•Extra Sorpresa•

2.5K 183 49
                                    


Si, ya se que esta obra ya se termino y probablemente este en el olvido ya *siendo dramática* :v pero a pedido de varias es que lo hago. :'v disfruten y esta parte sigue en curso normal de la historia inicial. :3

----------★----------

Y un día, cinco años después de casados y cuatro de tener a Max a su lado, el pequeño brujo retoño de ambos, pregunto por un hermanito.

Alec que estaba en la cocina preparando la cena detuvo el cuchillo a medio cortar de una zanahoria. Magnus, aún con su hijo jugueteando con las cadenas de su cuello ajeno a toda situación de sus padres, miro de reojo a Alec.

El mayor de los Lightwood se acerco a ellos, con una suave sonrisa en la cara y los azules ojos brillar con amor. Un mantel en manos secandose el agua de estas ponerla sobre una silla cerca y avanzar hasta su familia. Arrodillándose en el suelo frente a su pequeña familia, el nene de solo cuatro años con la piel azul y los pequeños cuernos observándolo con curiosidad. Magnus tenia una sonrisa ladina en sus labios cuando Alec se acerco a un suave beso en ellos.

—¿Porque esa pregunta, Max?

El niño miro a su papá y luego a su padre, sus ojos azules como su piel brillaron entre alegres para luego pasar rápidamente a ser unos tristes.

—En jardín, muchos niños tienen hermanos ¡Muchos de ellos! Y quiero tener uno.

—¿Solo porque otros niños tienen uno?

—No —. Dijo Max, su mirada sorprendió a ambos padres, el anhelo en sus ojos y la determinación en ellos —. Solo quiero uno no por ellos, también para poder jugar con otro niño cuando este acá.

Alec sonrió a su esposo, una mezcla de diversión y cariño embargando cada tramo de su cuerpo.

—Papá —. Max llamo. Magnus desvío su mirada considerada de Alec hacia su hijo —. ¿Como se hacen los bebés?

Alec se atraganto, mordiéndose la lengua pata evitar reír ante la mirada de estupefacción de su esposo.

Magnus paso una mano por el cabello sedoso de su hijo, buscando una manera para evitar decirle que lo acogieron de casi morir en un callejón. sucio cerca de la basura con una nota de una madre rogando por su muerte. Una sonrisa divertida se extendió por su rostro al pasar su mirada a Alec. Alexander palidecio de inmediato, borrando su sonrisa.

—¿Porque no le preguntas a tu padre?

Max dirigió su vista a Alec esperando una respuesta. .

—Un día... —. Comenzó Alec —. Me encontré una sandía.(*)

Magnus cerro los ojos, negando levemente intentando esconder una sonrisa.

—Y sabes que a nosotros nos encanta la sandía, pero fue grande mi sorpresa que al abrirlo ¡Tú estabas en él! ¡Y me sorprendió mucho encontrar a un bebé en una sandía! Así que no pudimos comerte...

Max escuchaba atentamente, conmovido por las palabras que Alec decía.

—Alec...

Alexander tapó las orejas de su hijo para evitar que escuchase a lo que Max protesto —. ¿Que pasa, amor? ¿Prefieres que le diga sobre la cigüeña? O algo parecido a lo que hicimos anoche...

—¡Alec! —. Magnus rió, observando la leve molestia de su hijo.

—Bien —. Alec beso a Magnus con suavidad, saco las manos de las orejas de Max y dijo:—. Max, verás... Cuando una mamá y papá se quieren mucho...

Settle Down |Malec-AU|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora