ᵉᵍᵒⁱˢᵗⁱᶜ - Blue lock (editando)

Capítulo 22

"¡Vamos Rin, los bastardos estan por entrar!" Gritó Nathaniel desde el campo, los partidos estaban por comenzar y el Itoshi seguía sin entrar para que los demás integrantes pudieran ser pasados al campo.

"¡Cállate, ya voy!" Se quejó entrando a la sala, miró con molestia a su compañero tan irritante.

"Al fin llegas." La sonrisa burlona en su rostro era lo suficiente buena y amplia como para molestar al mas alto.

De pronto, el top 6 del equipo contrario estaba entrando.

Vaya que sería un juego interesante.

"Vaya, ¿qué tal, lindo?" Shidou automáticamente, sin decir que por instinto, se acercó a Nathaniel rodeandolo con sus brazos por encima de los hombros.

En su mente, el sabía que el más bajo lo maldijo de mil maneras pues seguía odiando el contacto físico pero esta vez no se quejó, solo lo dejó ser.

"Tengo curiosidad por saber quienes serán nuestros compañeros...Buenos, los míos, no creo que alguien haya escogido al demonio" Bromea con cierto toque de crueldad en sus palabras aunque en parte tenía razón, Shidou no fue la primera opción de muchos por lo difícil que era lidiar con él.

"Me habrías escogido si pudieras, lo sabes" El rubio no se dejó afectar por las palabras, al contrario, lo vió como una oportunidad perfecta para molestar a Nathaniel.

"¿Yo?" Ríe amargamente con molestia ante sus palabras. "Si, usualmente yo soy el que escoge pero en esta prueba específicamente, serías tú quien me escogería si te dieran la oportunidad.." Su mano se posó en el pecho contrario empujandolo lejos de él.

La expresión de Shidou se transformó en una sonrisa de satisfacción, cada vez que Nathaniel demostraba su confianza y egocentrismo tenía aquella misma expresión de admiración e interés que ni siquiera se esforzaba por ocultar.

Nathaniel por su parte fue al lado de Rin, sus compañeros de equipo para este partido estaban llegando y entrarían por esa puerta en unos segundos.

Y así fue, pero no tenía idea de que se llevaría tal sorpresa.

"Nos vemos de nuevo, Clutier." Dijo el pelirrojo de cabellos largos mirándolo con una sonrisa que demostraba su confianza y seguridad.

"Vaya, Chigiri Hyouma." Se cruzó se brazos, las comisuras de sus labios se curvearon en una leve sonrisa mientras sus ojos demostraban interés y curiosidad. "¿Qué te trae a mí equipo?"

"No soy el único que vino a demostrar su valía a tu lado." El chico señaló con la mirada a otra figura que se acercaba a ambos.

"Isagi Yoichi, el inútil que se cree inteligente...Wow." En sus últimas palabras se pudo notar el fuerte sarcasmo que utilizó en ellas, no le sorprendía para nada ver a Isagi, ni mucho menos le alegraba...Mientras no fuera una molestia no la veía como un problema.

"Cállate, bastardo." El nombrado se colocó al lado de Chigiri, el pelirrojo veía toda la escena sufriendo la tensión que había entre ambos chicos. "He venido a destruirte."

"¿No era mejor opción algún otro equipo?" Preguntó con una sonrisa de burla en su rostro, toda esta situación era graciosa y entretenida para él.

"Voy a demostrar que soy mejor que tú, no vine a ganarte, vine a devorarte, Nath." El pelinegro lo miraba con cierto toque de superioridad que no molestaba al pelimorado, más bien le causaba gracia.

Era como un simple alumno queriendo superar al maestro.

Cosa que era totalmente imposible en este caso.

"Isagi, voy a ser completamente sincero y directo con lo que pienso sobre ti." Se acercó lentamente a él quedando a unos cuantos centimetros de distancia. "Comienzas a creerte demasiado, te estás subiendo a una nube inestable que en cualquier momento va a desaparecer. Yo seré quien la desaparezca, ¿entiendes?"

Al chico le recorrió un fuerte escalofrío por el cuerpo al escucharlo, Nathaniel era capaz de intimidar a cualquier persona si así se lo proponía y ahora mismo lo estaba logrando.

Isagi no pudo responderle al menor, lo había dejado sin palabras para decirle de regreso y completamente atónito, Nathaniel no siguió la conversación e ignoró su presencia en el equipo, después de todo, Isagi no le agradaba en lo absoluto.

"Falta un integrante...¿Quién es el último?" Preguntó hacia Chigiri que parecía aún sumido en la anterior situación tensa y apenas salía de su trance.

"A-Ahm...Bueno, es Ba-" Fue interrumpido cuando el pelimorado soltó un quejido de dolor y cuando se dio cuenta ya estaba en el suelo con una figura encima.

"Meguru, sácate de encima" Ordenó fulminando con la mirada al chico teñido que se había atrevido a tirarlo.

"¡Nos vemos de nuevo, Nath!" Bachira parecía metido en su propio mundo sin darse cuenta de la expresión molesta que tenía el chico debajo suyo.

"Meguru, segunda advertencia, sácate de encima." El aura que emitía Nath transmitía peligro de tan solo tenerlo cerca, el pobre Bachira tembló de miedo y acabó dejando libre al pelimorado que había ensuciado su uniforme deportivo a tan solo minutos del comienzo del partido.

"Vaya, que equipo de idiotas me tocó." Suspira sacudiendo su ropa para al menos limpiar una parte de lo que Bachira ensució.

Los tres chicos lo miraron ofendidos por sus palabras pero claramente esto no le importó a Nathaniel.

"El que se atreva a decir algo lo voy a ahorcar." Los miró con un aura escalofriante que dejó callados a los jugadores.

"¡Comencemos!" Los altavoces sonaron por todo el campo llamando la atención de los jugadores. "Este es el primer partido de los que se jugarán en esta etapa...Será 5 vs 5, el ganador será quien anote 5 goles antes que el rival."

"Es lo mismo que la anterior etapa, solo que ahora no seremos eliminados." Susurró el pelimorado con el ceño fruncido al escuchar sus palabras.

"¡El arquero es un Blue Lock Man como siempre! ¡Primer partido, tercera selección, última etapa!" Los jugadores comenzaron a ponerse en posición, se estaban preparando para el inicio del partido. "¡Equipo A vs B!"

"Mhm...Veamos que puedes mostrarme, moreno." Dijo en tono retador mirando a su ex compañero de equipo que lo veía con una sonrisa desde su posición." ¡Rin! ¡Dame el primer pase!"

Sorprendentemente, el Itoshi le contestó con un asentimiento de cabeza que nadie se esperaba. El pelinegro no solía ser de los que se dejaban mandar y eso todos lo sabían.

El partido de esta selección dio inicio.