porque esos libros eran importantes.

Sunghoon estaba inquieto caminando de un lado a otro bajo el arbol en el cual siempre se encontraban con el omega, ¿Porqué Sun tardaba tanto?

Fijó la hora en su celular y verificó si el pelirrosa no le habia mandado mensaje pero olfateo en el aire como la frutilla se iba haciendo presente, por lo que sonrió y presto atención como su omega caminaba casi corriendo hacia él.

Con anticipación abrió sus brazos y se sintio completo al tener el cuerpo mas pequeño dandole un calor especial, todo su ser soltó un suspiro de alivio al tenerlo asi.

Sunoo por su parte quiso lloriquear al sentirse consolado con el simple aroma a chocolate envolviendolo y el sentimiento de seguridad calmando tanto a su lobo como a si mismo, aveces le sorprendía como la presencia del alfa era suficiente para calmarlo y elevarlo hasta las nubes.

—¿Estás bien, pastelito?—Se separaron a una corta distancia, la suficiente para poder mirarse a los ojos y que las manos del pelinegro acaricien las mejillas del omega.—Estaba preocupado, mi lobo se sentia incomodo de solo pensar que algo te produce malestar, cuéntame que te sucede.

Sunoo sabia que entre todas las personas que podia engañar, su alfa iba a ser una excepción, al estar conectados era difícil ocultar malas emociones pero lo agradecia, necesitaba calmar la inquietud de su corazón.

Por lo que con pesar, apoyo su cabeza en el pecho del alfa en una silenciosa petición de que lo siga abrazando, cosa que Sughoon hizo de inmediato, apoyando su mejilla sobre la cabeza de su omega, dándole su tiempo para que le cuente.

—Entraremos a clases pronto, ¿Quieres saltarte la primera?

Sunoo lo pensó un segundo, y finalmente asintió, no le haria mal faltar ya que era clase de matemáticas y no le iba mal, de todas formas agradecia que la escuela sea indulgente al tratarse de parejas entre alfas y omegas dentro de la institución, por lo que no le dirian nada al respecto.

Por lo que, con un suspiro tembloroso, sacó todo lo que temia en su interior.