Yo no solía ser así [Magcon Boys]

Capítulo 24

Me arrastré por las escaleras y abrí la puerta para encontrarme al último chico que esperaba ver hoy.

-¿Jack?

-Hola - dijo Gilinsky sonriente - Vengo de mensajero especial. - infló sus cachetes, orgulloso.

-¿Por qué no me has hablado por Whatsapp y ya está? - le pregunté

Él se quedó pensando unos segundos.

-Bueno... Ahora ya estoy aquí... Y seguro que no contestabas - rió

-Emm.... ¿Quieres pasar? - le pregunté rascándome la nuca

-No, seré rápido - asentí - Vamos a dar una comida navideña mañana, y los chicos quieren saber si vendrás.

-Emm.... No sé - dudé - Todavía no es Navidad

-Pero es que en Navidad algunos de los chicos vuelven a casa y no podremos cenar juntos.... Además será el cumpleaños de Nash, y queremos celebrarlo juntos.

-Tengo que preguntar a mi padre... - repondí

-¿Desde cuándo les preguntas a tus padres si te dejan salir? - alzó una ceja

-Desde que salí con vosotros y volví a casa borracha - reí

-Pero no saldrás solo con nosotros, tengo que presentarte a mi novia - hizo un puchero - No es bueno que salgas solo con chicos... Te volverás un macho.

-¿Y tú tienes novia? - levanté una ceja y el asintió - Pues no sé qué te ha visto - reí y él se llevó una mano al pecho haciéndose el ofendido

-Bueno... ¿Entonces vendrás?

-Veré que puedo hacer - le sonreí

-Vale, pues... Nos vemos mañana- dijo y dio media vuelta para irse.

Yo fui a cerrar la puerta pero él la frenó con la mano

-Una cosa más - añadió - Nash me ha dicho que te pregunte si tú sabes porque Hayes está tan raro desde esta mañana veo.

-N...No, hace una semana que no lo Adiós - le cerré la puerta en las narices, antes de que mi cara se volviera un tomate.

Me arrastré hasta la cocina y aproveché que me hubieran hecho levantarme para prepararme un sándwich de jamón y queso y comérmelo en el sofá viendo un episodio de Los Simpson.

Me comí el sándwich y lo que en teoría debía ser un capítulo acabó convirtiéndose en una temporada entera. Pero en fin, era lo que necesitaba para desconectar de estos días de emociones.

Mis parpados empezaron a caer, el sueño comenzaba a apoderarse de mí, pero cuando mis ojos consiguieron cerrarse, llamaron a la puerta, otra vez.

¿QUIEN ES EL MUGGLE QUE LLAMA AL TIMBRE A LAS DOCE DE LA NOCHE?

Pensé en que probablemente sería un pederasta violador, así que pasé de abrir.

Volvieron a llamar, más impacientemente. Me levanté sin hacer ruido y me acerqué a la puerta. Apoyé una oreja en ella y entonces volvieron a llamar mucho más fuerte, dándome un susto de muerte y provocando que cayera de culo al suelo.

-Joder - me quejé levantándome

-ABREME, AHORA - escuché los gritos de... ¿Matt? Desde el otro lado de la puerta.

¿Y este que quiere ahora?

Un nudo casi insoportable se formó en mi garganta.

Abrí la puerta lentamente y vi a Matt, con su móvil encendido en la mano, mirándome con la cara roja de furia.