12.

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Narra Nina.

— ¿Es en serio?.- Digo sin creerlo.- ¿Me haces un puto tajo y... Y me dices que de alguna forma me asesinaras?.

Él entre cierra los ojos.- ¿Querías que te matará?.

— No... Claro que no... Solo que eres un idiota en serio lo eres.

— ¿Sabes cuántas veces me lo han dicho?.- Se cruza de brazos.- No estoy de humor para gritarte Nina o mejor aún.- Se acerca un poco.- Decirte cosas que se que te doleran.

— Puedes irte a la mierda.- Escupí mirandolo a los ojos, mis palabras no eran en vano, de verdad que lo estaba empezando a odiar.

— Tengo una pregunta.- Habla tranquilamente a pesar de mi enfado. ¿En serio? ¿Quién se cree que es?.

— No puedes preguntarme nada ¡¿Quién te crees que eres?! Quiero que te vayas de mi vida ahora.- Digo a unos centímetros de su anatomía.

— ¿Qué has hecho estos años?.- Evita mi enfado y eso lo hace ser aún peor. Me divierte verme así, no le daré ese placer. Cerré los ojos y respiré profundo contando mentalmente del uno al díez. Volví abrirlos.

— En resumida palabras, tengo una vida.- Dije Brusca.- Al igual que tu, su me haces el favor de alejarte de mí te lo agradecería mucho.- De seguro tono mi ironía.

Arrugó su frente.- Sabes que la vida que llevo no es una vida realmente.

— ¿Y? No te basta tener una familia.

— ¿De qué estás hablando?.- Dice empezado a molestarse.- ¿Qué mierda estas diciendo?.

— No te hagas el único fino aquí, sé que estás con Sally y que tienes un hijo.- Yo y mi boca. Siempre cagandola más.- ¿Qué sigue ahora que estés casado?.

Su manera de mirarme lo dice todo. Claro que ya es padre, necesito explicaciones, las merezco.

— No porque tú estés casado con un papelito firmado diciendo que ya eres señora, yo también tendré que estarlo.- Dice sonriendo falsamente.

Me sigue mirando.- ¿Qué? ¿Quieres que te diga cuánto llevo con él?.- Negué retrocediendo un poco.

— No, que bueno por ti.- Suspiro tirando su cabello hacia atrás.- ¿Quién te dijo toda esta mierda?.

Alce una ceja mirandolo seriamente. No hacía falta que le respondiera, Jeff siempre ha sido astuto en ese sentido.

— Voy a matar a Liu.- Cerró los ojos tirando la cabeza hacia atrás.- ¿Algo más?.

Negué.- No, no me interesa saber nada de ti.- Contesté, mire a la salida.- Seguro que tu mujer e hijo deben estar esperándote para que les vayas a contar un cuento.

— De hecho no es... Niño.- Dice no tan convencido.

— ¿Seguro? No creo que...

— Claro que estoy seguro, es una niña.- Se mete las manos al bolsillo. No nos estamos gritandos, pero le frialdad en nuestras voces lo dice todo.

— Tu hija.- Confirme. Jeff me da una mirada entre cerrando los ojos, vuelve a suspirar pesadamente.- No te gusta la idea de tener una hija ¿Verdad?.

— Si.- Contesta para mí sorpresa.- No me gusta que me llame papá o esas mierdas, así que la obligo a que me llame Jeff...

— No puedo creer lo que estoy oyendo.- Digo con voz desgastada.

— No te tengo porque profundizar más allá de mi vida, y menos a ti.- Dice tajante, me encogí de hombros.

¿Juntos, jeff? 3.Where stories live. Discover now