☆ Capítulo 15 ☆

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Ya lejos de la zona de viejos, Dazai y Nikolai caminaron sin un rumbo fijo, sólo siendo la compañía de la soledad del otro.

Entonces, Nikolai también recordó que su mejor amigo aún seguía en la enfermería, por lo que se detuvo abruptamente. Dazai lo cuestionó con la mirada. - ¿Me acompañas a la enfermería? - Dazai dedució rápidamente el motivo, entonces asintió.

Ahora con un lugar fijo al cual ir, Dazai y Nikolai apresuraron su paso, y en cinco minutos llegaron hasta el lugar.

Para su mala suerte, las puertas estaban cerradas, pero aunque era su mala suerte, eso no quería decir que Dazai y Nikolai no pudieran abrirla. Entonces, aplicando los viejos trucos, Nikolai abrió la puerta para ambos entrar.

Dazai, que ya había visitado la habitación de Mikhail, lo guió hasta él, y simplemente esperó fuera de la habitación y sirvió de guardia por si alguien entraba.

En cuanto puso un pie dentro de la habitación y cerró la puerta, Nikolai no se sorprendió al notar a Mikhail completamente despierto mirando por la ventana. Era consciente de que Mikhail necesitaba tomar pastillas si realmente quería dormir.

La repentina llegada tampoco asustó a Mikhail, en su lugar, sonrió calmado.

El corazón de Gogol dolió por un tiempo al notar el estado cansado de su amigo. Mordió su labio inferior para suprimir las repentinas ganas de llorar que tenía.

Las ojeras debajo de los ojos de Mikhail eran la mayor prueba de su insomnio, su piel era más palida que antes e incluso se veía un poco más delgado.

Pero, a pesar de su estado, Mikhail aún sonreía para él, completamente despreocupado de todo.

Caminó hasta él, y se sentó en la orilla de la camilla. - ¿Esperabas mi llegada? -

Mikhail rodó los ojos al ver como su mejor amigo estaba bañado en pintura de distintos colores. - Sabía que llegarías, así que te esperé - Entonces, todo se sintió cálido.

- ¿Qué te dijo el doctor? No me mientas en esto -

Mikhail quitó el mechón de cabello de su rostro. No sabía que decirle exactamente, pero tampoco quería mentirle a su único amigo. También tenía miedo.

Su situación no era importante. No era necesario molestar al resto con sus pequeños problemas. Si él moría, ¿no era eso mejor? Entonces, si iba a morir, prefería no decirlo, así no causaría preocupaciones innecesarias en los demás. Él sentía que sus problemas no eran la gran cosa.

(Nota: La luna los está iluminando asi q se pueden ver un poco entre ellos)

Nikolai vió la preocupación reflejada en los ojos de Mikhail. Él no podía leer pensamientos, pero sabía que era lo que estaba pensando el tonto de su amigo. Tomó con delicadeza una de las manos frías de el pelinegro. - No tienes porque matarte tu solo en esa cabeza tuya. No soy como la zorra de tu ex amiga. No hay porqué temer... - El azabache trató de ver más de cerca las manos de Nikolai al sentir tela en ellos, pero el albino fue más rápido y simuló no haber hecho nada.

El menor ignoró esto, pero se rió divertido por la mención de la que una vez consideró amiga. Su expresión se volvió sería, y habló detenidamente y dudoso. - Atsushi dice que tengo desnutrición crónica de segundo grado -

El rostro de Nikolai era todo un poema de preocupaciones. Involuntariamente presionó con más fuerza su propia mano y ahogó el gemido de dolor causado por las heridas.

Durante todo ese tiempo, no se había sentido lo suficientemente valiente para mirar al de ojos azules al rostro, y se mantuvo con la mirada fija en sus manos.

Dark ReligionWhere stories live. Discover now