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Llegamos hasta mi cama, yo abrazaba su pecho e intentaba entender todo lo que había pasado. Bea besaba mi frente. Me acababa de decir que me quería y yo le había dicho que la quería. Sí, la chica "mala" me quería.

- No sabía que te drogaras- dije mientras ella jugaba con mi pelo.
- Y no lo hago... Ahora no, antes sí.

Sonreí, levante mi mirada y bese sus labios.

- ¿Fumas?- pregunte.
- Muy pocas veces- me besa la frente- ¿Ya has cambiado tu opinión sobre mí?

Me pegue más a ella, seguía llevando su camiseta solamente y el aire frio empezaba a colarse por las rendijas de la ventana.

- No. Eres una chica mala, me esperaba algo así.

Bea rio, me agarro de la cintura y me empujo, haciendo que me subiera encima suya. Puso sus manos en mi trasero, pegándome a ella, levanto su cabeza y me beso los labios. Ahora los besos me sabían aún mejor, lo que yo creía que era imposible. El beso empezó a ir a más, gemí. Bea empezó a bajar el nivel, ahora era un beso más romántico.

- ¿Y tú eres la chica de la chica mala homosexual?- pregunto y alzo una ceja.

Me sonrojee un poco. Sentí un nudo en la barriga y sonreí al pensarlo.

- No, todavía no.
- -Bea puso una cara rara- ¿Cómo que todavía no?

Hice pequeños círculos en su pecho semi desnudo con mi dedo índice.

- Todavía no me has pedido nada- dije sonriendo.
- Ah- Bea sonrió- Pues, ____...

TOC TOC.

Pegaron a la puerta, pero no hice caso, ahora no quería que nadie nos molestara. Me quede mirando a Bea, ella me miro y se rio.

- ___, llamaron a la puerta.
- ¿Y?- me acerque a sus labios.

TOC TOC.

- Que deberías ir- dice sonriéndome y poniendo su mano en mi barbilla acercando su cara a la mía.
- Debería...

Susurre en sus labios. Luego le di un beso lento, apasionante, gruñí cuando volvieron a pegar a la puerta.

- Venga- me dijo Bea.

Ella me quito de encima. Me levante y fui hacia la puerta, la abrí un poco y mire quien era. Perrie. Vio que había abierto un poco la puerta y me sonrió.

- ¡Un segundo!- le dije sonriendo.

Cerré la puerta y me apoye en ella. Mire a Bea, estaba irresistible. Tenía el pelo despeinado, no llevaba camiseta, su jeans estaba un poco bajado, vi su abdomen definido, tenía una de sus manos en uno de sus bolsillos y la otra en su nuca... Y me estaba sonriendo.

- Eres hermosa- dije sonriendo.
- Tú eres hermosa.

Estiro sus brazos para que le cogiera las manos. Se las cogí y me abrazo.

- Era Perrie.
- Lo mejor será que me vaya, mañana nos vemos.
- No, no te vayas.

Bea se rio, me abrazo más fuerte y me beso la frente.

- Venga ve a cambiarte y dame mi camiseta.

Me separe de ella, cogí mi pijama que estaba en mi cama y me metí en el baño a cambiarme. Me cambié lo más rápido posible, no quería estar lejos de ella. Salí y le di la camiseta. La cogió y la olio, luego se la puso.

- Huele a ti- dijo sonriendo.
- ¿Y huelo bien?- dije caminando hacia ella.

Puse mis brazos en su cuello.

- Perfectamente.

Se rozaron nuestras narices y luego nuestros labios, era un beso muy bonito, lento...

- Nos vemos mañana...

Me separa un poco de ella, luego le di otro beso chico y me aparte definitivamente. Cogió su chupa y la acompañe hacia la puerta. Cuando la abrí Perrie se quedó con la boca abierta cuando la vio. Bea miro a la derecha a la izquierda y salió de mi cuarto.

- Hasta mañana- se despidió con la mano y me regalo una sonrisa.
- Adiós- dije sonriendo.

Hubiera estado bien un te quiero, pero no la quería presionar, mejor ir poco a poco. Perrie me miro extrañada, así que me aparte de la puerta y ella entro.

- Te iba a preguntar porque no viniste a clases pero... Creo que ya tengo la respuesta- se rio.

Me sonrojee un poco.

- Bueno, te cuento....

Empecé a contarle todo lo que me había pasado en el día de hoy, que no eran pocas cosas, le conté hasta lo de David, cuando termine cogí aire.

- ¡Hala! ¿Entonces estas con Bea? JODER, pensaba que eras hetero- me pregunto.
- No, no me lo ha pedido, porque TÚ pegaste en la puerta; más bien diria que soy bisexual- la fulmine con la mirada.
- Ui, perdona señorita- Perrie levanto las manos.

Nos empezamos a reír, pasamos lo que quedaba de la tarde, que no era mucho, hablando de lo que habían hecho en clase y demás. Luego nos fuimos a cenar juntas, antes me cambie, David no estaba ni Bea, así que cenamos Pezz, Jesy y yo. Le conté a Jesy lo de Bea y yo, se extrañó un poco por lo que me hizo Bea... lo del beso, pero bueno. Luego volvimos a nuestras habitaciones. Me volví a poner el pijama y me metí en la cama.

Me empecé a mover bajo las sabanas, me sentía rara, hoy había sido un día extremadamente raro... Pero al final fue bonito, Bea me dijo que me quería y estuvo a punto de pedirme que saliera con ella, si no hubiera sido por Perrie. Cerré los ojos despacio y me dormí.

~~A LA MAÑANA SIGUIENTE~~

Me levante por la alarmar, me vestí corriendo y baje a desayunar con las chicas. Antes de que viniera David, Perrie me pregunto una cosa.

- ___ ¿se lo vas a decir a David?

No me lo había preguntado... ¿Se lo iba a decir? Me quede pensando, como una boba. Entonces sentí unas manos sobre mis hombros.

- ¿Decirle el qué a quién?- preguntó ....






N/A: Amo las situaciones de intriga, para que voy  a mentir.. JAJAJAJAJA; hoy he sbido antes, queria ser buena gente, que pasen buena tarde/noche/mañana, se os quiere - Zoe aka obviouslana

Mi Alma Opuesta | Bea Miller y túWhere stories live. Discover now