CAPÍTULO 2

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Lion.
















—Estaba en la esquina y luego Marco se vomitó en la silla y Linda se acercó y me quedé bailando con Simón y Alicia brincó porque vió al amiguito de Ricardo en el...—

—¿Qué?

—Y yo grité, ¡no te olvidaremos gusanito! Y Bob empezó a llorar y luego...—

—Estás grave, niña.

Jannine detiene su parloteo y después se pierde, mirando la nada.

Ya llevaba más de cinco minutos diciendo puras incoherencias. Luce tan graciosamente terrible ahora que, cualquiera que la viera en este momento, la confundiría con una  vagabunda o aseguraría que es la misma bruja de Blancanieves. No sé si reir o enfurecer por el estado en el que la he encontrado, pero me está costando mucho contener una carcajada en estos momentos.

Sus ojos desorbitados me están matando. Sin embargo me recuerdo a mí mismo que debo mantenerme lo más serio posible ante ella, para que entienda que esto no es un juego y que ya me tiene hasta la puta madre con sus escapadas. Desgraciadamente me recuerda tanto a mí cuando tenía esa edad...

Mi mirada no se aleja de ella. Jannine sigue con sus ojos entrecerrados, y tambaleándose de un lado a otro. Ya falta poco para que azote contra el suelo, eso seguro.

—Que... que... yo... ¿Qué me habías preguntado, Dexter?

Retrocedo, haciendo una mueca de asco. Esta chica huele peor que Rj cuando bebe, y eso ya es mucho decir.

—¡Ugh! ¡Tu aliento a alcohol casi me deja ciego! — esboza una sonrisa apenada cuando levanta la mirada—. Dije... ¡¿Que en dónde demonios estabas?!

— ¡Aaaah, eso! Yo...— trata de sostenerse con su mano sobre el brazo del sofá, pero parece que esos tacones que trae puestos, no le ayudan mucho ahora para poder mantenerse firme —. Te dejé una nota diciendo que estaría con Linda.

Apenas logro a entender lo que dice. Le hago una negativa con la cabeza después.

—¿Y Linda vive en un maldito bar o a dónde más fuiste?

Tuerce los ojos con fastidio.

— Sólo tomé dos tragos, Lion. No empieces.

—Más bien dos botellas.

Provoco que me mire completamente indignada, pero no me importa.

Me parece el colmo que ella se quiera creer la víctima ahora.

—¡Si haya sido así no tiene nada de malo!, ¡no te importa! ¡Además  no ocurrió nada malo como piensas, sólo salí  con mis amigos!

Una risa se me escapa después y ella parece enfurecer más por eso, pero sigo sin darle importancia.

— ¡¿Llamas amigas a una bola de callejeras que lo único que hacen es descarrilarte de esta manera?! ¡Mira sólo la forma en la que llegas últimamente, Jann!, ¡¿no te da vergüenza?!

La escucho reir ahora a ella, eso aumentando la frustración dentro de mí.

— ¡¿Estás seguro de que quieres hablar de eso ahora?! Porque, si nos ponemos a comparar entre lo que pasa contigo y conmigo... te puedo apostar a que ambos sabemos cuál es la única respuesta que puede acabar con esta discusión fácilmente. Ambos sabemos muy bien... quién es el que va por un peor camino.

Me quedo mudo, sintiendo cómo si me hubiesen tirado algo muy pesado encima, y para tratar de soltarle un ataque mas que pueda dejarme ver mas estúpido y culpable... sólo me limito a apretar mis puños a los lados y a mirarla fijamente por un largo e incómodo momento, en dónde los fantasmas de mi pasado empiezan a resonar con más potencia la voz de su reprimenda dentro de mí.

✔️DANGEROUS WORLD (Completa) Where stories live. Discover now