Settle Down |Malec-AU|

•XII•

Única observación en todo el capítulo-parte pondré así: (N/A: nombre de la canción ) para que sepan que va xd algunas no irán otras que si y otras con el pasar de los capítulos resultarán obvias. <3

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Parte II
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La mañana y parte de la tarde se la pasaron en dedicación a ellos mismo, mimandose entre ellos de manera casi ridícula pero sin rozar lo aburrido. Prepararon el desayuno juntos (Alec lo preparó en su mayoría mientras Magnus observaba los movimientos agraciados y sutiles del Nephilim) huevos con tostada y tocino con un delicioso jugo de naranja, el favorito del brujo preparado mayormente por su amigo Ragnor desde que descubrió que existía. Hace unos cuarenta y tres años, años antes de la muerte de un amigo que llego a conocer profundamente por casualidad de la vida y algo de magia.

Comieron tranquilamente hasta que a Alec, en un movimiento brusco en medio de risas cautivadoras, causo que lo restante de su jugo cayera sobre su camiseta azul y parte de su pantalón de pijama y que el vaso se hiciera añicos. Alec y Magnus se quedaron callados, ni uno con la valentía de decir algo hasta que Magnus esbozo una sonrisa ligera, una risa y por ultimo una carcajada completa haciendo que Alec lo siguiera.

- Bueno, ya iba siendo hora de alistarnos -. Dijo, limpiándose algunas lágrimas a causa de la risa, Alec dejo de reír para solo mirar embelesado al hombre frente a él, Magnus sintió un suave ardor en su rostro y añadió rápidamente poniendo sus manos debajo de su barbilla y los codos por encima de la mesa -. Ve. Yo me haré cargo de esto.

- ¿Y tú? -. Preguntó sin despegar su mirar de la del brujo -. ¿No lo harás?

- Yo me alisto rápido -. El brujo meneó la mano con la intención de restarle importancia -. ¿Qué? ¿Querías que me alistará contigo? -. Preguntó sin descaro, Alec sentía una calentura leve invadir sus mejillas para rápidamente pasar a ser un ardor en todo el rostro y diferentes gamas de tonos rojos en ello por la sonrisa divertida que Magnus tenía en su rostro.

Alexander se levanto ante la atenta mirada de Magnus, rodeando la mesa y dar un casto beso en los labios del contrario pero sin sobrepasar los límites establecidos; se separó con lentitud y camino rápidamente hasta el envoltorio del traje.

- Me bañare rápido para que tú entres.

Magnus asintió y vio a Alec desaparecer a sus ojos y entrar a la habitación.

...

Sentía el suave viento calar sus huesos como un cruel abrazo, metiéndose a la ducha con rapidez para quitar aquella sensación. Las gruesas gotas de agua de la ducha caer por su cuerpo rebajando al instante los nervios. Cuando salio de allí, ya pasados algunos minutos, vio él traje pulcramente tendido en la cama tal y como lo había dejado, sintió la suavidad de esta con las yemas de sus dedos. Lo observo un momento antes de salir de la habitación con unos pantalones holgados y una camiseta a por Magnus: