☩ «Wicked» [Dean Winchester]

Capítulo [ 40 ]

Anteriormente en Wicked

Tenía una gran lucha interna, entre decir que ocurría, o guardar silencio. Pero ¿de qué serbia guardar silencio? Los dos hermanos la conocían a la perfección para saber que algo andaba realmente mal, de nuevo.

-Hola muchachos-saludo con una débil sonrisa, mirada cristalina John Winchester viendo a sus dos hijos.

-Cuídalos-suplico John Winchester en un leve susurro viendo a su espalda a sus dos hijos mal heridos.

-Los cuidare-le prometió  Freya con una pequeña sonrisa al padre de sus mejores amigos, John asintió complacido despidiéndose de ella en silencio, para también despedirse de igual manera de sus hijos.

-Siempre haces todo bien, nos salvas el pellejo en muchas ocasiones-respondió con sinceridad Dean, sonriendo sin verla; concentrándose en la más complicada herida.

-Ustedes lo hicieron primero, yo solo trato de devolver el favor-le recodo Freya con tranquilidad en voz baja, una vez que Dean había terminado de desinfectar la herida y cerrarla con cuidado.

Dean sonrió de manera traviesa, alejándose unos pasos de la joven doctora acercándose al interior del auto sacando una blusa de la mochila de su amiga. Acercándose nuevamente a ella, con su aun sonrisa traviesa.

-Sabes cómo tú puedes devolverme el favor, cariño-le aclaro ayudándola a colocarse con cuidado la blusa, preocupado de que no quería que Freya sintiera el frio y la pesadez notable de la noche.

-Tonto-murmuro molesta Freya, terminando con aun ayuda de Dean en colocarse la blusa. Dean sonrió tomando nuevamente otro algodón con desinfectante.

-Sabelotodo-susurro Dean con burla. Pasando con cuidado en la herida que Freya tenía en su ceja derecha.

Como dicen todos, hasta el mismo John Winchester los seres queridos son los más importantes para uno, pero también lo más vulnerables también. Y ahora, para Dean Winchester, Freya Saltzman es uno de los seres queridos más importantes que tiene, pero también se convierte en su vulnerabilidad, y eso era lo que más le preocupaba; pero eso no descartaba que él no la defendiera, la defendería; y si era necesario, con su vida. Ahora Freya Saltzman era su familia, y no la dejaría ir.

Song (We were promised jetpacks-Act On Impulse)

HELL HOUSE I

Richardson, Texas

Freya Saltzman

Estábamos por un nuevo caso, en la carretera interestatal en Texas. Es gracioso la manera en que retomamos las cosas sin pensar en el pasado; los hermanos son el mejor ejemplo, siguiendo como si nada, parando cuando se requiere. Yo bueno, en mi caso no podría estar peor, me siento culpable, demasiado culpable. Quiero decirles lo que ocurre, no lo malinterpreten, pero ¿Cómo decirlo? No puedo simplemente preocupar más a los hermanos, primero su padre, luego yo. Esto en verdad es un verdadero problema, pero antes de hablar con los hermanos, prefiero hablar con alguien que sabe más afondo este tema, aunque estoy casi segura que Missouri está esperando la llamada.

Levante la vista del libro con tranquilidad, para encontrarme con Dean sacándole una foto a su hermano, claro, entendía porque, Sam se veía demasiado gracioso con una cuchara de plástico (Que el mismo Dean se lo puso) en la boca. Santo cielo, uno no pude dormir tranquilo con Dean al lado.