Cuarenta y cinco

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Camila POV

Terminé de acomodar la ropa que llevaría a Vancouver, después de todo la señora Grant se había encargado de convencerme de que la única forma de superar a Dua era alejándome de ella, no verla más ni siquiera a distancia.

Escuché que alguien llamara a la puerta, debía ser la señora Grant.
Caminé hacia la entrada de mi departamento.

"Ahora voy, un segundo".

Retiré el seguro y abrí, sin esperar encontrarme con esa mirada café.

Era Dua.

"Camila..." sólo logró pronunciar mi nombre antes de que yo cerrara la puerta frente a ella.

"Vete" le pedí. Seguramente no esperaba mi reacción porque no me detuvo la puerta. Escuché que ella tocara de nuevo la entrada de mi departamento.

"Camila, por favor, necesitamos hablar".

Esa voz rota me lastimaba, y sí, tenía que admitir que quería abrir la puerta y abrazarla con todas mis fuerzas. La extrañaba tanto.

"Dua, sólo vete de aquí".

"Amor, no me hagas esto" suplicó.

"Lo mismo te pedí".

"Perdóname".

Me aparté de la puerta y escuché de nuevo que me llamara. Sólo cerré los ojos y negué.

"Camila, te necesito, por favor...no me dejes, no lo hagas, te amo".

Escuché que comenzara a sollozar, ahogando sus palabras entre sí.

Lo único que nos separaba ahora era esa puerta y los recuerdos de lo que me había hecho. Me dolía, me sentía una masoquista por querer regresar a ella.

¿Sólo ella cometió los errores? ¿o yo también soy la culpable?

¿Qué debo hacer?

Quiero creer que ella me ama en verdad, que sus palabras son ciertas porque yo si la amo, la amo incluso con sus demonios y esas sombras que la persiguen del pasado.

"Te amo, te amo...te..." no permití que continuara en el pasillo del departamento, sólo abrí la puerta y ella al verme en el umbral se sorprendió.

"Si vas a entrar quiero que me hagas sentir que no estoy cometiendo un error" ella no lo dudó ni un segundo, comenzó a besarme mientras entraba al departamento, cerrando detrás de nosotras para recargarme contra la puerta.

"Te amo" me repitió una vez más sobre mis labios.

Estaba hambrienta de mis besos y me desvanecía entre sus suaves caricias que jugaban por encima de mi piel.

La sentía en cada parte de mí.

Sus labios fueron bajando al mismo ritmo en el que ella comenzó a arrodillarse ante mí, me sostuve en la puerta y ella continuó avanzando hacia abajo, lentamente y con delicados toques entre mis piernas.

Sus manos se dirigieron al botón de mi falda y la detuve al instante. Levantó su mirada hacia mí, bajando su agarre a mis zapatos altos para retirarlos fuera de mi cuerpo. Acarició del talón hacia la parte superior de mi pierna por el lado trasero, causando cosquilleos ligeros que me hicieron doblar un poco las rodillas, pero me sostuve en su cuerpo y comenzó a subir de nuevo junto a mi, separándonos únicamente por la tela de la ropa.

Sujetó mi cabello en la parte trasera y fundió su boca en la mía, arrancándome la respiración y compensando su fuerza con los juegos que inició con su lengua.

La empujé y ella comenzó a retroceder, entre los muebles y sosteniéndose de la pared me correspondió, y sin esperarlo tropezamos con algo, cayendo al suelo y reteniendo el dolor entre los jadeos que ya formabamos por la intensidad de nuestros besos y caricias.

Yo estaba encima de ella, liberándola de la ropa que me estorbaba y ella respondiendo con desesperación, buscando mis labios como si fueran el aire de sus pulmones. Estabamos haciéndolo sin cuidado, sin importar los moretones que se formarían o los músculos que nos dolerían después. Sus dedos dibujaron líneas sobre mi espalda que ya se encontraba desnuda, mi pecho hirviendo se unía al de ella y nuestras piernas se enlazaron. Los suspiros pesados se escapaban entre nuestras bocas, y los ojos cerrados se presionaron al sentir la furia de nuestros cuerpos reaccionando después de haber estado lejos durante semanas.

Cambié la posición en la que nos encontrábamos, ahora ella estaba arriba mientras que yo rodeé mis piernas en sus caderas, repasando mis dedos por su duro abdomen que se contraía al sentirme. Su respiración agitada chocaba en mi cuello y sus dedos buscaron mi entrada. Su juego inició ahí pero pronto se humedeció más por mí.

"Te deseo...solo hazlo".

Alguien llamó en la puerta y me aferré a su cuerpo cuando ella comenzó a entrar en mí, lentamente.

Mis dedos marcaron su espalda y ella aumentó el ritmo de sus movimientos, provocando miles de sensaciones placenteras adentro de mí.

"No pierdas...ese control".

Ella continuó jugando con mi entrada hasta que retiró completamente sus dedos. Busqué tocarme pero ella me apartó las manos y yo giré de nuevo sobre nuestros cuerpos.

Ahora ella estaba debajo de mí y al sentir la presión de mi cuerpo, continuó su camino de caricias hacia mi trasero para presionarlo y unirme a su intimidad. Sus dedos viajaron de nuevo a mi sexo con detenimiento hasta entrar a mi vagina, mientras que con otro de sus dedos me estimulaba.

Sus caricias en mi interior aumentaron cuando sintió mi agarre en sus hombros.

Afuera la persona insistía, hasta que escuché su voz. Era Elizabeth Grant.

"No te detengas" le advertí a Dua. 

Y continuamos.

Uní mis labios a los de ella y empujé mis caderas a sus dedos. Continuando con el balanceo hasta comenzar a recargarme en su cuerpo, Dua aumentó el ritmo y mis sentidos ya se encontraba fuera de si mismos, mi vagina rodeó sus dedos y sentí la primera tensión sobre mi espalda, mis piernas tiraron hacia adelante y cerré más mis ojos, presioné mis labios antes de liberarme. Como si se tratara de una canción, alcancé el jodido orgasmo en el mejor momento, corríendome encima de la mujer que sonreía perdida al escucharme gritar su nombre.

Caí sobre su cuerpo y comencé a acariciarla. No quería detenerme.

"Maldita sea...Cabello, abre la puerta ahora mismo" Elizabeth se escuchaba molesta.

Sujeté la mano de mi amante y subí mis labios a los de ella.

"Hazme tuya una vez más" sus brazos me rodearon para atraerme lo más cerca posible, besándo mis labios para arrastrarme a la cama.

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Holaaa

FELIZ INICIO DE AÑO 2018 WUUU!!!

¿Cómo le fue ayer? Hoy? Yo estuve bien, comiendo hasta morir ahre

Aquí les dejo el primer super helado del año y mis mejores deseos para ustedes que son re goals yaaas 🍨🍧🍦

Dua estuvo escuchando música latina en fin de año baia baia
Camila perfecta con ese vestuario y las notas altas en el evento de ayer

Según el Top de Spotify Mundial de artistas femeninas más escuchadas hoy 1 de enero fue:
Primer lugar: Havana by Camila Cabello
Segundo lugar: New Rules by Dua Lipa

Cof cof para cuando la colaboración?

Falta menos para el video de idgaf y el primer álbum de camila yaaas

Ba bai 🙌🙏🙋

50 sombras de Dua • duamilaWhere stories live. Discover now