ONE OF THE GIRLS | SATZU [ADAPTACION]

02: Sana

-Ponle el seguro -ordeno cuando mi novia miyeon cierra la puerta de la habitación detrás de nosotros. El hecho de que mi hermandad sea la anfitriona de la fiesta de esta noche no significa que mi habitación esté abierta al público. La última vez que organizamos una fiesta y olvidé cerrar con seguro, subí las escaleras para agarrar un suéter y entré para encontrar un trío en progreso. Uno de los dos chicos incluso había cometido la atrocidad de usar a mi panda de peluche de un solo ojo, Ray, como almohada para elevar el trasero de la chica. Ya sabes, para crear un acceso más fácil para la doble penetración que estaba por comenzar.

Nunca más, Ray, le aseguro en silencio a mi amigo de la infancia mientras lo muevo a la mesita de noche para dejar espacio a mi novia.

Miyeon cae de espaldas sobre la cama, se cubre el rostro con el brazo y suelta un suspiro cansado. Se perdió la fiesta porque tenía que trabajar, pero aprecio que hiciera el esfuerzo de venir después de su turno en lugar de irse a su casa al estudio que alquila en Hastings. La pequeña ciudad está a diez minutos en auto del campus de Briar, por lo que no está muy lejos. Pero sé que habría sido más fácil para ella ir directamente a casa y quedarse dormida.

-¿Cansada? -Ahogo mi simpatía.

-Muerta. -Su respuesta es apagada. Su antebrazo protege sus ojos de mi vista, lo que me da la oportunidad de admirar su cuerpo sin ser molestada por ello.

Miyeon  tiene la constitución larga y delgada de una jugadora de baloncesto. Aunque jugó de base en la escuela secundaria, no consiguió ninguna beca universitaria de baloncesto, y nunca fue lo suficientemente buena. No creo que le importe mucho. Jugar era algo divertido de hacer con sus amigas de la secundaria; su verdadera pasión es el modelaje. Y aunque no practica deportes en estos días, todavía está en buena forma. Hace buen ejercicio por su trabajo, la agencia de modelos donde trabaja.

-Pobre bebé -murmuro-. Déjame encargarme de eso.

Sonriendo, comienzo en la parte inferior de su cuerpo y subo. Quito las zapatillas de deporte, deslizo el cinturón de sus caderas, remuevo la falda por sus piernas. Se sienta para ayudarme con su blusa y su bracier de encaje, luego se derrumba. Ahora tiene el pecho desnudo, solo en bragas y calcetines, con el brazo sobre su rostro nuevamente para proteger sus ojos de la luz.

Sintiendo lástima por ella, apago la luz principal y enciendo la lámpara en la mesa de la cama, que emite un brillo pálido. Luego me acomodo a su lado, vestida con el camisón de seda negro que llevaba para la fiesta.

-Sana -murmura mientras empiezo a besar su cuello.

-¿Mmmm?

-Estoy demasiado cansada para esto.

Mi boca viaja a lo largo de la línea angular de su mandíbula. Llego a su boca y lo beso suavemente. Me devuelve el beso pero es una caricia fugaz. Luego da otro gemido cansado.

-Bebé, en serio, no tengo energía. He estado trabajando catorce horas seguidas.

-Haré todo el trabajo -susurro, pero cuando mi mano se desliza hacia su entrepierna, no hay signos de humedad allí abajo.

-Otra noche, cariño -dice adormilada -. ¿Por qué no pones tu serie espeluznante o algo así?

Me trago mi decepción. No hemos tenido sexo en más de una semana. Miyeon trabaja los fines de semana y varios días durante la semana, pero tiene un día libre, así que este es uno de los sábados raros en los que podríamos quedarnos despiertas hasta tarde si quisiéramos.

Pero no ha movido un músculo desde que se acostó.

-Está bien -cedo, dándome la vuelta para agarrar mi laptop-. El último episodio es Niños Que Matan, pero no recuerdo si te hice ver el anterior... ¿Payasos Que Matan...?