No podía descansar, por más que quería, por más cansado que se sentía, era imposible conciliar el sueño o simplemente estar ahí, quería regresar a su hogar, dónde se sentía seguro, pero no podía, sentía que ya había hecho pasar muchos problemas a su bebé, se quedaría hasta asegurarse de que todo estaba bien y después regresaría sin mirar atrás. Había escuchado toda la conversación en aquella asamblea de la familia Min y el asco que sintió no podía compararlo con nada, no creía que existiera personas tan cínicas, no importaba el daño que le habían hecho, para ellos él no era nada.
—Espero que jamás los conozcas, que nos vayamos de aquí pronto—susurró acariciando su estómago. Estaba en la sala, recostado en el sillón mirando algo de televisión.
Decidía entre ir a tratar de dormir o simplemente quedarse para ver otra película y así al menos tener ruido, cuando su teléfono comenzó a sonar, al ver de quién se trataba hizo una mueca.
—Hola—dijo con un suspiro.
—Hola, sé que me dijiste que te dejará descansar, pero, quería saber si estabas bien.
—Estoy bien.
—¿Comiste algo?
—Cereal.
—No creo que sea un buen alimento ¿No tienes hambre? ¿Antojo de algo especial? Puedo pedirlo y que lo lleven a tu departamento.
Jimin mordió su labio inferior, él tenía que desear estar lejos de Yoongi, no acercarse a él y odiarlo, pero, se había acostumbrado a tenerlo cerca y no quería estar solo, era una decisión difícil, estaba en duda.
—Quiero pollo frito picante—dijo con una tenue sonrisa—. En verdad quiero comer eso.
—Muy bien, ¿Algo más que desees?
—¿Puedes traerlo tú? —mordió su labio inferior.
—¿Quieres que vaya?
—Sí, no quiero estar solo.
—Voy para allá—podia escuchar su voz más animada.
—Te espero—susurró antes de colgar.
Se quedó mirando a la nada, sonrió a medias, no sabía si estaba bien, pero tampoco importaba, quería estar con él, necesitaba que alguien le hiciera compañía, después se esa tarde, sintió dolor por lo que escuchó, pero de alguna forma, agradecía haberlo hecho, porque Yoongi le demostró una parte de él que odiaba y no lo calló, pensaba que tal vez podía confiar en él, ya no tenía nada que perder. Ya lo había perdido todo.
Miró televisión, espero nervioso por una hora hasta que escuchó que llamaban a la puerta, se levantó y fue a abrir, Yoongi estaba ahí, con una sonrisa, con bolsas de comida que olían muy bien, lo dejo entrar.
—Déjalo en la mesa de centro, vamos a comer algo.
Yoongi hizo lo que le pidió, en ese tiempo se había dado cuenta de la respuesta pasiva que le daba, nunca se negaba a hacer algo, no era como antes, Yoongi se mostraba más servicial y abierto, se preguntaba si era una fachada, si por dentro estaba incómodo por tener que ser servicial y amable.
Se sentó como pudo en el piso, Yoongi hizo lo mismo frente a él, abrió las bolsas de comida y Jimin tomó una pieza para llevarla a su boca, el placer que sintió al comer fue inmenso, tenía tantas ganas de algo así, Yoongi le sonrió.
—¿Qué? —preguntó con una ceja alzada.
—Nada, parece que realmente lo disfrutas.
—Tenía antojo—se encogió de hombros.

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La Regla Del C.C.P (Yoonmin)
FanfictionLa inocencia y la pureza de un alma, es algo invaluable, que ni siquiera una vida de lujos puede comprar. Park Jimin encuentra a su angel guardián, que sin esperarlo, tiene un lúgubre secreto que guardar. En una vida llena de envidia e injusticia...