Capítulo 48

27.1K 1.2K 47
                                    

Ya teníamos los papeles listos para irnos a las Vegas, de sólo pensar que seré la mujer de Edward me hacia saltar de un pie. Gritaba de la felicidad que sentía ahora mismo y más que ya mañana sería mi cumpleaño y también el día que me casaría. Fuimos a ver a Martha antes de comenzar a preparar el equipaje, en cuanto llegamos Edward tuvo que buscar un papel que le faltó. Channel y Clarissa estaban todavía recogiendo y yo arreglaba a Amelie. Lo nerviosa que estaba, sería la primera vez que me subiría en un avión y de sólo pensarlo me ponía los pelos de punta pero valía la pena.
-¿Te llevarás esto?-Deje a Amelie en la cuna otra vez, el vestido con la media panties que le había puesto pensé que le iba a quedar un poco más holgado pero fue al justo. Alguien había engordado aquí en la casa y creó que yo también. Clarissa me mostraba unos tacones rojo vino con punta fina que tenía, ladee la cabeza. A ella ya le faltaba poco para estar lista por lo que veo, yo aún me tenía que duchar y cambiar.-¿Edward ya viene?
-Pensé que tendría todo listo para no retrasarnos
-Deberías comenzar a vestirte-Asenti, era cierto. Guardé la última bolsa de maquillaje en mi bolsa y comencé a desnudarme.
-Ya estoy aqui-Escuche la voz de Edward y como cerró la puerta, esperó que ya este listo y decida no cambiarse de ropa o ducharse. Nuestro vuelo salía en una hora, no quería comenzar a estresarme.-¿Te acompañó?
-No Edward, sabes que si entras perderemos el vuelo-Abrio la puerta corrediza del baño y lo mire para después continuar pasandome la esponja.
-Por lo menos dejame admirarte-Mordi mi labio y ladee la cabeza sonriendo y tratando de cerrar la puerta pero no me dejó.-Briana, sólo te miraré
-Vistete por favor-Tenia la camisa desabotonada dejando ver la franela debajo y el botón del pantalón estaba abierto.
-Si nos duchamos los dos creó que nos iríamos más rápido-Imposible.
-No
-Si-Cuando ya estuve completamente lavada, me entré debajo del grifo.-Preciosa no sabes las ganas que estoy aguantado por no pegarte de esa pared y hacerte mía una y otra vez...
-Edward...-De sólo imaginarlo me excitaba pero no podía pensar en eso. Cerré la llave y tomé mi toalla cruzando por su lado.
-Tenemos días que no hacemos nada
-Por tu culpa Edward-Aplique una crema en mi cuerpo después de que estuve seca y tomé la ropa interior negra de encaje.
-No te preocupes, ya eso no pasará. Hablaré con Francesca delante de ti para que no dudes de mi-Eso estaba bien, me gustaba.-¿Saben que dicen cuando una mujer se combina la ropa interior?
-¿Qué?-No tenía ni la menor idea. Un jeans blanco con ruedo, una blusa blanca lisa y una chaqueta azul oscuro. Unos zapatos de punta fina color beige, accesorios del mismo color de los zapatos y el bolso por igual. Dejé mi cabello suelto y mientras hacia todo esto Edward sonreía y me miraba aguardando para decirme el porque se combinaba la ropa interior.
-Que planea desde un principio acostarse con el hombre-Me guiñó el ojo y entró al baño. Eso ni siquiera se me paso por la cabeza pero también era obvio que tendríamos que hacerlo... O ¿estaba equivocada? Pueda ser que si, podíamos llegar cansados o no se. Tomé a Amelie de la cuna y por mala suelte tomó un mechón de mi cabello y lo apretó fuerte.
-Oh tesoro-Se lo quité y ella sonrió cerrando los ojos, tan hermosa. Ya seremos una familia, crecerás con un padre y una madre.
-Ya estamos listas Briana y Edward, esperó que no esten follando-Rei por lo bajo, y abrí la puerta saliendo de la habitación. Me examinaron con su mirada, y Clarissa me quitó a la niña d ellos brazos.
-Estas bella
-Ustedes también chicas-Clarissa tenía un vestido color violeta que le llegaba hasta los muslos con unas valerinas, Channel unos jeans negros con una camisa de cuadro. Algo cómodo.-Y no estábamos follando
-Menos mal-Solto Channel caminando hacia la sala, yo la seguí.-Ángela se quedará con la madre de Mateo, el estará trabajando aqui mientras que nosotros disfrutamos
-Si-Me casaré, que alegría Dios. Siempre le daré las gracias por esto como cada día usted me permite vivir para estar en estos momentos tan preciosos.
*******
Llegamos 30 minutos antes de que saliera nuestro vuelo, estábamos en la sala de primera clase y jugaba con Amelie mientras que su padre leía una revista y Channel y Clarissa cuchichaban sobre el hombre moreno de atrás que estaba bueno. No me había volteado a mirar. Lo había escuchado de ellas.
-Esperó que en cuanto regresemos, estés embarazada-Mire a Edward sorprendida porque apenas Amelie tenía 5 meses y ya quería que estuviera embarazada. Que fácil lo decia, no es que no quisiera pero sería más trabajo. Prefería esperar a que por lo menos tuviera un año o dos para ya tener al siguiente.
-¿Por qué?
-¿No quieres?-Suspire, cerró su revista y me tomó a la niña de los brazos dándole un beso en la frente.
-Esperemos más-Arregle el cuello de su camisa tipo jeans, y le di un beso en la mejilla.
-Estaré contigo para ayudarte a cuidar a las proximas-Oh "a las próximas" reí y mire a Channel que se quedó mirándome fijamente.
-No sabes si lo sean cariño-Le di un beso en la mejilla, y ya anunciaron nuestro vuelo. Mi corazón comenzó a latir rápido.
"Pasajeros del vuelo 432 con destino a Las Vegas Nevada, por favor reportarse en la puerta de abordaje"
Edward tomó mi mano le sonreí emocionada y con un nudo en mi estómago.
******
Cuando llegamos a las Vegas ya estaba todo oscuro, y estaba muy cansada. Amelie descansaba en mis brazos y nosotras esperamos que Edward alquilará el vehículo que utilizaríamos aqui.
-Necesitó dormir...-Susurro Channel. Yo también necesitaba dormir, mañana también sería un día largo.-Ya viene
Edward se estacionó, había alquilado una Chevrolet Tahoe blanca con los cristales ahumados. Nos ayudó a subir las maletas y le pasé a Amelie a Clarissa ya que ella no podría ir delante conmigo. Me recoste del sillón de la confortable guagua y Edward se adentro en la carretera.
-¿Cansadas?-La única que respondió fue Channel un muy vago "Si"-Pensé que esta misma noche podríamos salir
-¿Y Amelie?-Le pregunte, no estaba pensando en ella.
-A conocer las Vegas amor, no es necesariamente ir a un Bar a tomar-Verdad. Me apresuré mucho, suspire y cerré los ojos.
El hotel era muy grande con sus sillones cómodos en piel y los grandes candelabros, esperamos un poco rato en la entrada ya que Edward había hecho las reservaciones gracias a su secretaria. Channel se encargó de llamar a su madre para decirle que habiamos llegado bien, luego lo hizo con su esposo y este le dijo que la pasáramos lo mejor posible y que felicidades.
-Parece que les pasó un enorme camión encima...-Dijo Edward refiriéndose a nosotras, le dio una tarjeta a Clarissa y la otra se la guardó en los bolsillos.-Vamos
Entramos en un ascensor con espejo por todo lados menos el suelo y una canción de fondo. Amelie se despertó mirando a su alrededor, y comenzó a llorar. Edward me la quitó y comenzó a meserla en sus brazos, esta se calló y levantó su manita para tocar la cara de su padre. Las puertas se abrieron y todos salimos, Clarissa buscaba el número de su habitación y se detuvo en la 221.
-Aquí es, descansen-Le di un abrazo y Edward sólo le sonrió. Channel estaba como un zombie y creó que yo también estaba por igual.-Nos vemos mañana
-Yo te llamo-Le aviso casi mi esposo-Las maletas se las traerán
-Si, gracias por todo-Channel que regresó a ser humana tocó su brazo para después entrar a su habitación. Nosotros continuamos hasta la 245.
-A disfrutar...
-Edward no-Sabia perfectamente a que se refería con decir "disfrutar" no me respondió.
-Y no se me olvida que mañana cumples años-Encendio la luz y pude apreciar una gran vista. La sala estaba rodeada de cristal que podía dejarte ver una parte de Las vegas que se hacia diminuta desde esta altura. Tenía un mini bar, y la cocina estaba como escondida por una pared de piedra blanca. Sólo pude ver una sola puerta, y otra cuando estuve en medio de un diván negro y la plasma delante de este.-¿Te gusta?
-Esta todo muy hermoso...-Murmure. Volvió abrir la puerta pero sólo me acerque para mirar por los cristales a la ciudad que tenía debajo. Nunca pensé que estaría aquí ahora, y que mañana me casaría. ¿Quién se iba a imaginar que Briana Stones vería esto? Por todo lo que pase...
-Gracias-Mire hacia atrás y vi como le dio una papeleta al hombre que había traído las maletas.-Toma a Amelie
Me la pasó y estaba muy activa a las 2:45am. Soltó un chillido creó que de la emoción y miré como Edward sacó el corral de su bolsa y abrió una puerta que supongo que era la habitación. Lo segui. Una gran cama con edredón rojo vino, otro divan delante de esta y cortinas gordas color beige. Tenía otra puerta y era muy espaciosa. Un armario grande con puertas corredizas que tenían un espejo y una cómoda. Abrió el corral cerca del armario y volvió a salir para tenderle la manta que llevaba.
-Vamos Amelie, debes dormir-La recoste de mi hombro y comencé a moverme mesiendola para ver si el sueño volvía a ella.
-Listo, soy bueno ¿eh?-Miró el reloj de su mano y abrió los ojos -Maldición, dame a la niña
-¿Qué pasa?-La puso en el corral con cuidado y se acercó otra vez a mi para tomar mis manos.
-Felicidades hermosura, que Dios te bendiga hoy y siempre, que cumplas muchos años más y que el Señor te ayude a lograr tus metas-Me dio un beso apasionado y rodee su cuello para después recostar mi cabeza de su hombro.-Perdón, pero pensé que era más temprano
-Has sido el primero, es lo importante-Volvio a besarme y apretó mi trasero.-No, prioridad ahora mismo, dormir a Amelie y descansar
-Si señora, como usted mande

Capítulos Finales

Un Pedazo de MiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora