¡Bendito Whatsapp! (EDITANDO Primera parte)

Cap.92

Narra Zeina

Despues de que Taylor me contara todo lo que había sucedido con su madre y la razón por la que había decidido alejarse por fin de esa horrible mujer, me sentía bastante molesta. ¿Por qué tenía que incluir a mi idiota hermano en algo tan rebuscado como una venganza? No podía tolerarlo. Solté un pesado suspiro y me senté en la orilla de la cama en mi intento de calmarme.

— ¿Estas bien?—me preguntó preocupado.

—Estoy bien, solo no logro encontrarle sentido a lo que me has dicho—resoplé y lo observé detenidamente. La ropa que usaba mi padre para correr le quedaba un poco grande, pero no estaba del todo mal— ¿Y tú?

—Yo...estoy bien—dudó alejando su mirada de la mía.

—No parece que estés bien. Debió ser difícil hacerle caso a tu madre todo este tiempo.

—Fue muy difícil. Si algún día tengo una novia, recodare ser comprensivo con ella—lo entendía, eso del maquillaje, los tacones, la ropa femenina y todas esas cosas a las que no prestaba atención eran una tortura.

—Tengo una duda—regresó su mirada hacia mí al instante—No entiendo como hacías que tu busto se viera tan convincente.

—Digamos que todo es gracias al maravilloso Japón y sus artículos para travestirse—rio nervioso. Como si hubiera esperado otro tipo de pregunta de mi parte.

—En fin, deja que te ayude un poco—me levanté de un salto de mi cama y busqué entre un cajón algunas cosas— ¡Aquí están!—exclamé sacando un bote de crema para desmaquillar, que tenia de la vez que Troy perdió una apuesta con Jaden y termino maquillado, junto con unas tijeras.

—Entiendo lo de la crema, pero...—tragó saliva— ¿Para qué son las tijeras Zeina?—una sonrisa nerviosa surcó sus labios.

— ¿No es obvio? ¿No quieres olvidarte de Patsy y por fin ser tú? Necesitas un cambio radical de apariencia—negó rápidamente y se subió a la cama para refugiarse en la esquina como si sirviera de algo.

—No sé si quiero cortar mi cabello. Además preferiría ir con un especialista—argumentó abrazando una almohada.

—Pero si lo dejas largo, tu madre podría encontrarte—no estaba segura que fuera a buscarlo, pero por si acaso. Ya teníamos suficientes problemas escondiendo a Arien, como para arriesgarnos más—No lo hago tan mal—hice un puchero—una vez entre Troy y yo le cortamos el cabello a Jaden. Le quedó tan bien que ahora siempre viene conmigo—sonreí triunfal. Aunque no parecía convencido— ¡Solo ven aquí de una vez!—jugué a ser el policía malo y sirvió. El pelinegro se bajó de la cama y se sentó en la silla.

—No lo cortes mucho—susurró asustado por mi maravillosa mirada malvada.

—Lo cortaré como crea que te quedar bien Taylor—tenía una idea en mi mente que haría que se viera genial—ahora solo quédate calladito o no respondo por los malos cortes que haga porque me distraigas. Sonreí al ver que palideció. Había olvidado lo divertido que era tener un amigo solo para mí.

***

La clase de ballet había terminado y ahora solo estábamos esperando a que nos repartieran los papeles para la presentación de El lago de los cisnes. No me importaba mucho el papel que me dieran, siempre que pudiera bailar, yo sería feliz.

—Zeina Phoenix tu serás el cisne blanco por tu destacado desempeño en las clases—parpadeé incrédula. No me esperaba que me dieran uno de los papeles estelares—Y Patsy Roberts será el cisne negro—miré a la tímida niña de cabello negro que estaba a mi lado—Recuerden decirle a sus padres sobre esto y entregarles las hojas de consentimiento—Todos dijimos un claro "Si" a coro y corrimos a cambiarnos.