YANDERE BOY'S

LIBERTAD A MI LADO

Entrenar, entrenar y entrenar, era lo único que hacía yo, nada más ir y venir, disfrutar de la vida, nunca pensé que dentro de su dulce sonrisa hubiera una inmensa oscuridad... Según él dijo que sería libre... pero solo a su lado

- ¡Makoto! ¡Haru!

Al escuchar esa voz burbujeante familiar, Makoto volvió la cabeza para mirar por encima del hombro y una sonrisa floreció en su rostro. Haru reflejó sus acciones, alejándose de toda la parte sonriente.

Venía caminando hacia ellos una chica un poco más joven que ambos muchachos que se encontraban en aquel lugar; tenía unos ojos brillantes color almendra que brillaban cuando el sol caía sobre su cara.

Esa sonrisa que no pensó volver a ver, ese cuerpo tan hermoso y simplemente esa dulce voz, Makoto se sorprendió a sí mismo pensando en lo hermoso y brillante que el mundo se hacía de repente. Sintió la mirada de Haru disparándole, y él solo lo ignoró. Su sonrisa creció.

- (TN) -chan, Hola!

- Hola. -Haru saludo sin decir más.

- ¿Cómo están? han pasado años desde la última vez que los vi.

- Sí – asintieron los dos.

Los tres chicos continuaron caminando, mientras platicaban animadamente. Aunque solo dos de ellos pues Haru, que parecía desinteresado, se volvió mirando hacia el océano resplandeciente en la distancia.

- ...Así que estaré en la competencia este año – dijo (TN) con orgullo, a lo cual Makoto se asombró.

- Wow... eso es interesante, eso quiere decir que competiremos entre nosotros – agrego él finalizando con una sonrisa.

- Lo sé, hace mucho que dejamos la escuela, me alegra volver a verte – agrego ella con alegría.

Makoto no recordaba cuanto había pasado desde que él había dejado de verla, para él parecía que no había pasado el tiempo, se fijó más en ella observándola de pies a cabeza, reconfirmando lo que ya sabía desde hace mucho.

- ¡(TN)!

Un grito llamo de pronto la atención de aquel trio, la atención de (TN) se desvió hacia el joven que venía hacia ellos.

- ¡Yamazaki! – grito (TN) con alegría, mientras lo saludaba de lejos con la mano.

Makoto se quedó viendo como el sol colocaba sus rayos sobre (TN) dándole un aura de color dorado que la hacía verse más linda.

- Pensé que no llegaría a nuestro lugar de encuentro – dijo el chico con una suave perdida de aliento.

- No te preocupes, yo apenas iba para allá.

- Bien, bueno vámonos – dijo alegre el otro muchacho.

Makoto que se había quedado pensativo no reacciono hasta que una risa alegre estalló a su lado.

- ¡Está bien, Yamazaki! – (TN) se volvió hacia el dúo. - Makoto, Haru, los veré en la competencia ¿de acuerdo?

Siendo esas sus últimas palabras para los dos, ella saludó con la mano y corrió hacia adelante, dejando a Makoto mirando a su figura distante. Sin embargo, dentro de Makoto, la voz de la conciencia o tal vez del deseo, no pudo evitar pensar.

"¿Por qué no puede ser solo para mí? ¿Por qué no puedo escucharla solo yo?" a lo cual soltó un leve gruñido; que, al darse cuenta, se reprendió mentalmente por su egoísmo y siguió caminando, sintiendo otra mirada de Haru.