MI DULCE LIZZY

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Solo era una invitación, no corría yo riesgo ¿o sí?... Ciel me lo advirtió y no hice caso... debí haber hecho lo que él me decía era lo menos que podía hacer... aunque fuera algo posesivo debí haberme quedado a su lado...

Acaso (TN) tendría que sufrir dos veces el mismo destino, ya había pasado algún tiempo en el que seguía viviendo con Alois Trancy, aquel conde extravagante que sus gustos eran de lo más sorprendentes.

(TN) se sentía atrapada quería volver con Ciel y los demás, quería ver al mismo Alois que había conocido aquella tarde, aquel que iba a visitarla a la mansión Phantomhive. Pero no era posible ya que la personalidad de Alois era otra, pareciera seguir siendo un niño caprichoso pero era totalmente dominante y posesivo.

Aunque lo que más la aterraba de ese lugar eran los sirvientes de Alois los cuales no dejaban de vigilarla, aunque ella no intentara escapar. Las palabras que Alois había susurrado esa vez, estaban grabadas en su inconsciente:

"Tú eres frágil, me necesitas", "Eres débil, no puedes valerte por ti misma", "Eres inocente, yo te debo cuidar y proteger"

Todas esas palabras se repetían en su cerebro, y todo lo que sabía era que Alois la cuidaba del mundo exterior, ya que supuestamente había enfermado al ir a visitar su mansión, y no podía dejarla ir hasta que se recuperara.

(TN) no podía creerlo, algo en su corazón le decía que tenía que ser mentira, pero la pequeña parte frágil de su espíritu ya había sucumbido al control de Alois.

Cada noche (TN) era abusada por el conde, quien siempre le invitaba a tomar el té que Hana se ocupaba especialmente de preparar. Cada vez que bebía aquel té era sumergirse en un trance, era obedecer lo que Alois le decía y ordenaba, su cuerpo se comenzaba a acostumbrar a ese juego, cada mañana al despertar era pensar que estaba enferma y que no podía salir de ahí hasta recuperarse, era estar confundida y no saber si agradecer a Alois por sus cuidados o huir de él por sentir que en algo había cambiado.

Sin duda el destino se volvió a repetir una noche de tormenta, Alois estaba con (TN) en el cuarto, como siempre (TN) estaba en trance con una lujuria desbordada, Alois ahora jugaba con la boca de (TN) quien estaba en una posición de cachorro lamiendo el erecto miembro de Alois como si tuviera un caramelo enfrente.

Cuando acabo, Alois se retiró dejando a (TN) acostada en la cama, quien seguía con los ojos abiertos en trance, hasta que una voz la saco de aquella hipnosis.

- Así que aquí has estado... pero mira lo que te han hecho han manchado esa hermosa figura con su maldad.... Creo que debemos hacer algo antes de que te lleve con el joven amo.

Ella parpadeo y busco la fuente de la voz, sin duda solo vio una masa negra moverse, trato de gritar, pero todo se movía tan rápido que lo único que pudo ver antes de caer desmayada fue plumas negras revoloteando a su alrededor luego un chispazo de luz blanca y nuevamente todo negro...

Cuando volvió a despertar, esta vez se hallaba en una habitación diferente, pero reconocía el decorado y las cortinas que se ocupaban en la mansión Phantomhive, viendo a su alrededor suspiro de alivio y creyó que todo era un simple sueño, una simple pesadilla.

- Me alegra que despertaras – escucho decir a una voz conocida a su lado.

- ¿Ciel...? – pregunto mientras se incorporaba en la cama.

- ¿Cómo te sientes? – pregunto el conde con algo de preocupación en su voz.

- Bien, solo un poco cansada – agrego (TN) – ¿Qué pasó?

- Al parecer te desmayaste cuando volvías de la ciudad, tenías fiebre y aun así decidiste irte, Sebastian había salido a buscarte porque no volvías, cuando te encontró estabas muy mal, ardías en calentura y estabas muy pálida, dormiste por tres día – respondió Ciel mientras acariciaba la cabeza de (TN).

YANDERE BOY'SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora