III: Daddy

13.9K 681 44
                                    

×××

"Daddy por favor... "

×××

Niall comenzó a desabrochar su camisa dejando su torso expuesto, era un hombre al que le gustaba trabajar su cuerpo y por eso poseía una figura que podía traer loca a cualquier mujer.

Bambi mordió su labio y movió sus caderas generando un leve rose de las sábanas contra su intimida. El hombre la tomó de sus piernas y comenzó a dejar besos pesados por toda su piel expuesta. Subió hasta llegar al borde de sus medias y se las quito con delicadeza dejando expuesta aquella piel pálida y suave.

Siguió con sus besos subiendo por sus piernas hasta llegar a sus muslos, sus labios succionaban y mordisqueaban la piel de la joven provocando suspiros de placer por parte de Bambi. Cada vez se encontraba más cerca de aquel lugar que palpitaba impaciente por atención.

Niall pasó su lengua sobre la suave tela de aquel pequeño tanga y Bambi se encorvo del placer. Niall subió por su vientre pasando su lengua por la piel expuesta y dejando nuevamente pequeños besos, la joven mordía su labio para evitar gemir, la estaba segando completamente.

Llegó a sus pechos y tomó sus pezones entre sus labios sobre la tela. Ella gimió al sentir como los tironeaba e intento bajar sus manos a su cabello pero él la detuvo y las atrapó nuevamente sobre su cabeza.

—Shh... Quieta —le ordenó para luego sonreír con su mirada llena de deseo, estaba completamente cautivado por aquella joven a su merced.

Viajo a su otro pezón y repitió la acción causando esta vez que la joven se encorvara mordiendo su labio. Subió por su cuello y pasó su pulgar por los labios de Bambi para que dejara de morderlos.

—No te limites, quiero oírte.

Ella trago saliva y asintió levemente, sintió los labios de Niall nuevamente sobre los suyos y cerró sus ojos. Nuevamente se perdía en aquel sabor fuerte que el licor había dejado en la boca del hombre.

Niall sostenía su cuerpo con sus brazos a cada lado del cuerpo de la joven mientras la besaba con deseo, con una de sus manos la libero de su prisión y ella rápidamente atrapó su cuello para seguir besándolo.

Comenzó a besar y mordisquear la pálida piel de la joven mientras bajaba una de sus manos por su vientre hasta llegar a su sexo. Comenzó a acariciar sobre la tela con lentitud y fuerza a la vez escuchando los suspiros y gemidos de la joven en su oído.

—Daddy...

Estaba completamente segado por la excitación, deseaba tanto follarla con fuerza en aquel momento, pero tan solo se contenía mentalmente para no obedecer a su cuerpo. Debía ser cuidadoso.

Se deshizo del sujetador que para su suerte tenía gancho delantero y dejó expuesto sus senos. Comenzó a lamerlos, succionarlos y mordisquearlos para sentir con la joven apretaba sus brazos intentando aguantar todo el placer que le estaba proporcionando.

Bajo separando aún más las piernas de la joven y corrió la tela de la prenda que estorbaba. Acercó su rostro a su palpitante centro y el calor de su respiración la estremeció.

Bambi observaba a aquel hombre entre sus piernas y se retorció al sentir como la invadía con su lengua, aferró sus manos a la cama y comenzó a tironear de las sábanas. Niall se deleitaba con cada lamida, cada mordida, cada succionada que le daba a aquella pequeña que tenía entre sus brazos.

Sintió su lengua ser apretada por el interior de Bambi y se separó dejando pequeños besos por sus muslos. Estaba más que lista para recibirlo y él estaba más que ansioso por hacerlo.

Se deshizo de su ropa mientras Bambi lo contemplaba determinadamente, podía ver como sus músculos se tensaban y como no quitaba su mirada de su cuerpo.

El hombre tomó un preservativo y se lo colocó para luego acomodarse entre las piernas de la menor y rosar sus sexos. Estaba demasiado lubricada y sabía que eso lo ayudaría a que las cosas fluyeran de una mejor manera.

Atrapó sus labios nuevamente y comenzó a besarla con fuerza a medida que comenzaba a penetrarla sin detenerse hasta estar por completo dentro de su cuerpo.

—Dios... —Bambi gimió rompiendo el beso al sentir como el miembro de aquel hombre la invadía y se abría paso en su interior. El dolor y el placer se mezclaban combatiendo por tener lugar en su mente. —Daddy...

Niall apretó sus manos sobre la almohada y comenzó a mover sus caderas de manera lenta, esperando que recibiera su miembro y lo amoldara a su gusto.

Los gemidos de dolor comenzaban a volverse continuos y de placer, Bambi lo estaba recibiendo de una manera increíble y eso lo encendía más de lo que ya estaba. Su cuerpo lo apretaba con fuerza y causaba la mejor sensación que su miembro había sentido.

— ¿Quieres más? —le susurro de forma caliente contra su cuello mientras lo mordía y succiona a. La voz gruesa y excitación de Niall tan solo causaba deseos de sentirlo aún más.

—Si Daddy, por favor... Dame más... —el comenzó a aumentar sus moviéndose volviéndolos continuos y a mayor intensidad. —Oh dios... Si...

Bambi busco los labios del hombre y comenzó a besarla con fuerza ahogando sus gemidos, se sentía de una manera increíble, su cuerpo temblaba y el placer la invadía de forma abrupta.

Ambos comenzaron a sudar y jadear de manera continua, Bambi apretó con fuerza la espalda de Niall y se encorvo al sentir como este aumentaba volviendo sus movimientos estocadas profundas y fuertes.

—Así hermosa... Gime para mí... Dile a Daddy que te gusta...

— ¡Daddy! ¡Dios! —Bambi aferro sus piernas a su cadera para poder empujarlo con sus pies aún más dentro de ella, anhelaba sentirlo más tiempo, más profundo, invadiendo su cuerpo y llevándola a un mundo desconocido, un mundo donde el placer la dominaba, donde Niall era el único que podía hacerla sentir así. —No resisto... —Sus pechos chocaban y sentía como su cuerpo cada vez se tensaba más y más.

—Córrete Bambi, Córrete para mí... —Ella gimió y aferro sus manos al cabello de Niall tironeando con fuerza, encorvo su cuerpo hundiendo sus pies en la cama y grito del placer al sentir como el orgasmo arrasaba con ella.

— ¡Daddy! —Niall tiro su cabeza hacia atrás y tenso su mandíbula al sentir como el orgasmo de Bambi lo guiaba al suyo.

—Maldición... Si...

Sus respiraciones estaban completamente aceleradas, las piernas de Bambi temblaban al igual que todo su cuerpo, vio como Niall salía de ella y se quitaba el condón para luego recostarse a su lado.

Niall la miró y la tomó de sus brazos para recostarla sobre su pecho y dejar un pequeño beso sobre su cabello. Bambi podía oír perfectamente aquel ritmo acelerado que poseía su corazón. Cerró sus ojos y se dejó llevar por la calma que invadía la habitación.

Niall contemplo a la joven quien descansaba a su lado, dormida en perfecta calma, toda la tensión que tenía acumulada en su cuerpo ya no se encontraba, pero algo lo atrapó. El observar a la joven con sus ojos cerrados y su rostro relajado le hizo sentir paz, una paz que lo acogió y lo golpeó, una paz que no había sentido desde hace mucho tiempo.

Se levantó con cuidado y cubrió el cuerpo de Bambi con las sábanas, camino hacia el mueble y se sirvió otro vaso de whisky. Se sentó en el sofá frente al ventanal y suspiró.

¿Cómo había llegado a ese punto? ¿Cómo es que un hombre como él no había logrado encontrar una mujer como ella durante tantos años? ¿Por qué la había encontrado en aquel lugar?

Giro su vista hacia la cama y sonrió al verla aún dormida. Era muy hermosa, muy delicada, perfecta en toda su anatomía y era solo para él.

Valley of Angels © |njh|Kde žijí příběhy. Začni objevovat