Capítulo 51 parte 4

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Termine de lavar los platos del desayuno que había hecho, Edward estaba en la habitación vistiéndose para ir a recoger todas mis pertenencias y traerlas para acá. No quería que cargara cosas pesadas, ni nada por el estilo, pero aunque él no quería que fuera a mi antigua casa, tenía que ir. Clarissa no me contestaba las llamadas, y estaba muy preocupada. Quería saber que le digo el doctor. La amenaza o advertencia que me hizo la hermana de Edward, me tenía sin cuidado pero era obvio que tenía que cuidarme de esa víbora. Estaba actuando como si era una amante, pero que bien me sentí hablándole así.
Fui a la habitación, y me encontré a mi esposo cambiándose. Estaba en toalla.
-Te he dicho que no quiero que vayas...-Refunfuño.
-No cargaré nada, además, ¿Quien tendrá manos para mi Amelie?-Me acerque a el y lo abrace por detrás. Su espalda todavía conservaba algunas gotas de agua, y vi la prueba que estaba en la cama.
-Creeme que hay muchas manos-Se volteo bajando sus manos a mi trasero y apretándolo a la vez que me susurraba algo sucio.-Quiero que me chupes la polla como aquella vez..
-Edward...-Cerré los ojos un momento para digerir lo que me había dicho.-¿Eres español ahora?
-No me cambies el tema-Me tomó de la barbilla para encontrarse con mi mirada que yo estaba evitando encontrar.-Hueles tan rico...
-Uhmm..-Comenzó a besarme levantando mi blusa, y entrando su mano en mis shorts. Acarició por encima de la tela mi entrepierna y después introdujo su dedo para sacarme un gemido de lo más profundo de mi garganta. Me acostó en la cama, y con su mano libre, quitó el botón y bajo el short. Estaba masturbándome y lo hacia lo más rico posible, levante mis caderas cuando comenzó acariciar mi clítoris y apreté el edredón con fuerza mordiendo mi labio a la vez.-No pares... Murmuré con la boca seca. Sonrió y me dio un corto beso, quitó la toalla de su cadera y me penetró suavemente.
-..Oh..
-¿Te gusta?-Mordí mi labio con fuerza y asentí varias veces. Se comenzó a mover lentamente, y sacó mis senos del sostén. Apretó con fuerza uno de mis pezones y le marque dos de mis uñas en su brazo.-Quiero darte así todas las mañanas... Lo bueno es que no utilizamos preservativos
-S-si...-Tartamudee sonriendo. Me arquee y llegue al punto más alto, luego lo hizo el para después recostarse de mi.-No me esperaba esto..
-Lo se, por eso me gusta sorprenderte-Se escuchó unos pasos por el pasillo, Edward se levantó y tomó la toalla para cubrirse otra vez.-Esperó que no haya regresado Francesca 
-¿Edward? ¿Estás ahí?-Mi esposo abrió la puerta sacando la cabeza.-Lo siento... Es que vi..
-No importa Rafaela, dentro de poco saldremos, no se vaya muy lejos para que conozca a la Señora Brooks-Sonreí por lo último que había dicho, cerro la puerta y se acercó a mi.-Es la mujer que limpia
-Si-Rodee su cuello colocándome en puntillas y dándole un beso.-...señora Brooks...
-Te asienta bien-Chocamos los cinco, y entre al baño contoneando mis caderas.

*******

Había conocido a la mujer que en lo que no estuvimos estuvo cuidando de la casa, era una Señora de algunos sesenta años. Era una muy buena persona y Edward no se equivocó al contratarla, era igual que Martha que por cierto la iba a ver hoy. Parecía como que si habían pasado meses desde el accidente que paso, pero todavía se estaba recuperando. 

Edward aparco el vehiculo, y no espere a que bajara para que me abriera la puerta. Tome mi bolso y baje abriendo la puerta del Edificio, quería ver a mi pequeña. Decirle la sorpresa que teníamos para ellos, otro bebé vendría en camino y pronto lo tendremos en nuestros brazos. Sonreí, y abrí la puerta. Habían varias cajas en la cocina y supe que eran mías, "Cristal, caja delicada-Briana" Escuche una puerta que se cerro y vi que Martha estaba saliendo de mi habitación, le di un abrazo fuerte y aspire su rico aroma. Que hermoso abrazo lleno de amor nos estábamos dando en este momento, luego vi que salio Mateo y Channel de mi habitación.

-Te ves bien-Dije acariciando el cabello de Martha, esta me volvio a abrazar y me analizo con la mirada.

-Digo lo mismo-Froto mis hombros y levantó la vista-Cuánta felicidad reflejan tus ojos

Un Pedazo de MiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora