Ya estaba listo para llevar el noviazgo a otro nivel. Y uno de ello es: Matrimonio.
Ha estado pensándolo demasiado, y descubrió que ama a Álvaro más de lo que debería.
Quiere casarse con el. Llevar un día de trabajo y que él lo espere con le cena y que sus hijos se abracen a él y besen su mejillas. No quiere tener un solo hijo, quiere tener muchos más. ¿Tres? ¿Cuatro? ¿Diez? Okey, déjenlo soñar. Tal vez podrían tener dos de ellos y adoptar. No es tan difícil, está en una buena posición económica, y podría mantener a todos los niños del orfanato si quiere.
En fin, el y Leo se encontraban en ese lugar a comprar el gran regalo que le tenía a su novio. Quería el más bonito de todos y el precio realmente no importaba.
"¿Qué te parece este? Digo, es bonito y en su dedo cabría perfectamente" Se acercó a Leo y miro el anillo que este le enseñaba. Hizo una mueca, no le gusto. Su novio merecía al más hermoso y elegante y hermoso. Casi tanto como el.
"No. Sigamos buscando." El y su amigo siguieron buscando hasta que el empleado de ahí con barba y como de su edad, se acercó a ellos y les sonrío.
"Hola, ¿Qué es exactamente lo que están buscando?" Preguntó el joven amablemente.
"Buscando un anillo de compromiso. Quiero que sea bonito y pequeño..." Explicó "Mi novio es pequeño así que..." Se encogió de hombros. El hombre sonrío "El precio realmente no importa"
"Bueno, aquí tenemos muchos de esos. Tenemos con piedras y sin piedras, las piedras son blancos, dorados y plateados. Depende del color que me guste a su pareja..." Explicaba mientras que el joven sacaba de la vitrina varios anillos pequeños. Con piedras blancas, plateadas y doradas.
Había uno que le gusto demasiado. En anillo era pequeño y podría caber perfectamente en él dedo de su novio. Tenía una piedra de diamante blanco.
El anillo es hermoso y espera que a su novio le encante tanto como a él le gusto.
"Quiero ese" El hombre asintió y fue a poner el anillo en una cajita aterciopelada color rojo.
Pagaron y fueron a casa de German.
(...)
Fue envuelto por los pequeños brazos de su hermoso y futuro prometido.
Le envolvió el abrazo y beso sus mejillas y acaricio su pancita, ya se notaba cada vez y eso los ponis felices a ambos y muy nerviosos.
"Hola. ¿Dónde fuiste?" Le preguntó el menor. German camino a la sala principal y se sentó en el sillón, jalo del menor y lo sentó en su regazo, enterrando su cara en su cuello e inhalando su delicioso aroma.
Álvaro río por qué la respiración de German le daba cosquillas.
"¡Basta! Me haces cosquillas" Río.
German lo miró y también río.
"Fui... por ahí..." Curioseo al menor.
Álvaro se cruzó de brazos y arrugo su nariz. Viéndose malditamente adorable.
"Dime... Por favor" Rogó e hizo un adorable puchero.
Puchero que German mordió y lamió.
"Estaba trabajado. Y fui a comprarte una sorpresa" El menor de reincorporó y sus ojos brillaron.
¿Una sorpresa? ¿Qué será?
"¡Dime que es, dime que es!" Tomo de las mejillas de German y acercó sus rostro a el "Di que es" Se separó y el mayor negó con la cabeza.
"No, tienes que esperarte hasta nuestro aniversario" Dijo besando su pequeña y fría nariz.
"¡Falta mucho!" Chilló.
Germán río.
"Verás que dos semanas se pasaran bien rápido" Sonrío y beso su frente y labios.
"Dos semanas son como años" Volvió a fruncir el ceño.
"Ya veras que no" Beso por última vez sus labios "Ahora, quiero hablar con mi bebé" Bajo a Álvaro de su regazo y lo acostó en el sillón, alzó la camisa que traía puesta, que por cierto era suya y le quedaba enorme, y se sentó en sus piernas con cuidado y beso su pancita y empezó a hablar con su bebé.
"Hola bebé, ¿Cómo estás? Espero que bien, estamos emocionado por ya tenerte en nuestros brazos. Tu papi y yo te queremos mucho y te amamos. Siempre lo haremos. Nos has alegrado nuestra vida..." Beso su pancita repetidas veces y miraba a su novio de vez en cuando.
Entones, Álvaro sintió un pequeño tirón en su vientre. Jadeo y abrió los ojos en grande, miró a su novio y este estaba igual o quizá peor.
"¿V-viste eso...?" Susurró el mayor. El de ojos miel asintió y sintió sus ojos aguarse.
"Hola, bebé... Haz eso de nuevo..." Y como si fuera algo sobrenatural, el bebé volvió a patear y la pareja jadeo con sorpresa.
Estaban presenciando las primeras pataditas de su bebé.
"¡Está pateando!" Chillo y German lo miró. Estaban sorprendidos y emocionales el día de hoy.
Beso su pancita y subió hacia Álvaro besando sus labios con ternura y amor.
"Te amo, ¿lo sabías? ¿Ya te lo había dicho?" Junto ambas frentes y sonrieron.
"Yo tanque te amo. Te amamos"
Siguieron besándose y mimándose entre ellos hasta que se quedaron dormidos en el sillón.
![](https://img.wattpad.com/cover/88367500-288-k404789.jpg)
YOU ARE READING
My first love
FanfictionDonde Germán rompe con su ex después de que este le fuera infiel justo antes de que el de ojos cafés le pidiera matrimonio. Rehace su vida nuevamente, trabajando horas extras. Una noche encuentra al amor de vida. En la calle en donde un pequeño de...