Delito no evidente

No quiero un equipo

-Buenos días Jenny.
-Buenos Sandy...
-¿Andamos bien?
-No.
-Me imagino, están esperando y llegas tarde.
-Seguro, dime algo que no sepa.
-Hoy te ves devastadamente guapa -le guiña un ojo.
-Gracias.

Nuestra detective entra a la sala sin pedir disculpas, todos quedan callados de por si una vez que entra Jenny, le ofrece asiento Carl y ella no se hace esperar, se deja caer sin más, no esconde para nada el desagrado que le produce tener que trabajar en compañía. Anne no deja de mirarla, se preocupa.

-¿Y bien? -escupe nuestra agente.

Es claro que eso no es para nada educado e incomoda a los presentes. Carl suspira antes de hablar.

-Bueno Jenny, como bien sabes se te ha asignado un escuadrón para el caso del asesino de prostitutas.
-¿Qué? ¿Asesino de prostitutas? -se jacta Jenny.
-¿Entonces como llamarle sino...?
-¡Bah!
-Disculpe usted Carl, pero no me siento con las ganas de trabajar con una persona como la detective Jenny...
-¿Ah no? ¿Y dime tú cómo soy? Digo, ya que me conoces tan bien...
-Señorita, en mis diez años de oficial no había visto un desinterés por este trabajo tan inusual como el suyo sobre todo al estar al mando de un equipo en un caso, eso de llegar tarde no es éticamente profesional además de la indiferencia que muestra ante nuestra presencia ahora que estamos a su servicio.
-Oh disculpe señor usted por haber lastimado sus sentimientos y por no cumplir con sus expectativas como cabeza de este nuevo equipo...
-Por favor, vamos a comportarnos, así no llegarán al desenlace de su misión -les interrumpe Carl.
-Está bien, yo no dije nada -se defiende nuestra detective.
-Bien, te los presento. Ellos son Kira y Hall, los médicos forense. Él como ya lo conociste, es Ryan quien andará patrullando con Andy y acudirán a cualquier llamada que les hagas. Betsy estará en la oficina encargándose de la investigación desde aquí. A mi también me dan órdenes y van a acatar lo que se les mande ¿queda claro? Aunado a eso, Anne va a patrullar contigo desde hoy sin objeción. Ahora bien, vamos a revisar el caso con lo que tenemos hasta ahora...

Pasa hablando y hablando todo el tiempo que están ahí, ellos comentan, Jenny sólo los observa, sigue en shock, no puede creerlo... Un equipo y más con Anne ahora a su lado... Eso una injusticia según Jenny, pero debe permanecer impasible lo sabe, es de las mejores detectives de esa jefatura. Quisiera salir y azotar la puerta del despacho, no anda para nada de buen humor. Aún así se aguanta.

-¿Queda claro Jenny?
-Jenny... -intenta salvarla Anne.
-¿Eh? -la sacan de sus cavilaciones.
-Ni siquiera presta atención. Así no se puede trabajar -objeta Ryan.
-Si no te parece Ryan puedes ir buscando trabajo en otro lado, y si no tienes ni una pizca del interés Jenny podemos adelantar tu traslado y relevarte del caso, ustedes decidan -el comportamiento de ambos ha exasperado al jefe.
-Pff -se escucha la expresión de Anne.
-Muy bien, porque una vez que salgan de esa maldita puerta se van a comportar como los malditos oficiales que son y no me van a causar problemas, ¿entendieron? -termina Carl.
-Claro, si, seguro, si jefe -replican todos casi a coro.

Ahora todo silencio en la sala, claro que nuestra detective está indignada pero es muy orgullosa para dejar que se note que alguien ha logrado sacarla de sus casillas, claro está también que Ryan no le ha agradado a Jenny y el pensar que tendrá que convivir con él durante el caso le provoca náuseas. Se le ocurre que puede esmerarse suficiente y dar con el tipo antes de que cante el gallo. En sus veintidos años con ése trabajo ha mejorado bastante como para atrapar a cualquier malhechor y cualquier anónimo de maldad que le encomienden. Respira victoriosa para sus adentros con la esperanza que será tan rápido y fácil que no tendrá que soportar a su flota de subordinados por mucho tiempo, eso también para que no la trasladen pues ahora que ha encontrado a alguien no le apetece irse lejos. El recuerdo de Carol le reseca la garganta pues no hace mucho que discutieron, su primer disgusto ha sido demasiado amargo, más porque siguen sin ser nada en realidad. Le causa una tristeza que hasta lo siente en el pecho, ése vacío que ha venido sintiendo durante toda su vida y sin importar cuánto ha intentado escapar de ése espectro.

Mágicamente ha salido libre de la reunión, sin ningún rasguño ni nada que se le parezca, no agradeció nuestra detective al salir así como que no fue cortés ni al principio ni al final de la reunión con sus nuevos compañeros. Eso en realidad le tiene sin cuidado.

Desde que Carol apareció en su mente en la junta no ha dejado de pensar en ella, se arrepiente tanto de haber reaccionado así, se lamenta mucho quererla tanto y que no se pueda permitir sentimientos de ése tipo por miedo a pasar por lo mismo como ha venido sucediéndole durante años y años. Ya va para un lado ya va para otro pensando cómo rayos va a hablarle a Carol, qué puede decirle, cómo disculparse y de qué manera, cuáles palabras usar y el tono que pueda utilizar...