-Si tenemos un barril con un volumen de 20 decímetros cúbicos de agua, a presión constante de una atmósfera y...
Mientras Aggie O'Connell, la eterna profesora de Física y Química del Internado Brotherhood, escribía el problema en la pizarra, la clase se dedicaba a cualquier cosa menos que a copiarlo en sus libretas: algunos, como Keegan, dormían; otros se mandaban notitas, otros jugaban a Angry Birds en el móvil y otros, simplemente, miraban al infinito dejando pasarla hora.
Bueno, quizá hubiese alguien haciendo algo un poco distinto. Jay y Kathleen estaban pensando en todo lo que habían descubierto la tarde anterior, y Abby se dedicaba a mirarles atentamente desde la parte trasera de la clase.
-Sissie- llamó de repente Kath a su compañera de mesa, y ahora buena amiga.
-¿Qué pasa?- Sissie se sobresaltó. Había estado muy enfrascada en dibujar 'Keegan y Sissie' y un montón de corazoncitos alrededor en la última hoja del cuaderno.
-Necesito un favor- le contestó al tiempo que garabateaba algo en un trozo de papel-. Mándale esta nota a Jay.
-¿Y por qué no se la mandas tú? Está dos mesas a la derecha de aquí.
-Porque...
No le hizo falta terminar la frase, solo un leve gesto de inclinación que le indicó que la pelirroja estaba echándoles el ojo.
-AHHHHHHH, VALE VALE, no hay problema, dame la notita- le guiñó un ojo, y se encontraba girándose hacia su derecha cuando...
-Señorita Tanner, salga a la pizarra, por favor.
El rostro de Sissie empalideció en cuestión de segundos. Se levantó, no obstante,decidida y con paso firme hacia la pizarra, dejando a Kath con la nota en la mano, nerviosa porque no tenía un plan B.
Se giró, y vio a Abby lanzándole una maliciosa mirada. Vale, no era la mejor opción arriesgarse, no si quería mantener el cuello en su sitio. Y no era por los ataques celosos de Abigail, o porque le montara un escándalo; era porque sospechaba que su nueva táctica contra ella era contarle a su padrastro, don Plassmeyer, hasta cuándo pestañeaba.
Mientras tanto, Sissie seguía en la pizarra escribiendo fórmulas a diestro y siniestro,intentando dar con la adecuada.
-Cecilia, ¿sabe usted dónde está Lourdes?
-¿En... Francia?-respondió, tímida. ¿Aquello qué era, Física y Química o Geografía?
-Pues ahí tendrá que ir usted a hacer peregrinación si quiere aprobar mi asignatura.
-No... no... Espérese, Miss O'Connell, que ya me he acordado.
Sissie buscó la mirada de Vanessa entre la multitud, y esta le respondió moviendo la cabeza afirmativamente. ¿Qué planearían las dos?, pensó Kath.
Lo descubrió al ver a Vanessa sacar su móvil y, conforme ella iba escribiendo, lo hacía Sissie. ¡Claro, una idea genial!
Kathleen sacó también su móvil, tecleó rápidamente el contenido de la nota, y le envió aquel mensaje por WhatsApp a Jay. Este, pocos segundos después, sintió vibrar algo en su pantalón y buscó su teléfono móvil. Se sorprendió al leer de quién era el mensaje, y miró hacia donde estaba sentada.
Kathleen: Cuando termine la clase, no vamos a ir a comer. Dile a Callum y Keegan que te encuentras enfermo, pero te vas a la salida. Yo llegaré después. Es importante, tenemos que aclarar muchas cosas sobre lo de ayer.
Jay la miró y le asintió.
Mientras tanto, y por desgracia para Sissie, el truco del teléfono les estaba saliendo igual de mal que a Babi y Pallina en el libro de Federico Moccia.
ČTEŠ
Hijos de Agua y Fuego
TeenfikceDía y noche. Frío y calor. Mujer y hombre. Agua y fuego. Los iguales se repelen; los opuestos se atraen. Los Hijos de Agua y Fuego serán un chico y una chica nacidos en el divino seno de una familia normal; pero ellos serán cualquier cosa, menos no...